𝐚𝐝𝐚𝐩𝐭𝐚𝐜𝐢𖦹𝐧
❝¿No es encantador, estar completamente solo? ❞
Beomgyu y Yeonjun despiertan en una caja de cristal, completamente solos, sin recordar nada de sus vidas.
˚ ₊· #2 en 𝗰𝗶-𝗳𝗶 ❪ 27|07|20 ❫♡︎
˚ ₊· #2 en 𝗺𝗮𝘁𝗿𝗶𝘅 ❪ 12|08|20 ❫...
Días y momentos monótonos donde no hacían más que caminar, cada tanto, se dedicaban a darse un mimo o un beso cerca pero a la vez alejados de sus labios, en un juego para hacerce el difícil, en parte retando al otro en una guerra secreta de quién lo haría primero.
No encontraron nada, como siempre, no volvió a llover, pero un día vieron cómo lentamente el exterior comenzaba a llenarse de arena.
Arena, como si se tratará de un desierto, con el paso de las horas se formaron montañas de arena, ambos encontraron divertido pasar entre medio de ellas, escuchar la arena pasar contra el vidrio, atravesando las lomas y sentirse como en una nave impenetrable, porque ningun grano entraba en la caja.
─ Si esto es un desierto, debe haber un oasis ─ dijo Beomgyu, con emoción─ ¿Lo buscamos?
─ Creo que esto es el oasis ─ Respondió Yeonjun─. Tu lo eres ─ añadió, provocando un rubor en el contrario.
En la noche, como siempre lo hacían tomaron sus manos, recostados sobre el colchón del suelo, y miraron la sutil luz sobre su cabeza.
─ Sabes, no lo recuerdo, pero creo que así sería dormir bajo la luz de la luna ─ susurró Beomgyu.
─ Creo que sí ─ Concordo Yeonjun, con una sonrisa.
Fueron largos segundos de silencio, en los que Yeonjun cerró sus ojos, creyendo que Beomgyu estaba por dormirse también, hasta escuchar al menor hablar.
─ Yeonjun... Tú no me dejarás sólo ¿Verdad?
─ No, Beomgyu ─ dijo el rubio.
─ Yeon, en serio, dilo en serio.
El mayor giró, notó las lágrimas en sus ojos y su labio inferior temblar, acercó su mano libre a su mejilla, acariciandola con su pulgar, formando circulos.
─ No te dejaré sólo, nunca... Y algún día, saldremos los dos de aquí, lo prometo, y hasta entonces, estaremos juntos, no voy a dejarte.
Beomgyu sonrió, se acercó más a él y se acurruco sobre su pecho, Yeonjun lo abrazó por sobre sus los hombros, dejándolo reposar sobre su pecho, con una sonrisa plantada en sus labios
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