PARTE 2. Cap 5: Día De Sorpresas

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Llego a mi cuarto y suelto mi mochila sobre el suelo. No quiero que se case con ella, yo le amo. Entiendo que ella sienta algo por él, pero nosotros nos queremos mucho. A lo mejor debería de hablarlo con BaeHyun.

Ya es el día de la quedada, espero que todos vengan. Ya estamos algunas personas esperando, y poco a poco aparecen más. Los que quedaban por llegar eran Narel y compañía. Los demás vamos preparando, organizando y colocando todo.
-¡Ya vino Narel!-grita uno de los amigos de BaeHyun.
Cuando volteamos a ver, todos nos quedamos paralizados al verlo con aquellas personas. Ellas no parecen verse sorprendidas, pero tienen cara de disgusto. ¿Quién diría que ese acabaría con Molly y Cathy? Dirijo mi mirada a Jessie, quien es la más sorprendida de todos, pues su ex-novio está justo abrazando a Cathy.

-Qué bien... -suelta en tono irónico Gail.

Al rato de colocar todo, parece que el grupo está muy dividido. Rose y Keila se intentan evitar, Jessie y Narel también, y aquellas dos se distancian lo más que pueden de nosotros.

Conforme pasaba el tiempo, hacíamos actividades en las que involucra an a todo el mundo para así romper el muro invisible. En mi opinión, la que es un caso es Cathy. Sólo salen estupideces de su boca y siempre estaba pegada a Narel. En cambio, Molly sólo se limitaba a seguirla a todas partes, nunca hablaba y cada vez que nuestras miradas se encontraban, esta la apartada en menos de un segundo.

La primera noche no es lo que me esperaba. Claro, nadie contaba con que vinieran aquellas dos. Hay mucha tensión en el ambiente y parecen que se están lanzando todos cuchillos con la mirada.

Al día siguiente vamos al lago a bañarnos y jugar. Aprovecho cuando todos están en el agua y me acerco a Baehyun.
-Tengo que hablar contigo.
-¿Sobre qué?-los demás nos interrumpen y nos llaman para unirnos con ellos-¿qué tal si a la noche lo hablamos?-asiento y nos vamos al agua tomados de la mano. Siento el contraste del agua fría con su mano cálida.

Llega la noche y busco a BaeHyun,pero no lo encuentro por ninguna parte. Pregunto a la gente dónde está y uno de ellos señalan el lugar. Está muy oscuro, menos mal que tengo una linterna. Distingo una silueta al fondo y me dirijo hacia ella.
Vaya, qué torpe soy, por casi me como un árbol xd
Ahora estoy viendo dos siluetas. Algo la linterna hacia ellas y oigo quejidos. Ahí están Narel y Jessie, asustados y molestos por la luz de la linterna. Jessie tiene lágrimas en su cara. ¿Qué está pasando aquí y qué hacen ellos dos solos en la noche alejados de los demás? Por lo que percibo, he llegado en el momento indicado. Sí, es ironía.
-¡P-Perdón!-tartamudeo y me pongo muy nerviosa-¡no quería interrumpir! Yo ya me iba. Pueden seguir haciendo lo que estaban haciendo... ¡Bueno si quieren, claro! Yo no soy nadie para decirles lo que tienen que hacer-empiezo a reírme de los nervios. Luego me doy cuenta que todavía los sigo a pintando con la linterna-¡perdón, lo olvidaba!-apunto hacia otro lado-bueno, ahora sí que me voy-suelto otra vez una risa nerviisa-¡no le diré a nadie! ¡ADIÓS!-mis piernas se mueven por sí solas y salgo corriendo del lugar, dejando atrás a aquellos dos boquiabiertos asimilando lo que acababa de pasar.
Cuando me acerco al campamento, veo a Baehyun saliendo de su caseta.
-¡Baehyun, te he estado buscando por todas partes!-apoyo mis manos sobre mis rodillas intentando recuperar el aliento.
-Perdona, estaba durmiendo xd
-¿Podemos hablar ya de lo que te iba a contar?
-Sí, claro-nos alejamos un poco de los demás y nos sentamos sobre un trozo de leña.

-Te tengo que contar algo. Es sobre el por qué salí tan desanimada de tu casa la última vez.
-Dime-entrelaza sus dedos con los mios y me sonríe.
-Rosa me contó una cosa cuando tú no estabas.
Él deja de sonreírne y pasa a tener una cara seria apartando la mirada-sabía que era por culpa de ella... ¡Quiero decir, no es que sea mala, es que la conozco desde hace muchos años!-dice por último nervioso alzando las manos y suelta una risa nerviosa por miedo a que lo malinterprete.

-Ne dijo que ustedes dos están comprometidos.
Me mira sorprendido y se queda unos segundos en silencio. Luego lo interrumpe con sus carcajadas.
-¿De qué te ríes? ¡Lo estoy diciendo en serio, incluso me dijo que ella estaba dispuesta a casarse contigo porque le gustabas! -le agarró por los hombros, pero este sigue riéndose y se seca las lágrimas.

-Eso era antes cuando éramos niños, y nunca ha llegado a ser oficial, por tanto ni siquiera se podía tomar en serio.

-Pero ella me dijo que ibas a volver a ser suyo y...

-No hagas caso-me interrumpe-nosotros no tuvimos ni tenemos ni tendremos nada entre nosotros. Yo ya estoy con quien realmente quiero estar comprometido-dice de broma guiñandone un ojo haciendo que mis mejillas me ardan.

Un chico coreano y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora