LETTERE | KTH + JJK

Cinco

Farah miraba a su novio fumar, soltó un suspiro frustrado y echó su cabello hacía atrás con su mano derecha. Parecía que las discusiones nunca faltaban todos los días.

—¿Porque te has enojado?—Preguntó en susurró. Jungkook soltó una sonrisita con el cigarrillo entre sus labios delgados y rosados. Había detenido el auto a dos cuadras del instituto por una fuerte discusión en donde Jeon le había gritado como nunca lo había hecho. Causando que saliera del auto para no ocasionar un accidente.

—Me repugna que estés detrás de ese niñato, Farah. ¿Acaso a ti te gustaría que haga lo mismo?—Se acercó a ella, Farah soltó un bufido y luego colocó sus dos manos en los hombros de Jungkook.

—Solo me acerque a darles las gracias por cuidarme cuando sucedió el sismo. Nada del otro mundo, cariño—Beso la comisura de sus labios, Jungkook soltó el humo grisáceo y sonrió para después besar a su novia tomándola de la cintura con su brazo izquierdo.

La mano de Jungkook fue bajando un poco lo cual Farah quitó del lugar mirándolo de mala manera. Se encontraban en un lugar público y aquello no era bien visto. La mirada de la chica se desvío hacía una señora que caminaba cerca de ellos pidiendo dinero. Ella hizo una mueca viendo como la miraban muy mal y parecía no recolectar nada de dinero.

—Debemos ayudar a aquella señora—La señaló con su cabeza, Jungkook volteó a verla y asintió. Farah volvió al auto para sacar su billetera y acercarse a la señora. Ella sentía horrible ver a ese tipo de personas y sabía que ahora mismo muchas de ellas se encontraban de esa manera, en Corea y todo el mundo. Además, el sismo había causado que algunas de ellas, perdieran sus viviendas.

Farah camino por el asfalto al mismo tiempo que sus zapatos de tacón resonaban en ellos, a su lado Jungkook tomándola de la cintura.

—Hola—Le sonrió a la señora, ella le devolvió el gesto. Farah saco dinero de su billetera para después extendérselo. Era una cantidad grande al igual que los billetes de Jungkook.

—Es mucho dinero, cariño—Le dedicó una sonrisa pequeña, Jeon negó con la cabeza.

—Así está bien, lo necesitará. ¿Perdió su casa?—Preguntó Farah leyendo el cartel de la señora, ella asintió con una mueca. Antes de volver a hablar, Taehyung se hizo presente frente a ellos con un aura triste.

—Has llegado, hijo. Mira, tenemos dinero para comer—Le comentó un poco alegre, la pareja se encontraba sorprendida por lo que estaba sucediendo. Entonces, la chica entendió todo. Taehyung se había quedado sin un lugar donde vivir y sin comer. Sintió horrible al escuchar aquello, quería llorar por todo lo que sucedía.

—Oh Taehyung, lo siento mucho. Eh, tengo una propuesta—Colocó un mechón de su cabello detrás de su oreja izquierda y los miró. Jungkook soltó su cintura y se cruzó de brazos esperando las palabras de su novia.

—No te preocupes Farah, muchas gracias. A los dos—Dijo Taehyung deshaciéndose de su mochila para dejarla en el suelo y ayudar a su madre.

—No, quiero decir, tengo un departamento cerca del instituto. No me molestaría para nada que se quedarán por un tiempo—Explicó la chica de cabello rubio. De verdad quería ayudarlos mientras que a Jungkook no le molestaba con tal de que no se acercara tanto a su novia. Fuera de eso, estaba dispuesto a ayudarlos con lo que necesitaran.

—No Farah, no podemos aceptarlo. Sería mucho, estaremos bien con esto, gracias.

—Por favor, de verdad no hay ninguna molestia. Estarán bien dentro del departamento...mientras consiguen otro lugar o algún trabajo—Suplicó, Taehyung soltó un suspiro y miró a su madre quien parecía que le suplicaba con la miraba que aceptara la propuesta de la chica. Por último, asintió resignado.

—Solo será por poco tiempo—Dijo algo tímido, Farah sonrió en grande y negó dándole una mirada rápida a su novio. Solo para verificar que él no estuviera molesto pero no, no fue así. Lo cual fue bueno.

—No hay problema, pueden quedarse el tiempo que gusten. Realmente sería mucho mejor que fuera por un buen tiempo, el departamento siempre se encuentra solo—Farah ayudó a la señora Kim a recoger algunas de sus pertenencias para después dirigirse al auto de Jungkook.

El viaje empezó desde aquella calle hasta el departamento de Farah que se encontraba en una de las mejores zonas de todo Seúl, las dos personas en la parte trasera miraban las mansiones y departamentos muy lujosos con rostros sorprendidos. Y es que así era, la pareja provenía de familias muy adineradas que solían tener éxito hasta fuera del país. Eso lo sabía perfectamente Taehyung, que de su parte, solía batallar demasiado para comer junto a su madre. Es por ello que estudiaba muy duro para no perder aquella beca.

Jungkook detuvo el auto frente a un edificio gigante, su novia bajo con una pequeña sonrisa y ayudó a la señora Kim a hacerlo. Jeon tomo la mano de Farah para entrelazarla y entrar al edificio con las dos personas detrás de ellos. La chica saludó al personal dentro del edificio al igual que su novio, era demasiado raro verlos por esos rumbos debido a que el departamento se encontraba abandonado, solo hacían limpieza algunos días de la semana. Cuando la pareja dormía juntos, era en casa de Jeon. Siempre la llevaba a todos lados con él, siempre quería que Farah estuviera a su lado hiciera lo que hiciera.

—Entren, entren. Con confianza—Dijo Farah en cuanto abrió la puerta de su departamento, dando a mostrar muchos lujos por todos lados con colores blancos y dorados. Perfectamente combinados y ordenado.

—Es muy precioso—Comentó la señora Kim. La chica le sonrió asintiendo haciéndose a un lado para dejarla pasar y que admirara mucho mejor su alrededor. Camino hacía las habitaciones para indicarles cuáles serían las suyas y darles un pequeño recorrido por todo el lugar.

El olor a cigarrillo se hizo presente, Farah supo al instante de que se trataba de Jungkook quien volvía a succionar aquella sustancia tóxica. Se asomó por la habitación principal para verlo recargado en la pared de enfrente con el cigarrillo en sus labios, le sonrió sin mostrar sus dientes. Le parecía demasiado atractivo verlo de esa manera y siempre con vestimentas en colores oscuros pero siempre predominando el negro. Taehyung realizó una mueca al sentir todo el humo por el pasillo en cuanto salió de la habitación, Jeon lo siguió con la mirada sin importarle si este lo notaba.

—Tampoco te ilusiones con Farah, solo está siendo buena persona. Como lo haría con cualquier otra.

El concepto de Jungkook en la historia: