07:00 am.

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Katherine-

—Creo que esta es la despedida —anuncia.

—¿Seguro llevas todo? ¿No dejaste nada en el baño o algo? —intento mantener la conversación.

—Puede que sí, déjame revisar —camina hacia el baño.

Pasó las manos por mi rostro.

Tranquila, tienes que mantener la cabeza fría. ¿Es un momento desgarrador? Sí. ¿Vas a llorar cuando se vaya o quizás antes de eso? Por supuesto, pero tienes que mantener la calma.

Debo de dar mi mayor esfuerzo para contener las lágrimas.

El sonido de la puerta abriéndose capta mi atención.

—¿Olvidaste algo?.

—No, pero tenía que cerciorarme —camina hacia la puerta.

—Por supuesto. Así no tendrás que volver hasta acá a buscar nada.

Ojalá hubiera escondido alguna de sus pertenencias para hacerlo volver. ¡¿Por qué no se me ocurrió?!.

—Si, menos mal.

Se coloca de frente a la puerta y coloca la mano en la manija.

Este es el momento, será la última vez que lo vea, es hora decir adiós. Las lágrimas bajan por mis mejillas, un nudo se aloja en mi garganta junto con todas mis esperanzas.

—¡Kat! ¿Estás bien? —dice nervioso.

Debo lucir patética justo ahora. Tanto que intente no hacer una escena y termine haciéndola de todas maneras.

—Perfectamente —miento.

—Esa mentira pudo haberte funcionado en otra situación, pero estás llorando frente a mí ¿No crees que puedo notar que mientes?.

—¡No estoy llorando por ti! Solo recordé algo que me puso triste —suelto. ¡Cielos estoy es muy patético —¡Solo termina de irte! Una nueva vida te espera y no quiero seguir siendo un obstáculo —exclamo.

—No pienses así. ¡Claro que no eres un obstáculo! —toca mi mejilla —Eres la mujer que amo.

Miente.

—¡Cállate! No quiero seguir escuchando tus mentiras.

—No son mentiras. Eres a la única que he amado en toda mi vida.

¡Miente!.

—¡Vete!.

—No quiero irme y dejarte así.

¡De todos modos me dejaras así!.

—¡Solo vete qué de todas maneras terminaré sola!.

—¡No quiero irme pero tengo que hacerlo!.

—¡Entonces lárgate de una vez! —mi voz es cada vez menos entendible.

—No sin antes decirte que una última vez que te amo —cierro los ojos. No quiero escucharlo —Y que sin importar dónde esté, mi corazón te pertenece.

—¡¿De qué me sirve ser la dueña de tu corazón?! —explotó. Se aleja de golpe —¿De qué me sirve saber que me amas solo a mí? Si igual te irás. Puede que sea la dueña de tu corazón, pero escogiste a alguien más para ser la compañera de tu vida -sonrió aguantando un sollozó —¿Ves la diferencia?.

Lo dije. Por fin lo dije. Ahora solo quiero, y debo, terminar con esto.

—Se que es difícil verme partir, pero me destroza el corazón verte así...

03:15 AM [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora