Qué Somos... ¿Qué?

Superación a su estilo

Tom

3:00 am

Abro los ojos con pesadez y algo adormilado, camino hacia la entrada oyendo como un auto se va por la calle.

Lo primero que me encuentro es a Marion y le pregunto qué hace aquí, porque si mi memoria no fallaba ella se tenía que encontrar en México. Pero tan pronto como la veo dejo de preguntar, tiene los ojos rojizos, pero no de haber llorado, se ve tan triste y rota, hace tiempo no la había visto así. La conozco y no va a llorar, se lo va a guardar, lo sé, porque esa es la superación de su pena a su estilo.

No digo ninguna palabra solo la abrazo y la cargo dentro de casa, detesto verla así.

No soy de golpear a alguien, pero si alguien lastimó a mi Marion, lo voy a golpear en la cara.

***

Despierto a las 8:30 am con Marion a mi lado. Decido dejarla dormir y darme una ducha, al salir del baño, la encuentro preparándose con ropa deportiva.

--¿Estás bien? - preguntó mientras la observo

--No, pero no queda de otra más que superarlo- dice ella evitando mi mirada

--¿Superar? ¿A quién? -

--A Víctor, el muy maldito se va a casar. - rio con amargura- Y antes de que preguntes, no voy a llorar, no lo vale, mejor vamos a correr, con suerte no me pongo a llorar por él como una niñita, porque así no soy yo y lo sabes.

Prefiero no preguntar del tema por el momento, para no incomodarla.

--Marion...- comienzo a decir temiendo que sufra-

--Marion nada, Tom, no voy a llorar por alguien al que le importe una mierda, no tengo 15 años y ni a los 15 llore por alguien que no fueran los libros.

--Marion solo promete una cosa, que sea lo que sea nunca te lo guardes, no conmigo por favor-

--Lo prometo, ¿Sabes que?, aunque quiera no va a sanar rápido y que el dolor de mi pecho estará aquí por un tiempo, no va a ser fácil y quiero ser tan fuerte como tu, cuando te termino la muñeca plástica esa. Pero ¿Sabes algo? Voy a ser fuerte por ti, así como lo fuiste tú por mí.

--Lo sé – dije mientras la abrazaba.

Sabía que no iba a hacer un drama del tamaño del mundo y era por eso por lo que era la mejor, no gritaría y se acusaría de las cosas, le dolía, sí, pero lo superaría, porque de los 2 ella era la más fuerte.

Salimos de mi habitación para ir directo a la cocina, nuestro departamento-casa era algo grande, con una alcoba, un estudio, la sala, la cocina, el comedor, 2 baños y 2 habitaciones de invitados. Que aquí en Londres no usaba nadie, porque la prensa no sabía que vivía con alguien, en NYC tenemos un departamento-casa que es de Marion y que compartimos cuando estaba allá por trabajo, era nuestro hogar. Pese a lo que la sociedad piensa sobre que no debemos dormir juntos si no somos pareja, a mi y a ella no es que nos importe mucho. A excepción claro cuando iba su novio a NYC.

--William!!!!- gritó indignada- ¿Y la comida? No hay nada en el refrigerador.

--Si... Sobre eso... No he comprado nada, en mi defensa no creí que fueras a venir-

--Patrañas! Entonces ¿Qué has comido? –

--¿Comida para llevar? –

--Tom! – mencionó ella divertida- Si sigues así no te vas a casar nunca eh-

--Si me caso, me casare con alguien que cocine como tu – mencione coqueto-

--Jajaja Que gracioso Thomas- mencionó ella divertida

--Mira, hacemos algo, vamos a correr un rato y vamos a desayunar después. – le propuse

--Vale, pero al terminar vamos al super a comprar comida eh-

--Como quieras, ¿Llevo el carro? – le dije

--¿Para qué? –

-- Pues para traer las cosas del super- dije con obviedad-

--Pues si quieres...- dio por sanjado el tema.

Y asi salimos de casa.