Capítulo 2/ Más mentiras

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Después de una caminata llena de miradas de inseguridad y desconfianza llegue al colegio cuando sentí que una voz me llamaba.

-¡Moni!-Gritaba mi amiga Pecu.-¿Has hecho el trabajo de Alee Bayron?

-Sí -digo sin mucho ánimo.

- No habrás dicho nada al respecto de tu visión de ministerio¿Verdad?-me preguntó con cara de preocupación.

-Sí que he hablado del ministerio y de lo horrible que es y como nos tratan. He añadido que Alee fue el responsable de la muerte de su mujer y que vivimos como esclavos.-dije con ironía- No soy tan tonta para que puedan hacerme daño gratuitamente.

Pecu puso los ojos en blanco y empezamos a reír.

-¿Has hablado con Daniel?- la miré con exasperada.

-¿Debería?- la reté. Ella bufó.

- Se que es difícil pero no puedes tratarle así.- posó su mano sobre mi hombro.

- No tengo nada contra él.-aseguré- Solo que siempre soy yo la que va ha hablar que lo haga él por una vez.

Sonó la campana , ya era hora de rezar antes de entrar a clase. Aunque el himno del ministerio nunca faltaba.

Pecu se me acercó y me susurro al oído -¿Vas ha hacer lo que dicen los demás ?

-¿Lo de no pedir por el ministerio?-Dije pensativa -Supongo que les seguiré el juego. Dudo que nos puedan hacer algo a tantos juntos.

Pecu asintió.

Empezamos a rezar y llegaron el momento de pedir :

-...pedimos por la familia ,por el colegio y por el ...-solo tres voces se,oyeron . Una la de un profesor y la de Susan y la de Gregori ,dos agraciados que iban a clase,con nosotros.

Los agraciados son familiares de los componentes del ministerio.

Estaba preparada para que los guardianes nos castigarán pero estaban ,allí ,quietos, esperando a que entremos como si no hubiera pasado nada.

Una hora entera hablando sobre lo maravillosa y controlada que era nuestra vida. De lo orgullosos que deberíamos sentirnos por vivir en una comunidad feliz, segura y regulada. Siempre se les olvida decir cruel, sangrienta. Me enfurecía la manera en la que hablaban de Alice. La llamaban demente y decían que por eso se causó su muerte , por que no supo controlarnos. ¡Vamos señores!¡ Todos saben que fue Alee! Los odiaba por mentirnos, por lavarnos la cabeza. Malditos.

Las demás clases pasaron sin ninguna anomalía y cuando pasaba por la plaza de la ciudad para llegar a casa vi algo que me paro el corazón.

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