Taehyung despertó somnoliento, el día anterior se había quedado dormido ya que se sentía muy cansado y no tenía muchas fuerzas, por ese motivo había faltado ese día. Su madre nunca se dio cuenta, ya que el omega no salió en todo el día y solo se preocupaba por dejar mensajes en el buzón de su novio, texto tras texto. De sobra sabía que el alfa no iba a contestar, ya que a esa hora seguía en clase. Pero después de que esperó pacientemente, todos sus mensajes fueron respondidos con tiernos corazones en ellos.
Gracias a su novio se había enterado que toda la escuela ya sabía que su amigo Jimin era un omega. La noticia no tardo en viajar mas rápido que un rayo. La mayoría había sido testigo de aquello y aseguraban de que todo lo que se decía era cierto. Además, después del receso ni Jimin, ni Yoongi habían vuelto a sus respectivas aulas.
Si bien ahora Taehyung no se sentía del todo bien, no quería faltar. No por el hecho de que perdería las clases que el profesor brindaba, las cuales eran aburridas. Sino porque no iba a soportar un día más sin ver a Jungkook, lo extrañaba demasiado y no era lo mismo hablar con el alfa por teléfono que verlo a la cara. Además debía de estar ahí para apoyar a Jimin.
Con un poco de pereza salió de casa, como siempre no había llegado a desayunar y solo tomó una gran manzana de la mesa y se fue en su bicicleta. Tan solo había avanzado 4 cuadras y doblado una esquina cuando se topó con un apuesto alfa esperándolo recargado sobre una pared.
- ¡¡Kook!! - llamó eufórico el omega pedaleando a gran velocidad para llegar.
El alfa levanto el rostro sorprendido - ¡Tae cuidado! - advirtió el alfa, al ver que su omega pronto lo iba a pasar.
Jungkook frenó lo más rápido que pudo y para su suerte no atropello a su novio. Bajó de la bicicleta y la dejó caer al frío concreto, para saltar a los brazos extendidos de Jungkook. Sonrió al sentir por fin la calidez de este y quería permanecer por más tiempo en ese estado, pero debía de separarse si no quería llegar tarde.
- Te extrañe tanto.
- Yo también - respondió Jungkook y beso los pequeños labios de su omega, disfrutando de ellos solo un instante - Pero debemos irnos, sino ahora sí llegaremos tarde.
- Esta bien - sonrió y fue por su bicicleta - Ven súbete, asi llegaremos más rápido - señalo la parte trasera de su bici.
El alfa sonrió de igual manera y se posicionó en la parte trasera, colocando sus manos en la cintura de su omega - De acuerdo vamonos, adelante~ - ordenó el alfa contento.
Taehyung solo asintió feliz, amaba la personalidad tan divertida de su novio. Siempre juguetón e inquieto alrededor suyo y con el resto. Manteniendo siempre una hermosa sonrisa ante todo y la risa escandalosa que poseía solo lo contagiaba. A diferencia de otros alfas, Jungkook siempre se mostraba cariñoso y para nada agresivo, tampoco celaba por todo a su omega, como muchos otros alfas lo hacían.
Por esas y muchas razones más Taehyung amaba a su divertido novio, incluso con sus pequeños defectos. Jamás lo había visto furioso por nada y tampoco peleado con nadie. Era un ser de amor y paz y así también era como todos lo trataban.
•••🌼•
Taehyung estaba esperando a Jimin con los nervios a flor de piel, ensi toda la clase esperaba la llegada del "nuevo omega". Debían confirmar que lo que habían sentido el día anterior si era real y no solo "un accidente".
Jackson no había entendido nada cuando todo mundo el día anterior se habían encargado de informarle sobre la situación de Jimin y el alfa aún no podía creerlo, es más, había enviado un sin fín de mensajes a su amigo para que le confirmara que lo que decían todos era un simple rumor, porque se negaba a aceptar que Jimin le habría mentido con algo tan importante. Llegó al salón de clases y en lo único que se concentró fue en hallar a Jimin y Taehyung. Para su suerte el último si estava ahí.
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AROMA [YoonMin]
FanfictionEl aroma de un Omega o un Alfa es muy fuerte, entre ellos pueden distinguir que aroma tiene cada uno, lo cual los ayuda para elegir o encontrar su pareja predestinada. El sentido del olfato es muy desarrollado como unos verdaderos lobos. ¿Pero que o...