Que eran uno solo, que eran paganos, que no creían en religiones humanas, que vivían para amarse y que el uno sabía lo que el otro pensaba. Y que en un momento de su felicidad infinita tuvieron que separarse.
Por muchos siglos se buscaron en todos los rincones, en cada mirada, en cada gesto, en cada manifestación de afecto, pero no podían coincidir , hasta ahora...
Él sentía que su alma no estaba completa, perdido en chats, fotografías poco santas, blogs de erotismo y páginas de BDSM buscaba algo o a alguien, pero no sabía quién.. no sabía cómo describirla.
Muchas veces rechazó o se sintió rechazado, ambas caras de la misma moneda, total, dando tumbos entre muchos contactos se sentía perdido, sentía que no era como los demás. Algunas mujeres pasaron por su vida y su sentimiento de vacío hacía que se apegara vanamente a personas que no lo completaban.
De pronto, ella con un saludo directo... " también estoy aprendiendo.." abrió la puerta a su mundo. Empezaron a sentir que se conocían de mucho antes, cada frase era familiar y llegaba a las entrañas. Cada imagen que intercambiaban los hacía soñar y revivir momentos de un pasado remoto. Era como si conocieran la piel del otro, el aroma de su compañero, su sabor, su lujuria... ellos empezaron a danzar...
Y ángeles y demonios se quedaron expectantes frente a la magia entre estos dos seres, se amaban, se adoraban, juraban que no había espacio entre ellos así estuvieran a kilómetros de distancia. Juraban que el tiempo no había pasado, por que ellos volvieron a ser uno solo.
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