44⚡️

3.8K 326 157
                                    

Cielo

— salgo con Joaco ma...— sonreí subiendo las escaleras para prepararme

¿Que había pasado en estos dos meses? Bueno... había empezado algo con Joaquín, de todas formas íbamos lento.

Mateo había vuelto a ser el mismo forro de siempre. Después de insistirme un par de días para volver a lo de antes se canso, y me empezó a bardear como era de esperar...

A veces extrañaba nuestros momentos de paz... pero creo que todo estaba mejor así.

Mis viejos conocían a Joaquín, no lo había presentado formalmente pero mi mamá había intercambiado un par de palabras con él un día que vino a buscarme y le había caído bien.

Siete 7️⃣
En 20 estoy

Cielo ✨
Dale ❤️

Me termine de arreglar y baje a esperar en el living a que llegara el rubio.

— ¿a donde vas que te bañaste? — soltó Mateo sentándose a mi lado

— imbecil

— ¿el rubio oxigenado hace su aparición nuevamente? Tiene pinta de tenerla chiquita... manicera tenias que ser...

Mi personalidad había cambiado bastante estos meses... de a poco había dejado de ser esa nena chiquita e indefensa. Meterme en todo ese mundo medio turbio y conocer a las pibas de ahí me hicieron ser un poco más ¿atrevida?

Mire para los costados esperando que no haya nadie cerca y me le acerque peligrosamente a Mateo...

Primero lo mire a los ojos, analizando como este remojaba sus labios y se concentraba en mi boca. Después decidí poner mi mano en su cuello y acercarme a su oreja.

— la tenga chiquita o no el me la pone y vos no...— susurre en su oído viendo como su piel se erizaba

El también miro para todos lados, al parecer mis viejos se habían ido al supermercado.

— ¿queres ver como te pongo más que el pelotudo de tu novio? — soltó agarrandome de la cintura y posicionándose sobre mi

— yo no tengo novio, y te re agradezco campeón. Ya probé la tuya y no repito comida vencida... — le sonreí acercándome

— no juegues con fuego porque te vas a quemar cielo... — soltó estampando sus labios con fuerza sobre los míos

En un movimiento rápido me alzo y me llevo hasta el baño que quedaba más cerca que las habitaciones.

Lo empuje para que se sentara en el inodoro y me subí encima. Empecé a moverme con fuerza mientras sus besos iban de mi boca a mi cuello, mordiéndome despacio.

Sentí que mi celular vibró... era seven.

— me voy... Joaquín me está esperando— sonreí acomodando ligeramente mi pelo y admirando su cara de confusión

—cielo...

— nos vemos — sonreí con cara de inocente, acomodando un poco mi ropa y saliendo.

Cuernos de angelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora