Notas en vez de palabras [Flamantha]

13. Sentimientos

POV Samantha

La quedada había transcurrido con normalidad. Poco a poco íbamos acercándonos más y disfrutando de cada capítulo que pasaba. Pocas veces me había sentido tan cómoda como en aquel pequeño salón. Estaba apoyada en él, prácticamente acostada mientras oía su ritmo acelerado e intentaba concentrarme en la serie.

De alguna manera aquella mezcla de brazos que desde fuera se vería bastante incómoda era de hecho agradable, casi insuficiente. Como si no me bastara con eso.

No decíamos ni una sola palabra, tan solo mirábamos nuestra serie favorita, juntos

De repente y sin previo aviso Flavio se deshizo de mi agarre y se levantó del sillón, yendo a por el mando de la tele. Confundida, me recoloqué esperando a que diera una explicación acerca de esa pausa tan repentina

-Uy mira que tarde es- dijo colocándose el reloj- el tiempo ha pasado volando- reconoció llevándose una mano a la nuca. Por más que fuera tarde no quería irme pero supuse que sería de mala educación quedarme.

-Me lo he pasado súper bien Fla, ojalá repetirlo- comenté mientras me levantaba del sillón para coger mi bolso. Mientras me dirigía a la mesa donde estaban mis cosas Flavio se interpuso en mi camino pegando su cuerpo al mío

-¿A donde crees que vas?- susurró atrapándome contra la mesa y su cuerpo- todavía falta la cena- Si quieres claro, aunque me ha costado prepararla sin quemar nada- confesó haciendo un pequeño puchero

Flavio no solo me había invitado a su casa a ver una serie, sino que además se había tomado la molestia de preparar la cena. No cabía en mi asombro, era un gesto muy detallista por su parte

-Ay Flavio no tenías porqué, mil gracias de verdad- dije acercándome a darle un abrazo para agradecerle aquel gesto tan bonito.

Rodeé su cuello con mis brazos y nos quedamos unos segundos sin movernos ni un ápice antes de separarme en contra de mi voluntad ¿A qué vienen esas confianzas? Samantha relájate

Él se limitó a guiarme hasta la cocina y a sacar la pizza que tenía en el horno. Tenía una pinta deliciosa

-Bueno, el plato principal es la pizza pero he preparado también un par de cositas más por si le eras alérgica a algo- dijo cortándola en pedazos

-Jo Fla, si es que has pensado en todo- le contesté

Inconscientemente le acaricié el rostro con una de mis manos en un gesto cariñoso. Él tan solo sonrió y la agarró achinando los ojos.

-Venga, que al final te la vas a comer fría- sentenció tomando asiento e invitándome a hacer lo mismo

Cogí uno de los trozos y lo probé. Dios estaba perfecta

-Madre mía Fla, que pasada- admití cogiendo otro

-Es parte de mi encanto- dijo guiñándome el ojo

La cena transcurrió como cada momento que pasaba con el, increíblemente. Hablábamos de muchísimas cosas, de cómo iba a orientar mi nuevo disco, de cómo comenzamos nuestras carreras musicales y cosas del estilo. Era fascinante la habilidad que teníamos de entendernos.

Como todo, la cena llegó a su fin, y tras el postre nos quedamos bastante tiempo charlando antes de dar por finalizada la quedada.

-Jo, que pena que sea tan tarde. Deberíamos de hacer esto más a menudo- confesó Flavio acompañándome a la entrada

-Ya Fla, me lo paso genial contigo siempre- devolví

Estuvimos varios segundos mirándonos sin saber bien cómo proceder. Lentamente se fue acercando hasta terminar abrazados.

Nos separamos sin prisas y sentí su mirada sobre mis ojos. Ninguno hacía nada por evitar aquel contacto.

Cogió ambas manos y las posó con delicadeza sobre mi cuello, trazando líneas sin sentido que supuse que seguían las marcas de mis lunares.

Sin decir palabra agarró mi cuello con más fuerza y se acercó sigilosamente.

De repente la puerta que teníamos al lado se abrió dando paso a una chica castaña que no había visto nunca. Por acto reflejo me separé de él rápidamente

-Ay perdón perdón no quería interrumpir nada- se apresuró a disculparse la chica- jo si me llegas a avisar llego un poco más tarde- dijo dirigiéndose a Flavio

Él tan solo le dedicó una mirada asesina. Ante el silencio ella se decidió a presentarse

-Ehh... bueno, soy Bea, encantada- tartamudeó tendiéndome la mano- soy la hermana de Flavio- prosiguió

Ahí comencé a entender un poco la historia y solo quería que la tierra me tragara. Tampoco es como que hubiera pasado nada en particular pero no es lo que se dice una buena primera impresión

-Soy Samantha, encantada- dije dándole dos besos

-He oído hablar mucho de ti- soltó ella- además, soy muy fan de tu música-

-Muchas gracias- contesté- creo que va siendo hora de irme, muchas gracias por todo Fla, ya te escribo- dije antes de salir y cerrar la puerta

Menuda experiencia.

Sin pensármelo dos veces decidí irme al apartamento de Maialen para dormir. Si bien era cierto que tenía el mío propio, estaban haciendo algunas obras y prefería quedarme con mi amiga.

Al llegar al portal cogí las llaves que me había dado y me apresuré a entrar sin hacer mucho ruido. Para mi sorpresa, Maialen seguía despierta tomándose un té en la mesa del comedor

-Hola titi, ¿qué tal con Flavio?- preguntó Mai haciéndome un gesto para que me sentara con ella

-No lo sé- contesté- todo ha ido de maravilla, nos lo hemos pasado genial. Ha sido súper detallista, ha preparado la cena y todo- dije sin más

-¿Entonces por qué pareces triste?- preguntó acariciándome el brazo

-Estoy confundida, no sé, tengo miedo- confesé- siento una conexión muy fuerte con Flavio y no quiero echarla a perder

-Pero a ver Sam, ¿por qué dices eso? ¿Ha pasado algo?- Inquirió esperando una respuesta

-No, no, es solo que no estoy segura de hacia donde va esto, hoy he sentido cosas.. No sé Maialen- confesé llevándome las manos a la cabeza

No era nada nuevo que aquella conexión que sentía con Flavio era especial, pero verbalizarlo para explicárselo a Mai era terriblemente difícil. Aquella noche había sido un punto de inflexión. Me había hecho darme cuenta de ciertas cosas.

Supongo que llegados a este punto era inútil negar que quería algo más, aunque sabía que nunca ocurriría nada entre nosotros dos. Éramos simplemente amigos y compañeros de trabajo, nada más

-Tu tranquila titi, deja que las cosas fluyan. Flavio nunca va a alejarse de ti porque eres estupenda. Y si lo hace pues él se lo pierde. Entiendo que estes hecha un lío pero todo va a salir súper bien- comentó mientras se acercaba a darme un abrazo.

-Todo saldrá bien- concluí

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Perdón, últimamente he estado muy liada con algunos proyectos personales pero a partir de ahora podré subir con más regularidad. Muchas gracias por esperar, votar, leer y comentar

¡Espero que les haya gustado! ✨