LUCIFER

CAPITULO 3

 Yoongi se acercó a ellos de nuevo y golpeando un poco el hombro de Namjoon para que lo volteara a ver y así lo hizo dándose cuenta de la presencia de su amigo.

—Oh es cierto, tenemos que irnos. - dijo Namjoon y por un momento Jin sintió las ganas de aferrarse a aquel chico de piel morena sin entender el por qué codeo un poco ligero a Jimin y este lo volteo a ver entendiendo a que se refería.

—Hey, ustedes, ¿les gustaría ir a una reunión? - decía animado Jimin-. es en un bar cerca... - apuntó con su mano en aman de que era por el rumbo de la derecha.

—Si, es cierto... - menciono un poco nervioso, pero sin ser tan obvio - Deberían venir – se dio cuenta que su tono era un poco autoritario a causa de los nervios. entonces le entro la duda de ¿Y si no querían?

Aquellos seres infernales se miraban el uno al otro pues ambos coincidían en que sería buena idea y unos segundos después sonrieron.

—Sería un honor. - dijeron ambos de una manera educada y muy antigua que a los más jóvenes les causo risa.

-Entonces hasta la noche – dicho esto Jimin se despidió con un movimiento de despedida con su mano derecha.

Yoongi se llevó de cierta manera a rastras a Namjoon dándose la vuelta rumbo a la salida y una vez detrás afuera uno de los chicos de antes les llamaba de nuevo, está vez era de Jin asiendo que Nam sonriera.

—Lo siento, es solo que no intercambiamos números- decía Jin un poco agitado por haber corrido un poco - No sabrán donde será.

En ese momento Namjoon se maldijo a sí mismo << ¡GENIAL! >> pensó. Pues a él nuca se le ocurro llevar consigo un teléfono celular y claro por obvias razones dado a que no conocía a nadie y era la primera vez que salía después de tantos años encerrado.

—Jimin lo tiene – menciono con seguridad-. Se lo di cuando nos encontramos, descuida. - Yoongi habló con amabilidad, pero de manera seria.

—Bien entonces...- dudo un momento sintiéndose incomodo - Hasta luego. - se despidió y volvió a entrar ahora de manera tranquila. Lo último que Namjoon noto era je las orejas de Jin tenían un particular tono rojo y eso le dio ternura.

Ambos seres oscuros transformados en humanos voltearon para seguir su rumbo. Iban en silencio disfrutando por las calles del clima y la vista, hicieron diversas cosas y como a las 3 de la tarde llegó un mensaje al celular de Yoongi.

—Espera, yo te iba a preguntar ¿de dónde carajos sacaste un celular? - dijo Namjoon a su amigo mientras este sin contestar se le quedaba viendo.

Hablo después de un par de segundos. —Hermano, no es la primera vez que vengo a darme rienda suelta al mundo mortal. - dijo con obviedad. - El único que no sale de ese infierno eres tú, me lo conseguí la vez pasada.

— Oh, Cállate - se quejó el Rey de los demonios con fastidio.

Volviendo la vista a su celular y revisando le aviso después — Es de Jimin, dice que a las 7 nos veamos en el museo.

—¿Por qué tan temprano? - cuestiono Namjoon - ¿Qué no se supone que todo empieza después de las 10 de la noche?

— ¿Irías a una fiesta con el estómago vacío?, ellos acostumbran a esto. - el tono que namjoon noto en la voz de yoongi le dio indicios de que había algo que el chico desde hace tiempo no le había dicho.

- Tu conoces de antes a Jimin, ¿cierto? - En ese momento Yoongi se quedó callado al punto de creer que yoongi había dejado de respirar.

Mientras tanto la mente del más bajo buscaba palabras porque de repente su mente se había quedado en blanco y su estómago se revolvió pues tal como estaba pensado Namjoon había algo que no le decía.