Era el primer año para ambos en la secundaria, estabamos bastante nerviosos, pero Felix ya no lloraba, es mas, me sonrio y me dijo que me relajara, los de tercero nos dieron la bienvenida, mi hermana me guio a mi aula, despues de todo ella era parte del consejo estudiantil, era una alumna de tercer año.
A Felix y a mi nos toco en diferente salon de clase, pero no importaba porque eventualmente nos topabamos en los pasillos, comiamos el almuerzo juntos, y regresabamos juntos a casa, era una sensacion realmente agradable. Cuando mi hermana queria venir con nosotros yo la alejaba, a ninguno de los dos nos gustaba tenerla cerca, tenia una cara de angel asi que tenia bastantes amigos.
Me gustaba mucho pasar todo el tiempo con Felix, los dos eramos nuevos y nos conociamos bien, asi que no me importaba el no estar con los demas alumnos, era feliz asi.
En clase solo hablaba con los demas entre cada clase y para pedir apuntes, mi compañero del frente era todo un criminal, pero aun asi era agradable cuando lo conocias.
Caundo regresabamos Felix casi nunca hablaba, yo era mas como el paciente y el era el psicologo, siempre escuchaba lo que le decia, y me sonreia, lo que hacia que todo se volviera relajado y agradable.
Las hojas del otoño empezaron a caer, mi cumpleaños estaba muy cerca y queria celebrarlo junto a Felix y algunos de mis amigos, iba a decirle que trajera a sus amigos a mi fiesta a la hora del almuerzo pero ese dia Felix no se aparecio, me parecio raro pero no le tome mucha importancia.
A la hora de salida lo espere un buen rato pero tampoco lo vi en ninguna parte, estaba seguro de haber venido con el a la escuela, pense que tal vez habria empezado su edad rebelde y que tal vez se habria escapado de la escuela, asi que me fui sin el, cuando llegue a casa mi hermana ya estaba ahi, y se me hizo extraño porque ella siempre llega despues de mi ya que era parte del consejo estudiantil, aun asi no le pregunte nada, ella se veia muy feliz y si una mujer esta feliz no la interrumpas y dejala ser, otra frase de papa.