Tu serás mi omega - Rubegetta

Capitulo 23: Fogata

Recorrieron sigilosamente por el ambiente que reflejaba esta dimensión; a lo que dijo Ust no importa cuantas horas pasaban, la luna de sangre esta presente. Querían evitar peleas en todos momentos, el hecho de que entrenaran seria muy buena opción para demostrar lo que lograron; pero aun así, eran muchos enemigos por lo cual enfrentar. 

Rubius estaba guiando a todos con mucho cuidado para no estar en un nido de esos insectos enormes; el camino que le indicaba Ust pasaba exclusivamente sobre ellos... no sabe si lo estaba haciendo a propósito o si en realidad es el verdadero camino. Pararon en seco cuando detectaron escorpiones siguiéndoles el paso; todos se convirtieron en sus lobos para ser más sigilosos con el ataque. 

- Nosotros nos encargamos - dijo Alexby, mirando a Staxx - Sera fácil

Todos se relajaron y comenzaron a observar el espectáculo que iba a comenzar. Alexby en un abrir y cerrar de ojos se dirigió a los escorpiones y comenzó a elevarlos a cada uno; haciendo que Staxx les de zarpazos a los que caían a su alrededor con una velocidad considerable, mientras que Alexby daba ataques múltiples, apoyándose en las rocas de algunos precipicios o arboles que encontraba, derrotando a los que Staxx no logro alcanzar. Tras terminar de derrotarlos; fueron con sus compañeros a los que estos estaban felices. 

- Staxx mejoro en velocidad - hablo Fargan - Alexby, eres buen maestro.

- Gracias... pero es por su propio esfuerzo que mejoro - dijo Alexby, dando una sonrisa - yo solo lo miraba y corregía. 

- Aun así, eso fue increíble - dijo por ultimo Fargan, para luego retomar el camino.

Mientras que seguían con sus formas lobunas, ellos aun así no se arriesgaban a correr... el ambiente es muy sensible al sonido; un movimiento en falso y todos los enemigos tendría la vista fija en ellos. Y eso fue lo que paso... en el ataque de Alexby con Staxx, se pudo escuchar el crujido de sus huesos destruidos. A lo que vino una horda horda de libélulas; una de ellas elevo a Lolito, Fargan reacciono y se dirigió al insecto para quitarle las alas, mientras que Willy lo atajo con su lomo. 

- ¿Estas bien? - pregunto Willy 

- Si... gracias por atraparme.

- Mi amor - hablo Fargan - creo que nos toca. 

- De acuerdo - pero un presentimiento llego a él - ¡Rubius, cuid-!

Willy no pudo completar su advertencia, ya que Rubius había previsto que una de las setas jefes le iba atacar por detrás; rápidamente lo esquivo y se reflejo una sonrisa de satisfacción... "A llegado mi momento, me presento"... Por el ruido de las libélulas venían más insectos por donde se encontraban, así que Vegetta rápidamente dio orden.

- Willy, Fargan las libélulas; Auron, Luzu, tarántulas; Alexby, Mangel rodeen nuestro perímetro y destruyan los nidos; Staxx, Lolito los escarabajos que se aproximan. Ayudare a Rubius con la seta jefe - todos sintieron. 

Alexby y Mangel rápidamente se encaminaron a matar los nidos de insectos que se encuentren alrededor; Willy y Fargan se ayudaron con el ambiente para atajar a todas las libélulas; Auron y Luzu al tener velocidad considerables se encargaron de la tarántulas que también poseían una habilidad y velocidad increíbles; Staxx y Lolito al tener de contrincantes los escarabajos tuvieron una pequeña dificultad, ya que estos animales a parte de ser grandes son resistentes. Todos se encontraban despejando el lugar, hasta la señal de los betas.

Rubius comenzó a enfrentarse con el jefe seta, daba golpes contra el suelo tratando de aplastarlo o pisarlo pero él era mucho más rápido... algo dentro de él comenzó a crecer, un poder que se asemejaba a su contra-parte, pero más fuerte. Vegetta sintió la presión de poder que emanaba; estaba preocupado. Rubius se abalanzo sobre el monstruo y comenzó con una lluvia de zarpazos que era casi imposible detectar a que velocidad iba; el monstruo solamente gruñía por el dolor, hasta que uno de sus brazos cayo por los cortes que Rubius fue haciendo poco a poco; el monstruo grito y en un momento el otro brazo cayo haciendo que esta criatura use su cabeza para tratar de golpearlo, inmediatamente se posiciono por la nuca del monstruo y utilizo sus dientes para arrancarle poco a poco su circulación de sangre, muriendo desangrado. Vegetta se aproximo a él rápidamente, pensando que tal vez se salio de control, pero no era así... Rubius comenzó a limpiarse con su pata la sangre azul que caía por su hocico.