Insecurities;;JiKook

30

“Hay cosas que quiero decirte, pero simplemente te dejaré vivir”

El rubio lo mira, Jeongguk odia ver esos extraños ojos.

Ese no era el mismo Jimin del que se había enamorado..

—Jimin, yo.. tomé una decisión—dice. Pero quiere dar todos los pasos hacia atrás de nuevo—. Hablé con SeokJin, y él aceptó que yo me quedara en su casa. Esto solo será hasta el viernes..

El mayor lo mira muy confundido. ¿Por qué sentía que lo estaban dejando?, ¿o acaso eran esos pequeños traumas con los que seguía luchando los que lo hacían ver eso?.

—No me mires así, por favor—pide, bajando la vista—. No quiero dejarte solo, pero es algo que ambos necesitamos para poder pensar bien muchas cosas. Siento que nos estamos asfixiando, y no quiero que eso nos termine de cansar.

—Dices eso pero vas a irte—espeta, apretando la mandíbula.

Jeongguk suspira, sintiéndose rendido.

—Jimin, esto es por mí, ¿entiendes?—dice, sus palabras sonando más duras—. Necesito estar solo, necesito que todos dejen de señalarme y decirme las cosa que debo hacer o lo que hago mal. Quiero seguir, quiero sanarme, pero para eso, incluso debo hacer cosas que aún me disgustan.

Estira su brazo por sobre la mesa y acaricia la mejilla del rubio, quien suspira, dejando un pequeño beso en ella.

—No te vayas, por favor—su voz suena a ruego—. Te daré todo el espacio que quieras, pero no me dejes.. Incluso si solo es hasta el viernes—suspira—. Eres la única razón que tengo para vivir.

JungKook traga saliva y niega.

—No quiero más ser tu razón de vivir, Jimin—sincera, sintiendo un nudo en su garganta—. Me he sentido atado a esas palabras desde que empecé a empeorar. Antes creía que seguía aquí porque no quería ser egoísta contigo, cuando estaba al borde del abismo y solo quería saltar esas palabras se venían a mi cabeza y me sentía terriblemente mal. Pero ahora sé que no quiero eso para ninguno de los dos. ¿Qué hubiera pasado contigo si yo me iba?.

Jimin abrió los ojos en grande, sorprendido por eso.

—¿Hubieras saltado tú también?, ¿hubieras vivido la vida feliz que yo quería para tí si yo decidía acabar con todo?—cuestiona, los ojos del mayor se llenan de lágrimas y niega, no queriendo escuchar más—. No quiero que pienses o sientas que sin mí no hay nada más. Tú eres tu única razón para vivir, yo solo quiero que me ames y compartas esto conmigo, como yo lo haré contigo. No necesitas ser mi razón de estar aquí, y yo tampoco necesito serlo para tí.

Sus mejillas saladas por las lágrimas. El pelinegro pasa su pulgar, no pretende detenerlas, solo quiere acariciarlo.

—No voy a dejarte, vamos a seguir siendo una pareja—aclara, mirándolo con amor—. Solo van a ser unos días, quiero pensar tranquilamente en algunas cosas. Y quiero que tú estés bien sin mí, ¿si?. Prometeme que estarás bien cuando me vaya.

—Lo intentaré—murmuró, sonando algo distante.

JungKook se levanta, rodea la mesa y se pone de rodillas entre las piernas de Jimin, tomándolo por la nuca para hacerlo bajar la cabeza. Sus labios tocándose como si fuera la última vez, aún cuando no era así.

«Solo quiero que seas feliz, ¿es esto una carga más?», piensa el pelinegro, acariciando el labio inferior del mayor con su lengua. Jimin jadea porque le hace falta un poco el aire, pero no quiere separarse.

Prefiere dejar de respirar antes que alejarse de aquellos labios que tanto adora.

«Aún cuando me pides que sea feliz sin tí, a pesar de que no nos vamos a separar..»

Cuando se separan aprovechan para respirar bien y se miran a los ojos.

—Te amo, nunca lo olvides, ¿si?—susurra, abrazandolo con fuerza.

Si, aunque Jeongguk había descubierto que Jimin no era su razón de vivir, sabía que era una de los motivos por los que quería seguir luchando.

Deseaba que el mayor pudiera llegar a pensar lo mismo.

Park cierra los ojos y se deja embriagar por el perfume de su novio, sintiendo lo cálido que era.

—Todo estará bien—murmura Jimin, para ambos.

Jeon sonríe.

«Claro que sí».