Kings never Die © [Terminada]

Cap 25 [Vaquero]

Eross Zabat.

Han pasado tres días desde que estamos en casa de Ryan, dos noches desde que la bese, tanto mi mente como mis labios se niegan a olvidar el rose de sus delicados labios, lo cálida que estaba su piel bajo mis palmas, la necesidad de mas que apareció justo después de separarnos.

A pesar de estar bajo el mismo techo no hemos hablado del tema, en realidad poco hemos hablado, suele estar bastante callada, pasa la mayor parte del día durmiendo a causa del medicamento que debe tomar y cuando no duerme se queja constantemente de que no le permitimos hacer nada en la casa.

Su humor tiene cambios repentinos de ser sumamente cálida o suave o fría y distante, también se ha enojado bastante un par de veces y azotado un par de puertas.

El médico específico nada de ejercicio o esfuerzos como mínimo por esta semana, aun no me acostumbro a verla pasearse en ropa de chico por la casa no me incomode verla con una sudadera que poco alcanzan a cubrir sus piernas, o con alguna camiseta holgada siempre con medias largas, pero mi mente no deja de preguntarse por el o los dueños de esas prendas.

Después del beso estaba seguro de que se enojaría, espere seguro el golpe que nunca llego, solo me ha regalado un par de miradas acompañas de una sonrisa que no estoy muy seguro de cómo interpretar, nunca he sido tímido o eso pensaba pero ella me intimida, me acelera el pulso, me descontrola la mente, puedo asegurar que el sonrojo después del beso no me lo esperaba, pero sus manos tan bajo en mi abdomen reventaron el calor que subio demaciado rapido.

—¿Por qué me miras así? —Me sonríe algo burlona—, no te daré de mi comida si eso lo que pretendes —-Termina en un tono burlón. Levanta el bowl como si yo se lo quisiera quitar, apenas ahora entiendo que llevó mirándola desde que nos sentamos a comer y aun no he probado mi comida, la risa de Matth aparece ganándose una mala mirada mía.

—Estas algo más pálida que ayer —Aclaró tratando de poner tema

—Si me dejarais hacer un poco más que NADA —Ironiza algo hostigada—, no se algo así como un poco de ejercicio, mi cuerpo se repondría mejor, se curaría solito —Masculla lo último dando un trago a su vaso con agua.

—Te han dicho que nada de esfuerzo físico por cinco días así que te aguantes —La callo Erina con el mismo tono de Ryan.

—Pues te aguantes tu mis quejas —Dice encogiéndose de hombros, porque no se guarda lo mucho que la incomoda que cuando sale a la terraza cualquiera de los tres va con ella para asegurarnos de que no fume, aunque me diga en cada ocasión que no lo haría y ha roto cada cigarro que sacado, no queremos dejar nada la suerte.

—¿Y si vemos una peli? —Indaga Erina con voz infantil cambiando el tema, Ryan la ve con miedo y asco.

—Nada de cursilerías o la veras sola —La amenaza señalando con el dedo.