Capítulo 2 🌙

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Ella, una simple estudiante, era la joven que deseaba impedir la predicción de la bruja atormentado a su amado.

Estaba en clase y Kaito no había aparecido por ahí. Aoko platicaba con Keiko, y aunque la joven y Aoko no se hablaban mucho por ciertas razones, la primera escuchó atentamente su charla.

—¿Sabes, Aoko? ¡Dicen que la reina de Vespania vendrá a Japón de nuevo!

—¡Oh! ¿De verdad?

—¡Sí! ¿Y sabes que...? ¡Van a iluminar la torre de Tokyo de púrpura en olor a la realeza!

La joven protagonista casi se desmaya cuando escuchó aquello. Una torre púrpura fungía como parte de la profecía.

Kaito llegó en dicho momento, despreocupado pero con notables ojeras.

—¡Hola! —dijo dándole a la chica unas palmaditas sobre su cabeza y con una gran sonrisa.

—Buenos días. —contestó ella un poco desanimada.

Kaito se sentó en su mesa y vio desconcertado a la joven.

—¿Pasa algo?

—No. —respondió forzando una sonrisa. —¿Tú, cómo estás?

—¡Ah! —recordó. —¿Ya escuchaste que la reina de Vespania vendrá en unos días?.

Ella asintió fatigada.

—¡Traerá una de las joyas de su país, la original Cherry Shappire! ¡Jii me ha dicho que tal vez yo pueda... ! —le murmuraba con tono travieso y sonrisa infantil.

—¿Por qué apresurarse? —dijo alegre, interrumpiendo.

—¿Eh? —expresó confusión el ladrón.

—Probablemente no es lo que buscas, solo déjalo. —sugería sonriente. —¿Sí, Kaito?

El joven se mostró extrañado, sonrió divertido de inmediato para lanzar después una risita.

—¿Estás preocupada por mí, cierto?

La chica se ruborizo, desviando la mirada.

—¿Por qué no lo estaría? Soy tu novia, idiota. —replicó.

Y lo cierto era que Kaito no sabía sobre los pesares de la fémina. Tan solo Akako y ella tomaban con seriedad el asunto.

Él sonrió como un niño con las mejillas coloradas.

—No te preocupes. —sonreía despreocupado. —Puedo manejar lo que sea yo solo, mi hermosa señorita. —susurró usando aquel tono elegante de Kid.

Ella sonrió nerviosa, de nuevo su rostro se pinto de rojo.

—¡Vaya! ¿La parejita ya se está coqueteando desde la primera clase? —se escuchó una voz femenina desde atrás.

—¿Estás celosa,Akako? —se burló Kaito.

—¿Por qué yo estaría celosa de alguien como tú? —a ese punto a la bruja ya no le importaba de manera romántica. —Pero tal vez deberías hacer caso a tu novia. La seguridad de Vespania a mejorado mucho desde los atracos de Lupin III.

—Sí,sí. Lo que tú digas.
—balbuceó.

Antes de que mueras.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora