Extra dos

537 47 7
                                    


Joel

Ya es un mes en el que Erick y Zabdiel me confesaron todo. Al principio si me enojo el hecho que me haya ocultado eso, pero me puse analizar bien las cosas y creo que no hay nada que reprochar.

También un mes, que Erick y yo comenzamos una relación.

Estoy demasiado feliz.

Ahora estamos en la casa de Erick para poder hablar con su padre, pues por que el tiempo pasa demasiado rápido y la gente empieza a notar ciertos cambios.

Estoy muy nervioso.

–Tranquilo Amor.-Erick toma mi mano para calmar mis nervios.

—Lo siento, es que no sé cómo vaya a reaccionar ante la noticia... -la puerta de la sala interrumpe mi plática-

Me levantó de golpe al ver a el señor Colon, que va entrando junto a su esposa.

—Buenas tardes - saluda al estar frente a nosotros- ¿cómo estás Joel? ¿Que te trae por aquí?

Habla con poco entusiasmo.

—Buenas tardes señor y señora Colón -estiró mi mano a él para formar un saludo y a la señora la saludo de beso- Bien, estoy bien Gracias, y ustedes ¿como han estado?

—Bien... -contesta de la forma más seca posible- Bueno ya me puedes decir ¿qué haces aquí?

—¡Papá! -alza la voz Erick- venimos los dos, porque queremos hablar contigo de algo muy importante.

Puedo jurar que el señor rodó los ojos.

—Querido mejor sentémonos para poder hablar mejor -ofrece su esposa-

Creo que parece querer reclamarle, pero termina accediendo.

Ya cuando estamos sentados uno frente al otro, decide hablar de nuevo.

—¿Ya me van a decir de que quieren hablar?

Antes de que pueda procesar bien mis palabras, Erick se adelantó.

—Estoy esperando un hijo de Joel papá—el gran cuarto se quedó en total silencio por lo que pareció una eternidad-

— Si señor, vamos a ser padres y le vengo a pedir la mano de su hijo -por fin hablo

Si las miradas mataran, ya estaría en el más allá.

—¡Me vienes a pedir permiso después de que te hayas metido entre sus piernas! —usa su tono de voz un poco más fuerte - que poca verg...

—¡Papá por favor! Venimos a hablar contigo de algo importante- dice Erick un poco estresado- Aceptes o no, yo me voy a casar con el. Lo amo y si te estamos diciendo es por que eres mi padre, te amo y estoy muy feliz porque voy a tener a tu primer nieto. Y me alegraría poder compartir contigo esta bonita etapa.

Unas pequeñas gotitas se deslizan por sus mejillas, las limpia rápido.

Estoy por hablar.

Pero la señora Colón se levanta de su asiento, creyendo que se iba a ir hasta que se para frente a nosotros.

—Muchas Felicidades Chicos -abraza a Erick- Cuídalos mucho Joel

—Más que a mi vida -me abrazo

—Gracias Alicia, te quiero

—yo también te quiero mucho Erick-acaricio su mejilla y voltea hacia el señor Colon que nos miraba con el ceño fruncido- ¿Erito no piensas felicitarlos?

El soltó un bufido, no dijo nada y solo negó con la cabeza. Pude ver muy bien que sus ojos estaban un poco brillos.

—Papá-lo llamó Erick, caminando hasta tomar asiento junto a él - Papito, te quiero mucho. No quiero que estes enojado conmigo.

Lo abrazo y el señor no dudo ni un poco en corresponder.

—Felicidades mi pequeño- hablo bajo, pero por el silencio del gran cuarto se escucho perfectamente- Pensé que nunca iba a poder ver a mi nieto. Si me enoje es porque eres mi bebé y siento que estás muy chiquito como para formar una familia. Pero entiendo que ya tienes la edad suficiente.

Erick empezó a derramar algunas lágrimas, quise abrazarlo y estar cerca de él, pero es un momento padre e hijo mejor me mantendré alejado.

Después de algunos minutos solo escuchando a Erick y Erito hablar, por fin se dirigió hacia a mi.

—Joel Pimentel, está claro que nunca me has agradado - oh que directo - pero yo tengo mis razones, y estuvo mal porque el pasado es pasado, y tú nunca me hiciste nada, ni eres culpable de nada.

—¿de que hablas papá?- pregunta Erick limpiando sus mejillas mojadas por las lagrimas derramadas hace un momento-

—Tal vez algún día les cuente, pero hoy no y está claro -cambio de tema- Joel, solo te quiero dejar en claro que te estoy dando a lo mas importante y bonito de mi vida, quiero que lo cuides, porque si algo les llega a pasar, ten por seguro que rogarás por tú vida.

Me amenazo con esos ojos verdes malignos, o así yo los veía.

—Tenga por seguro que mientras yo viva, nada malo les pasara, yo amo con mi vida a su hijo y nunca haría algo para dañarlo -le juro - daría mi vida para que el este bien...

Después de una larga charla, terminamos en buenos términos.

Creo.

Y también nos dijo que la boda el la pagaría y para que no hablaran de su hijo se haría en dos semanas.

Y este es el momento para asustarme, no pensé que todo fuera tan pronto, lo único bueno es que voy a tener a mi Erick por muchos años junto a mi. Y claro junto a nuestro pedacito de amor.

Estoy muy feliz y nervioso.














Solo falta epílogo :(

Amigo || Joerick •[terminada]•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora