La Boda

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Vamos en el barco My Lady, Candy me cuenta todo, como fue que la secuestraron, lo que le hicieron.a su entonces prometido,me enerva la sangre saber que ella amo a alguien más, a un que ella dice que supo lo que era el amor hasta que yo llegue a su vida y que equivoco el amor infantil, en su juventud, pero con Migo lo tenía todo un amor intenso, apasionado, leal y sin límite, claro me sentí en el cielo cuando me lo dijo, lo que más me gusta de ella es que me acepte tal y como soy, cuando me dice que al parecer todo lo que pasó fue planeado por su hermana niel y Eliza ligan, enfurezco y la abrazo tratando de infundirle confianza, realmente tengo que controlarme pero cualquiera que le intenté hacerle daño a mi pecosa lo pagará caro.

Llegamos a Gretna Green, le permito que se arregle pues mandé a comprar un vestido de novia para ella el día anterior con el mono, es lindo realmente tiene buenos gustos, yo me adelantó con Chun y el tiburón a la iglesia,les pido a mono y a tiro loco que las cuiden  les acompañen hasta la iglesia.

Candy
No lo puedo creer me cadete, con el hombre que amo, Dios me tocó vivir aquella pesadilla para poder encontrar al verdadero amor, suspiro y doy Gracias, pido que Archie sea tan feliz como yo, me veo en el espejo y no me reconozco es un vestido blanco perla, largo con cola y bordados de narcisos con hilos de oro en la falda y en la camisa, salida dejando ver un poquito.mas de lo permitido pero que importa, soy la mujer más feliz del.mundo.

Luego nos vamos escoltadas a la iglesia, nos unen nuestras manos con un kilo de los colores de los Grandchester y otro con los colores de los Andrew y nos unimos con un beso para siempre, colocamos las firmas en los libros de la familia y salimos felices hasta nuestra nueva vida.

Terry
Estoy tan nervioso claro he tenido a muchas mujeres en mi vida, pero ninguna era el amor de mi vida y por supuesto ninguna era virgen, de ahora en adelante la tengo a ella y nunca más estaré solo, la veo y le digo vamos ya a nuestros aposentos a lo que ella accede, vamos la tomo en mis brazos y pasamos la puerta de nuestro cuarto en el hostal en el que estaremos durante quince días, en lo que arreglan mi camarote y lo hacen lo suficiente mente cómodo para mi mujer.

Llegamos y trato de calmar mi impaciencia, la coloco en el suelo, cierro la puerta y la veo nerviosa, me dice " Terry te amo tanto, nunca más quiero separarme de ti unos prometemos compartir todo, escucharnos y amarnos siempre" luego la tomo entré mis brazos, le doy besos, húmedos y suaves, voy bajando de la frente, a sus mejillas, le mordisqueo su oído,luego bajo a su cuello y le desabrochó los botones de su camisa, hasta que cae, luego regreso a su boca, en lo que le quitó la falda, para seguir por quitarle su incómodo corset,hasta que queda en camisón, el que voy bajando poco a poco, luego ella con dedos temblorosos me quita la camisa, yo me quito las botas, me quita el pantalon, hasta que quedamos desnudos, luego la tomo en mis brazos, la llevo hasta la cama, le beso sus delicados dedos, luego sus brazos, hasta subir a su busto, lamo y subsiono esos hermosos senos que son míos, acaricio sus piernas, hasta subir hasta su entre pierna, luego juego con sus clitores y la beso apasionado, luego bajo poco a poco, besando todo su cuerpo, hasta llegar a su entre pierna, la que beso, subsiono, hasta que veo que se viene, tomo todo su jugo y regreso a su boca, sabiendo que ya está lista para recibirme, luego inicio a introducir me, hasta que veo un dolor en sus ojos, me detengo y le digo amor lo siento esto dolerá un momento, pero te prometo que luego te encantará, ella me da una medio sonriso y asiente, me introduzco de una sola estocada la veo con lágrimas en sus ojos, pero luego de unas cuentas estocadas mas la siento que se empieza a mover con ese, delicioso va y ven, luego coloco sus piernas en mis hombros para tener mayor penetración, siento que se viene y yo me vine con ella, llenando la con mi semilla, así fue nuestra primera vez y de esas tuvimos muchas más esa y todas las noches y días siguientes, no salimos de nuestro cuarto amándonos, toda la comida y el agua miel lo dejaban, igual que las cosas para bañarnos, así pasaron quince días que fueron los más hermosos hasta ahora de mi vida.
Ahora estamos rumbo a la villa Grandchester en Escocia en las tierras altas, muy cerca del Castillo Andrew, muy cerca de mi familia.

Continuara..........

En busca del HonorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora