There's No Place Like Home [Larry Stylinson]

SIETE.

Los últimos días después de Louis haber comprendido un poco sus sentimientos, habían estado normales, H y él iban de un lado para otro juntos todo el tiempo, la verdad es que a Louis no le molestaba el alfa, era como un cachorro cariñoso y gracioso, su compañía era tan agradable para él. En su vida siempre había estado solo, tenía sus primos si, pero no es lo mismo que tener a H ahí para él, siempre recibiéndolo con una sonrisa, siempre siendo amable con él, siempre tratando de protegerlo incluso cuando no lo necesitaba.

Era tarde ya, cuando Louis había terminado de trabajar, hoy fue un día fácil, el trabajo no fue tan pesado así que, Louis regresa casa a contento, encontrándose a un H aburrido leyendo en la cama.

Louis sintió algo de lastima, sabía que H no podía hacer muchas cosas aquí, además él era la única persona con quién hablaba, también estaban Olivia y Liam pero ellos normalmente tenían sus cosas y tampoco podían estar con H todo el tiempo.

Cómo siempre H se emociona al verlo, así que suelta el libro y se levanta de la cama para recibirlo.

— ¡Louis!—se acerca a él para abrazarlo.

—Hola—le corresponde el abrazo.

Eso era otra cosa, no podían parar de abrazarse o querer estar cerca del otro todo el tiempo, lo cual no era muy fácil ya que Louis trabajaba todos los días.

Okay, tal vez si habían pasado cosas los últimos días, y era que se habían vuelto incluso más cercanos, no podían parar de tocarse. Nada había llegado a más allá, Louis no sabría si tendría el valor de ir más allá que un par de abrazos y a veces caricias. Louis no sabía que estaba sucediendo con respecto a ellos dos, pero no se quejaba, es más le gustaba.

Como vio al alfa tan aburrido anteriormente, a Louis se le ocurrió una idea para animarlo un poco. Ya que no tenían nada que hacer podría estar bien.

—H. ¿Vamos al lago?—pregunta esperando con emoción su reacción.

—Por supuesto—contesto el alfa igual de entusiasmado.

—Entonces vamos—cogiéndolo de la mano, lo saca del cuarto.

Louis prepara un par de cosas para llevar al lugar, como un paño, agua y algunos aperitivos, mientras el alfa solo lo miraba esperando a que terminara. Salen de la casa cerrándola, ya que no había nadie más ahí, por suerte su tío se la pasaba trabajando y H podía estar en la casa sin necesidad de ninguna pelea estúpida, mientras su primo Liam se la pasaba en casa de su omega Zayn.

Eso les dejaba más tiempo a solas a los dos alfas, lo cuál era bueno e incómodo hasta cierto punto.

A veces cuando Louis tenia un día libre del trabajo, o en las tardes cuando no había nada que hacer, se quedaban en la casa solos pasando el rato, pensando en algo que hacer, se había vuelto costumbre que a veces ordenaba un poco la casa o arreglaban una cosa juntos, lo curioso es que H parecía gustarle bastante hacer esas cosas, lo cual Louis no entendía porqué, era tan malditamente odioso y aburrido, también el alfa parecía tener un don natural para las matemáticas, cuando Louis estaba sacando cuentas sobre su dinero reunido, a H se le hizo realmente fácil responderle cuánto dinero tenía y cuánto dinero había gastado en los últimos días, era impresionante. (Muy útil también cuando lo intentaban robar en el mercado y él daba dinero de más sin saber cuanto era el precio original en realidad.)

También se la pasaban horas hablando, Louis le había contado a H, sobre su sueño de salir de este mugroso pueblo algún día, incluso le había confesado de su dinero guardado bajo el colchón, H simplemente había asentido sonriente y guardado su secreto felizmente.

Louis sabía muchas cosas de H, no las "importantes" como su nombre, su edad, o quienes eran sus padres, como fue en su infancia... Sino más bien, su manías, su hábitos, que comida le gustaba comer, que comida no le gustaba comer, que cosas los hacían enojar, que cosas lo ponían triste, como achinaba los ojos cuando sonreía, como fruncía la nariz y hacia una sonrisita de lado cuando intentaba ocultar algo, como le encanta dormir hasta tarde, y también como era perfectamente capaz de permanecer en si en una situación peligrosa.