Hermoso Desastre *Niall Horan Y Tu*

Capítulo 30

Bajé de la camioneta de Ashton aferrada al torso de Harry, con mis ojos aún llenos de lágrimas. Aunque no haya sido yo quien se llevó la peor parte del cautiverio, había sido la peor experiencia de toda mi vida y moriría antes de volver a repetirla. De una forma u otra, todo esto había causado un trauma en mi.

Apreté con fuerza los puños de la campera de Ashton y con la cabeza agachada, ingresé a la casa, preparada mentalmente para ver los rostros llenos de sufrimiento de mis seres queridos y allegados. Lo primero que logré escuchar fueron unos eufóricos gritos por parte de mi madre, mi padre y Anne, en cuanto Harry y yo nos acercábamos a los sillones. Como acto reflejo, mis padres se lanzaron sobre mi y comenzaron a llorar sin consuelo alguno mientras que besaban y acariciaban mi cabello. Me dediqué a abrazarlos y llorar a la par de ellos.

— ¡Esto es un milagro! — escuche gritar con alegría en su voz a Madison. Me separé de mis padres y corrí hacía donde estaba ella, para poder envolver mis brazos al rededor de su pequeño y delgado cuerpo. Mad me devolvió el abrazo y unos sollozos se escaparon de su boca.

— Te extrañé tanto — murmuré entre sollozos. Mad soltó una pequeña y delicada risa, mientras que me sacudía entre sus brazos. Al menos ahora la podía sentir irradiando felicidad, no tristeza y depresión.

— Yo mucho más — habló con una sonrisa cuando me soltó de su agarre — Fue un día y horas que no te tuve conmigo y créeme que los sentí totalmente infernales, _________________ — añadió secando sus lágrimas. Sonreí ampliamente.

— Aunque haya sido el secuestro más corto de la historia, yo también lo sentí infernal y eso que no fue a mi a quién le tocó la peor parte — respondí lo suficientemente alto como para que la madre de Alison monte una trágica historia en su mente y se quebrara.

— ¿Qué pasó con ella? — susurró cerca de mi oído. No respondí, solamente me limité a soltar un largo suspiro — No estás intentando decirme que la asesinaron, ¿o si? — indagó alarmada, llevando ambas manos a la boca.

— No lo sé — susurré preocupada — La última vez que la vi fue antes de que la lleven a otro lugar, pero no estoy segura si aún continua con vida— añadí con cierta culpabilidad en mi voz. Si tan sólo la hubiese dejado salirse con la suya, nada de esto estaría pasando.

— Esto es raro, sabes — me miró confundida — ¿Por qué se la llevaron sólo a ella? — me encogí de hombros. No podía contar nada acerca del falso secuestro, John y el bebé antes de recibir testimonios por parte de Alison.

Ambas nos dirigimos en silencio hacía la sección funeraria, prácticamente, donde se encontraban los padres de Alison llorando como si se hubiesen enterado que habían degollado a Alison. Ninguno de ellos parecía conservar ninguna especie de esperanza. Creo que ambos sentían que Alison estaba corriendo más peligro que antes y presentían que no la volverían a ver jamás.

Me aferré nuevamente a Harry y posé mi cabeza sobre su pecho, mientras que Ashton contaba todo lo sucedido. Comenzó explicando la forma en la nos habían encontrado. Según el, luego de mi último llamado, la policía rastreó la llamada y de esa forma pudieron encontrar el lugar donde nos tenían secuestrados. Luego, continúo par la parte en la que revisaron aquel rancho y nos hallaron tratando de escapar. Pero en ningún momento habló sobre Alison, hasta ahora lo poco que todos sabían era que la habían trasladado hacía quien sabe donde.