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León
-Roberta ...que haces aquí...que quieres??

Roberta
-Vine por que pensé que podríamos hablar, tú sabes olvidar lo que pasó y volver a lo de antes.

León
-No es un buen momento, necesito que te vayas ahora.

Roberta
-Por qué con quien estas??

León
-Eso no te importa, recuerda no somos nada, así que por favor vete, y déjame tranquilo.

Roberta
-Pues no me voy, es más quiero conocer a tu nuevo juguetito sexual, empujó al castaño y entro en la habitación, encontrando la cama un poco desordenada, pero sin rastro de la chica.

León
-Ya ...viste no hay nadie, ahora puedes irte.

Roberta
-Es evidente que aquí estuvo alguien, sabes que todo tu nerviosismo, la canasta y cobija en el piso me muestran que trajiste alguien importante a este lugar y merezco saber quién es, por todo el tiempo que estuvimos juntos.

León
-Mañana tengo muchas cosas que hacer y tu tienes clases que dar así que ya vete.

Roberta
-Me voy pero no me daré por vencida León, el la acompaño ala puerta y la cerró con seguro.

Machu
-Ya se fue, dije aún escondida.

León
-Donde estabas??

Machu
-Dentro de tu clóset, se me ocurrió que allí no buscaría.

León
-Te juro que no entiendo por qué se comporta así.

Machu
-Esta loca de celos, te quiere y como sabe que estas con alguien más, pues actúa así.

León
-Creo que sí lo vuelve hacer, tendré que despedirla.

Machu
-No crees que eso la ponga más loca??

León
-No me importa, hay ordenes de alejamiento, pido una y listo, ella no me importa, solo quiero que me deje tranquilo para poder disfrutar completamente de ti, de mi dulce, inocente y encantadora novia, la sujete por la cintura pegandola a mi, bese su cuello, la sensación de romanticismo y pasión volvía a mi, pero al parecer no en ella.

Machu
-León no me malentiendas, pero lo mejor será que me vaya, esto es demasiado arriesgado, me preocupa que pueda descubrirnos, Sebastián también insiste en que nosotros tenemos algo, y si habla con Roberta, yo no me quiero imaginar lo que pasaría.

León
-Lo que pasaría es que me iría fuera del país contigo.

Machu
-Eso es un sueño León, yo creo que hay que ser realista, y debemos separnos, por lo menos hasta la graduación.

León
-No lo voy hacer no te voy a dejar, no ahora que te conseguí, prefiero la cárcel, un manicomio, o someterme a las torturas más horribles, antes que permitir que dos celosos y locos te alejen de mi.

Machu
-Pero León, yo no soportaría ver que algo malo te pase solo por aferrarnos a esto.

León
-No me amas lo suficiente como para luchar por esto??

Machu
-Si yo te amo, León y si puedo luchar pero eso no borra el miedo que tengo.

León
-Voy a buscar la manera de quitarme a Roberta de encima, sobre tu amigo, pues tu podrías encargarte, por qué si yo lo hago, pues terminaría por matarlo.

Machu
-Si ya me lo imaginaba, pero..

León
-Pero nada, ya deja ese tema no te voy a dejar, y no intentes alejarme por qué soy capaz de hacer una locura.

Machu
-Esta bien, confiaré en que todo salga bien, para todos.

León
-Eres mía y yo tuyo, nos debemos el uno al otro, no pensemos en nadie más en este momento, hay que dejarnos llevar, en esta habitación solo están, dos almas que se pertenecen.

Machu, León se quita el pantalón y lo demás, su la ropa queda en un rincón de la habitación, se sienta en la cama, mientras contempla como me desnudando para el, llevo lencería de encaje negro que no deja mucho ala imaginación, me acerco a él y me siento en sus piernas, el me sujeta con fuerza, haciendo que mis pechos queden en su rostro, el no dudo y con su boca hizo aún lado mi sostén dejando al aire mis pechos, comenzó a morderlos y chuparlos, mi respiración se hacia más lenta, estaba tan excitada, y eso que solo era el comienzo, el se deteníe y me mira con una sonrisa soberbia, -Asi que quieres jugar sucio, pues para que sepas yo también puedo hacerlo, lo empujé con fuerza para obligarlo a que se acueste restriego mi cuerpo que ardía de deseo, contra el suyo, le ató una corbata en los ojos y me alejó.

León
-Vamos a jugar alas escondidas??

Machu
-No, es solo que quiero que tu seas el que gocé y sufra en este momento,  tome su miembro entre mis manos, lo froto, y lo beso, elevo la mirada para ver sus reacciones de placer, deslizo suavemente mi lengua sobre él, una y otra vez, hasta introducirlo pir completo en mi boca, tengo el control de su cuerpo, escucho tus gemidos y  como se deja llevar.

León
-Se siente tan malditamente bien, eres una seductora, pero ya no resisto esto ahora soy yo el que tomara el control.

Machu, León se quito la corbata de los ojos, con mucha habilidad se reincorporó y me tomó por la cintura con una mirada lujuriosa, me da la vuelta y me tira bruscamente sobre la cama, con la misma corbata hata mis manos sobre la cabeza, me desnudas por completo, separas mis piernas y me embesti de una, se queda quieto por unos segundos, yo me aferro alas sabas, mi cuerpo se estremeció bajo el suyo, y di un pequeño gemido, que del dolor pasó al placer, cuando comenzó a moverse, era la sensación más delicadeza que nunca había experimentado, sus embestidas aumentaban al igual que mis gemidos -León...ahhh....ah.

León, libere sus manos, y se aferró a mi espalda, sus rasguños se hicieron más profundos cuando por fin terminamos, los corazones latian, desesperados el sudor nos recorría el cuerpo, la bese, y acaricie su rostro calmando la me recosté a un lado jalandola para que ella quedara en mi pecho, cruzamos miradas intentando saber que pensábamos, ella arrugó la nariz y me besó.

Machu
-Pareces feliz.

León
-Estoy más que feliz, soy un hombre afortunado, fui tuyo por completo, y tú fuiste mía, aunque aún hay cositas que te quiero hacer.

Machu
-Pues tenemos toda la noche para hacerlas no crees??

León
-Es verdad, mejor voy comenzado por qué las ideas me están llegando como rayo, y no quiero olvidarlas.

Machu
-Pues si olvidas algo, yo puedo ayudarte a completarlas.

La alumna Donde viven las historias. Descúbrelo ahora