CAPITULO 2

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—¿Cómo se llama la obra? - preguntó con curiosidad.

— El ángel caído.

Ahora Namjoon puso atención a la pintura y lo que vio es un ángel que estaba tirado en el suelo, pero aún tenía sus alas

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Ahora Namjoon puso atención a la pintura y lo que vio es un ángel que estaba tirado en el suelo, pero aún tenía sus alas.

—Es triste - sonó la vos del chico que estaba a su lado cuando se empezó a acercar a la pintura nuevamente-. Es... frustrante.

—Parece serlo - Namjoon pasó su mirada por todo el cuadro exceptuando una pequeña parte.

— Solo mira sus ojos, hay tanta tristeza e ira y rencor en sus ojos. - dijo el chico aun poniendo toda la atención a la pintura sin querer voltear.

Entonces fue ahí, cuando Namjoon completo de observar por completo la pintura, noto esa pequeña lagrima, esos ojos rojos lleno de emociones, llenos de dolor, llenos de tristeza, pero vacíos, sin vida, huecos.

Namjoon sabía perfectamente a que se referían con el ángel caído.—Tienes razón, pero eso realmente no importa, es Satanás se lo merecía - dijo con un tono tan rencoroso que hizo que el chico volteará por primera vez a verlo con el entrecejo fruncido.

—No lo creo. - el tono del joven se sentía tenso. Y silenciosamente exigía que el más alto ahora viera su molestia.

—¿Qué? - volteo a ver al más bajo y se sorprendió no solo por el tono sino por la increíble belleza que en él había.

Pues sus facciones eran perfectas, su piel parecía porcelana, lisa y sin ninguna marca, sus ojos brillaban cuáles diamantes y todas las joyas preciosas, sus labios adornaban su rostro con tonos ligeramente rojos, tenía abultadas mejillas y una nariz que le daba el toque perfecto. Parecía un ángel.

—Dije que no lo creo - hizo una pausa - siempre nos cuentan las cosas malas de los demás, pero nunca contamos las nuestras o mejor dicho nunca cuentan las nuestras. Soy Kim SeokJin - extendió su mano acercándose un poco al joven de cabello platinado.

Y entonces Jin pudo verlo bien.

Era más alto que el portaba un pantalón negro camisa blanca con algún estampado y una chaqueta de mezclilla, tenía el cabello platinado, una mandíbula un poco marcada, labios finos pero gruesos, un tono de piel más morena que la de él, una nariz tierna y... Oh por dios, unos ojos tan cautivadores.

—Luc... Kim Namjoon – casi mencionaba su verdadero nombre, pero se corrigió automáticamente utilizando el mismo apellido que él, pues nunca había pensado en colocarse un apellido pues simplemente no lo necesitaba. Estrecho su mano.

Jin sintió su mano cálida casi el punto de querer retirarla, pero le resultaba tan agradable y  Namjoon sintió una corriente desde su mano a todo su cuerpo.

Ambos sonrieron de manera inconsciente.

Jin quedó embobado con esa sonrisa, pero sobre todo con esos hoyuelos que tenía en sus mejillas, sin darse cuenta se acercó un poco bajo la mirada asombrada de Nam. Levantó su mano y con su dedo índice tocó el hoyuelo en su mejilla izquierda. Y pronto cayó en la realidad.

LUCIFERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora