Yo: en un hotel que se llama Rochester Concept en el centro de la ciudad
Carolina: no te creo
Carolina: dime en qué dirección estás?
Yo: Maipu 538
Yo: cerca a Florida con Corrientes
Carolina: veámonos en el Obelisco
Yo: Listooo , salgo para ya
Carolina: Yo también
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Camino por el centro de Buenos Aires, las calles son estrechas, las construcciones viejas pero lindas. Mi corazón late cada vez más rápido, pero necesito llegar entero a nuestro punto de encuentro. Las personas me miran preguntándose por qué la prisa.. Llego al Obelisco y definitivamente corrí mucho, mi corazón quiere salir de mi cuerpo, tomo bastante aire y me propongo calmarme y esperar tu llegada (y de paso no mostrar tantas ganas).
Pasan 10 minutos eternos y por fin te veo al otro lado de la avenida. Paso la calle corriendo y por fin te abrazo, no me quiero despegar.. así el calor de Buenos Aires lo pida. Quiero estirar este momento para toda mi vida, sería feliz muriéndome así.
Nos vamos a tomar un café, charlamos de todo y yo no dejo de mirarte y de desearte. Caminamos por la ciudad y se nos pasa el tiempo, ya son las 2:00 am y contigo el tiempo vuela. Increíble que esté pasando estos momentos a tu lado, no me cambio por nadie.
Te sugiero que sigamos charlando en alguno de los hoteles, lo piensas un poco y aceptas la proposición. Llegamos a tu hotel, pedimos una botella de vino tinto y nos besamos mucho.. me dices que solo sirva una copa de vino para ti y que tu quieres ser mi copa. Mi excitación sube mucho al escuchar tus palabras. Te sirvo la copa de vino y tomas un trago, me das un beso y me das a beber de tu boca. El vino se riega de tu boca y recorre la piel de tu cara.. tu cuello.
Hay que proteger tu ropa, hay que hacer camino a los besos, mis manos desesperadas abren tu blusa y retiran rápidamente el pantalón que tienes. Mis ojos se maravillan con la visión de tu cuerpo en la ropa interior que tienes puesta. No puedo hacer más que llevar mi lengua hasta tu piel, tomando el vino que ha quedado en mi copa personal.
Tu ropa interior es blanca inmaculada.. el brasier hace que tus tetas resalten mucho. El cachetero se te ve espectacular y cuando pido que gires para verte de espalda.. tu culo se ve maravilloso y provocativo. Mis manos se entretienen con el broche del brasier.. y la piel alrededor. Lo logro soltar y tu levantas tu cuerpo para que pueda quitarlo definitivamente. Acaricio tu espalda ya desnuda y mis manos llegan al panty; lo deslizo suavemente observando cómo queda tu culo visible.
De pronto volteas tu cara y me miras a los ojos. Esa mirada dice mucho aunque tus labios no se muevan. Mi cuerpo ya desnudo está al lado del tuyo y mi boca se dedica a tu boca. El contacto con tu piel es suave y mis manos exploran cada poro de tu cuerpo. Me encanta como mamas mi lengua. Mi verga está a punto de explotar. Mis manos se deslizan por la curvatura de tu espalda, agarran tu culo delicioso, acarician tus piernas.
Te beso y tu literalmente mamas mi lengua.. me encanta. Mi boca te corresponde. Mis dedos se escabullen entre tus piernas. Acaricio, exploro, masajeo. Siento la humedad de tu excitación y quiero probarla. Me llevo mis dedos a la boca y tienes un dulce sabor de hembra que me produce cosquilleos.
Decido ir a probar directamente a la fuente. Te dejo acostada sobre tu pecho y gentilmente abres tus piernas para permitir que mi cuerpo se acomode entre ellas. Mi lengua se dedica a tu culo, a tu chocha, mis dedos se pierden en ella y mis labios encierran tu clítoris.. Levantas tu culo para que pueda llegar más adentro y no pierdo el tiempo con mi lengua. Estoy extasiado con tus jugos de mujer. Empiezas a jadear y tus gemidos me exitan muchísimo. Mi verga está muy dura. El deseo me consume y en este momento en el universo solo somos tu y yo.
Hago que te levantes un poco más.. quedas en cuatro. Tomas mi verga con tu mano y la acercas a la entrada de tu chocha que está brillando de lo mojada. Siento la gloria cuando poco a poco te clavo. Tu chocha va apretando mi pene y mis manos se dirigen a tus tetas y a tu clítoris. Tu me dices que quieres que nunca acabe...
El calor de tu cuerpo me envuelve. Mi verga está completamente dentro de ti, trato de pegarme lo que más puedo a tu espalda para besarte, para lamer tu lengua, para escuchar tus gemidos. Mi cuerpo y el tuyo se mueven en un mismo ritmo. Es increíble la sensación de suavidad al deslizarme dentro de ti. Pellizco tus pezones y masajeo tu vulva. Me levanto de nuevo. Te tomo del cabello y me quedo quieto. Tu por instinto sigues moviendo tu culo hacia atrás y hacia adelante.
Lentamente te desprendes de mi y me dices que me acerque a ti. Me das un beso maravilloso mientras con tus manos acaricias mi verga húmeda. Acercas tu cara y la pasas por tu rostro, por tu boca. Tu lengua recoge las gotas que hay en la punta y tus propios jugos, me dejas la verga brillante de tu saliva y te dedicas a recorrerla a lo largo, hasta mis bolas. Tus manos se agarran de mi culo fuertemente y empiezas a mamarme delicioso. Yo que me había olvidado por un momento de tu placer por estar en el cielo me esfuerzo por acariciar tu cuerpo, llego a tu kukita y siento que estás completamente mojada, quiero darte el placer que estoy recibiendo.
Fácilmente puedo meterte tres dedos y los vuelvo a llevar a mi boca, me encanta el sabor de tu chocha ( ya lo había dicho? ). Otro dedo mío se desliza en tu culo y tu sigues ocupada de mi verga que ya entra toda en tu boca.
Mis manos toman tu cabello y hago fuerza para que lo metas más profundo. Volteas la mirada, sacas mi verga de tu boca y me dices que te gusta que lo haga. Vuelves a mi verga, la lames como si fuera un helado. Yo siento que no voy a aguantar mucho. Tengo todos mis dedos dentro de ti.. y tu a veces paras para sentir el placer que te doy. Te digo que no puedo aguantar más. Tu sigues como si nada. Siento como mi leche corre por mi verga y tu mamada no para. Tengo espasmos de placer. De tu boca corren hilos de mi leche, los recoges con tu lengua y los saboreas. Estoy en la gloria.
Estoy de espaldas y te pido que subas sobre mi. Con mis manos muevo tu cuerpo hacia mi cara. Tu sudor y tus fluidos dejan el rastro de tu excitación (nerviosismo). Mis manos rodean tu culo y mi nariz siente la cercanía de tu sexo. Tu me ayudas y te acercas aún más a mi cara. Mi visión de tu kukita es perfecta. mi lengua se acerca a ella queriendo comerla muchísimo.Mueves tu chochita sobre mi boca, disfruto del sabor de tu juguito del olor a sexo. Mi lengua penetra tu chocha, recorre cada rincón, sube hasta tu clítoris.. baja hasta tu culito.. estoy disfrutando mucho.
Chupo, lamo, beso, acaricio. Siento como tu cuerpo se mueve de placer. Tu cabeza está hacia atrás, tus manos acarician tus senos y las mías ayudan en gran medida. Muebes tu kukita al ritmo de la mamada y tus gemidos me excitan muchísimo. Me pides que no pare.. me dices que estás cerca..
Se acerca el final, y mi boca recibe tu jugo. Tu cuerpo se arquea en señal de placer, llevas tus manos a mi cabeza queriendo que mi lengua se pegue más a tu cuerpo y eso quiero hacer, saborear todo lo que me das. Después de esa explosión de placer me pides que te abrace por el resto de la noche.