changes ♡ [quinton griggs]

CAPITULO ONCE

Al llegar a mi oficina, estuve literalmente esperando a que Quinton llegara por casi dos horas. ¿Qué acaso no iba a venir?

Seguramente no lo pudieron traer y Addison olvido avisarme.

Salí de la oficina y caminé hacia la recepción... Y oh vaya, con la sorpresa que me encuentro.

- ¿Quinton? ¿Cuándo llegaste?

- Hmm... Hace como dos horas.

¿QUE?

- ¿Y por qué no fuiste a mi oficina?, se supone que tienes que estar conmigo, Quinton.

- Oh, sí, lo siento. Es que me divierto mucho con Addison.- dijo mientras le sonreía a Addison, y esta solo me miraba apenada.

WTF.

- Eh.. ¿Okay?, voy a... Voy a estar allá, por si quieres ir.

No perdí ni un segundo y me fui a mi oficina.

Me sentía totalmente apartada, sentía que Quinton me había cambiado por completo por Addison.

Tal vez ya le aburrí, o no sé que hice mal.

Me senté en mi escritorio y seguí con mi trabajo. Si Quinton quería estar con ella, esta bien. De todas maneras ella cuida de él, que es lo que más me importa.

Tocaron la puerta. Bufe, ya sabia quien era.

- Pasa.- dije de mala gana.

- Aria... Lo siento.- entro Quinton con la mirada agachada, como la primera vez que lo vi.

- No, esta bien. Si ya te aburriste de mi y Addison te parece mas divertida, lo entiendo, de verdad. Con que cuide de ti todo esta bi....

- Agh, cállate, no te hagas la víctima. Yo sufrí también.

¿Qué? ¿Ahora qué hice?

- ¿De qué hablas?- dije confundida, y a la vez ofendida por la forma en la que me habló.

- Él baboso ese, Jaime.

- Jaden.

- ¡Lo que sea!

- ¿Qué tiene Jaden?- pregunté.

Quinton me jaló del brazo e hizo que me sentara en el piso, sobre las mantas. Se sentó en mis piernas, e hizo que lo abrazara. Ya se está mal acostumbrando a que lo abrace después de que dormimos juntos.

- Pues que, ayer no me hiciste caso por estar con él.

- Quinton, siempre tengo mi atención en ti. Nada más vino a verme y yo le di un poco de atención a él, es todo.

- "Un poco de atención", literalmente ni te acordabas de que yo estaba aquí. Agh, ya no te quiero.- Quinton empujó bruscamente mis brazos y se levantó, sentándose lejos de mi.

- Quinton, no hagas un berrinche, podemos hablarlo mejor.

- No quiero hablar contigo. Ve a hablar con Jaime.

Me quede callada unos segundos, y luego Quinton comenzó a llorar.

- ¿Q-quinton? ¿Estas bien?- me acerqué rápidamente a él, ¿Qué le pasa?

- Sí, no sé porque estoy llorando.

Cierto, cambios de humor.

- Oh, bebé, son los cambios de humor por los síntomas. Ven aquí.- extendí mis brazos y Quinton gateó lentamente hasta llegar a mí, acostándose de nuevo encima mío.

- Me gusta estar contigo.

- A mí también me gusta estar contigo, Quin.

Quinton empezó a jugar con mis manos, como si fuera un bebé.

- No quiero que cuando Jaime sea tu novio, me dejes de lado.

- Es Jaden, y no digas tonterías, no te voy a dejar de lado.

- ¿Estas diciendo que si vas a ser novia de Jaime?

- ¡Jamas dije eso!, no pongas palabras en mi boca.

- Pues no lo sé, tal vez te gusta.

- Si, tal vez me agrade.

- ¿Me puedes dar una paleta?, ya me tome las pastillas con Addison.- Quinton cambió el tema completamente.

- Tu mejor amiga Addison.

- ¡Eres una celosa!

- ¡Al igual que tú!

*********************

A Quinton le había vuelto a dar fiebre. 

Seguíamos los dos en el piso, ya desde hace rato había terminado el trabajo de hoy, pero aún faltaba bastante para cerrar.

Ahora yo estaba acostada con la cabeza de Quinton en mi pecho, mientras le acariciaba su cabello. 

Se sentía muy enfermo, lo podía ver en sus ojos de cansancio.

- Quin, tienes el cabello muy maltratado.

- Perdón.- a penas pudo responder, su cabeza le dolía mucho. Tenía los ojos cerrados y el ceño fruncido, se veía muy lindo a pesar de que temblaba por el frío, y con sus ojeras, qué podía disimular con todas las pecas que tiene en el rostro.

- El domingo que vayas a mi departamento, te voy a poner un tratamiento en el cabello. ¿Quieres?

- Si así lo tendré mejor que Jaime, sí.

- Agh, todo es competencia. Contrólate. Cambio de tema, ¿Sabes qué también hay en el edificio?

Quinton nego tiernamente.

- ¡Una piscina! El domingo cuando te sientas mejor, ¿Nos metemos?

Quinton sonrió levemente y asintió. Quinton se hizo mas para arriba, acurrucando su naríz en mi cuello, lo cual me hizo sentir cosquillas. Pero Quinton parecía disfrutar el contacto, parecía un tierno gatito.

Abrieron la puerta. 

- ¿Saben?, siempre entramos en un mal momento.- eran los chicos.

- Quin, levántate, llegaron tus amigos.- lo moví levemente.

- Creo que esta dormido.- dijo Anthony mirándolo sorprendido.

- Oh, bueno...

- No te preocupes, Aria. Podemos volver en otro momento.- dijo Josh.

- ¡No!, no pasa nada. Vengan, siéntense.- traté de sentarme con cuidado para no despertar a Quinton, quedando él sentado en mis piernas mientras me abrazaba. Dios mío, es como un Koala.

- Quinton no te suelta ¿Eh?- dijo Bryce riendo.

- Lo sé, pero esta bien. Nada más porque se siente mal. Además, se ve muy tierno.

Lo mire, y era asi, se veia super lindo.

- Jamás había visto dormir a Quinton tan tranquilo.- confesó Josh viéndolo.

Me daba tanta alegría escuchar eso.

- ¿Sabes, Aria?, Lo haces feliz.- dijo Bryce mirándolo también.

- Él también me hace feliz.