II| Viejas costumbres

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MARATÓN 6/7

DAMEN

—Feliz cumpleaños querida Hen, feliz cumpleaños a ti— los aplausos se escucharon en toda la mesa y mi niña de ahora nueve años, aplaudió y sonrió mostrando sus hermosos hoyuelos.

Era la copia exacta de Hans.

Hadem era una combinación entre Hans y yo, pero Hen, ella era la copia exacta, mis suegros me dicen que se parece mucho a cuando Hans era pequeño.

Se comenzó a repartir el pastel, mientras la madre de Hans se quedó partiendo el pastel, me adentré a la casa en busca de Owen, que ya se había tardado para buscar el suéter de Hen.

Me dirigí a la habitación y al pasar por los pasillos, escuché a Owen levantando la voz.

—Hadem, si tu no se lo dices a nuestros padres, yo se los diré— Hadem estaba llorando, lo escuche, diferenciaría a kilómetros los sollozos de mis hijos.

—¿Qué nos tiene que decir? — me pare en el umbral de la puerta y me cruce de brazos, ya saben, la típica pose de padre enojado.

Owen miró con insistencia a Hadem y este simplemente bajo la mirada.

—Owen, cariño, ve a dejarle el suéter a Hen, voy a hablar con Hadem— Owen asintió y tomo el suéter de mis manos para bajar y dejarme a solas con Hadem.

—¿Qué está pasando Hadem? — me senté en la cama y palmeé a un lado, unos segundos fueron suficientes para que se sentara a mi lado.

—Hace casi dos semanas, cuando te dije que iba a ir a acampar con algunos amigos, no fue cierto— comenzó a hablar y a llorar al mismo tiempo. —Yo había terminado con Gregory y me enteré que el sábado abría una fiesta, yo quería vengarme de ese hijo de perra por engañarme con mi mejor amigo, así que fui a esa fiesta, me encontré con él y estaba con mi mejor amigo, así que le quise dar celos y me acerque a un chico, al inicio solo estábamos hablando, pero una cosa llevo a la otra, me llevo a su departamento y yo ya estaba un poco tomado, así que tuvimos relaciones, Santiago me trataba bien y a mí me gusto, cada tercer día les mentía, diciendo que iba al cine con algunos amigos, pero era mentira, iba al departamento de Santiago... pero ahora... todo se vino a la borda papá— sus sollozos se incrementaron, pero aun así siguió hablando.

—Uno de mis compañeros de mi clase me dijo que ayer mientras estaba viendo porno, se encontró con un video mío... yo no sabía que me había grabado, hoy revise la página que me dijo mi compañero y es verdad, hay varios videos míos teniendo relaciones con Santiago, pero te lo juro papá que yo no sabía que estaban grabando— me quede en completo shock, Hadem me abrazo, pero yo seguía sin creer que mi niño de quince años hiciera todo esto.

Obviamente yo no era una blanca palomita y ahora entiendo tanto la frase, de todo lo que se hace, se paga con los hijos.

—Pedí a Owen que borrara los videos de internet, pero se negó, me dijo que primero debía decírselo a ti y a papá Hans— solté un suspiro y lo abrace.

—Primero que nada, estas castigado hasta que yo lo decida, por mentirme, por tomar aun siendo menor de edad y por tener relaciones sexuales con un desconocido, no debes actuar así de imprudente, segundo, yo y Owen nos encargaremos de esto, pero facilítame las cosas y dame la dirección del tal Santiago y su número— Hadem asintió y saco su celular, me envió los datos y antes de hablar nuevamente, un toque en la puerta se escuchó, al instante que se abrió.

—Cariño, algunos invitados se están yendo— Hans asomo su cabeza y nos vio, Hadem aún seguía llorando.

—Claro, voy para allá, mientras, Hadem y tú necesitan hablar— me levanté y me fui de ahí dejando un beso en los labios de Hans.

Hacker I & II +21Donde viven las historias. Descúbrelo ahora