Cuernos de angel

2⚡️

» Cielo «

Toque la puerta y sus ojos rojos se clavaron en mi a través de la pequeña hendidura que quedaba

-ándate no me rompas las pelotas- soltó ignorándome por completo y continuando con lo que estaba haciendo

Entendía que estaba atravesando el peor momento de su vida así que deje pasar sus malos tratos y preferí enfocarme en lo que me habían pedido

-la abuela y mi papá quieren que bajes...- solté hablando muy bajito y suave

-me chupa un huevo

-emm... que les digo?

-no se cielo... deciles lo que se te cante el orto pero ándate de acá

Inhale despacio para contener la poca paciencia que me quedaba y luego volví a la planta baja a avisar que Mateo no tenía ninguna intención de bajar

Al ver a todos llorando, yo también me largue a llorar porque era demasiado sensible y odiaba ver a la gente sufriendo.

-cielo hija... no queres jugar un rato con Emi para distraerlo... con papá tenemos que solucionar varias cosas- soltó mi mamá acariciando mi mejilla

-okey, está bien.

Los grandes se pusieron a debatir mil cuestiones, mañana era el velorio y por tanto tenían mucho que planear y hacer a pesar del dolor de la situación

-hola- dije sentándome al lado de mi primo menor que se encontraba viendo dibujitos en la tele

-hola- respondió mirándome

-queres que juguemos a algo?

-a que?- pregunto con los ojitos brillosos

-a lo que vos quieras... nose a que te gusta jugar...

-mmm... hay un juego de cartas que esta re bueno yo siempre lo jugaba con papi. "Uno"se llama... si queres te enseño- soltó con una sonrisa

-si, ya se cual es... yo también se jugar- le sonreí- búscalo así jugamos

-está en la pieza de Mateo... me acompañas?- dijo estirando su mano para que la agarrara

Lpm... quien me mandaba dios. No me quedo otra que seguir al nene y volver a la planta alta

-cielo te dije que te vayas lpm sos sorda o pelotuda?- soltó con un tono fuerte Mateo

-vinimos a buscar el uno teo... queres jugar?- pregunto Emilio pasando a la habitación y agarrando el mazo de cartas

-no Emilio, vayan para allá... no me jodan- dijo prácticamente echándonos y cerrando la puerta con toda.Que pibe tan amable...

-cuando Teo está triste se pone malo- me explicó Emi mientras bajábamos la escalera

-y vos no estás triste?- pregunte acariciando su cabeza

-la tía me dijo que papá está en el cielo y que nos cuida y nos mira desde arriba... que está mejor... aunque lo voy a extrañar mucho- soltó haciendo puchero

-tiene razón... él te va a cuidar siempre- le sonreí agachándome para verlo a los ojos

-jugamos al uno?- sonrió él

-si dale

Nos quedamos jugando unas cuantas partidas, por lo general lo dejaba ganar para ver su carita de felicidad cuando decía ¡uno!

-Cielo... nos tenemos que ir a hacer varios trámites quédate cuidando a Emi si?- me ordeno mi mamá yendo de un lado a otro

-está bien ma...

-prepara algo para comer porque no se a qué hora volveremos

-okeey

-Gracias vida- sonrío dejando un beso en mi cabeza y saliendo de la casa

Le dije a Emi que pusiera un rato los dibujitos mientras yo inspeccionaba en la cocina que podía hacer de comer...

Encontré unas milanesas y unos tomates así que me pareció la mejor opción ya que tampoco era ninguna gurú de la cocina. Coloqué las milanesas sobre el aceite hirviendo y me puse a cortar los tomates, para luego agregarles un poco de aceite y sal.

Al terminar puse la mesa y llame a Emi a comer aunque todavía me quedaba lo más complicado que era que Mateo se dignara a bajar. Subí por tercera vez y volví a recibir la misma contestación... no me quería ver ni en figurita

-y ahora que queres?- soltó sin siquiera verme

-prepare el almuerzo...

-no quiero comer... no tengo hambre

-te va a hacer mal...

-qué te haces la preocupada por mi... ándate cielo

Suspire y le cerré la puerta... Mateo nunca había sido muy amable conmigo pero ahora estaba más sacado que nunca.Decidí agarrar su plato y ponérselo en una bandeja para llevárselo a su habitación... aunque me tratara como el orto, estaba pasando por una situación espantosa y a pesar de que no teníamos una buena relación tampoco lo quería ver así...

-cielo lpm... que problemitas tenes en la cabeza que no entendes lo que te dicen?- pregunto furioso

-te traje la comida...

-no quiero comer que no entendes...

-bueno pero por si te da hambre... te lo dejo acá sabes...?- le solté una media sonrisa mientras apoyaba la bandeja en el escritorio para luego retomar el camino de vuelta, aunque su voz me interrumpió

-cielo...

-qué?

-Gracias- acotó sin mirarme y con un tono frío aunque con todo lo que me había dicho hasta me parecía extraño que me agradeciera...