Y͜͡o͜͡u͜͡'r͜͡e͜͡ M͜͡y͜͡ B͜͡e͜͡s͜͡t͜͡ F͜͡r͜͡i͜͡e͜͡n͜͡d͜͡ ꨄ︎𝑃𝐽𝑀ꨄ︎

Tercera Parte (Epílogo)

-Por Dios, Kate, ya te he dado con todos los gustos. ¿Qué más quieres de mí?- preguntó el pelinegro un poco cansado por lo que pedía su esposa. 

-Quiero me des más de lo que no sea material....- frustrada le contestó comenzando a llorar- Quiero amor, Jimin. 

El nombrado se había quedado sin palabras. Ella lo amaba a él y Jimin también sentía cariño por Kate. Pero había algo que lo estaba atormentando y aún no lo descubría. 
Ellos habían vuelto a Seoul sin haberse cumplido un año de su luna de miel. A los dos meses habían regresado, ya que a su esposa no le había gustado el país y le pidió a el pelinegro que volviesen. En cierto modo, Jimin cumplía con todos los caprichos que ella pedía, ya que gracias a la empresa de su Padre, ellos tenían dinero. Además los padres de Jimin con los padres de Katerine, habían arreglado para regalarles algo ambos: Los padres de ella le regalaron la luna de miel en Estados Unidos, ya sea los pasajes como la estadía. Los padres de Jimin le regalaron dinero y una hermosa casa, cerca de la empresa de su padre, para que cuando volviesen se instalasen allí. 

[...]

Su refugio era el bar al que siempre visitaba cuando iba con su padre a charlar sobre "cosas de hombres", o al menos su padre se lo decía de ese modo. 
Después de esa discusión con su esposa, tomó su chaqueta de cuero color negro y se fue hasta allí para tomar una cerveza. Eso siempre lo relajaba. 

-Jimin, ¿qué sucede?- preguntó Rae Hyung Sik, quien era el cajero y encargado de la barra de los tragos- Te conozco y sé que no te encuentras bien. 

-Es que....mi matrimonio no va como esperaba.- pronunció el pelinegro mientras le daba un sorbo a su vaso de cerveza.-

-Y, ¿qué ha pasado con tu chica? ¿has podido contactarla? Sé que siempre te hace bien en estos tipo de casos.- 

El pelinegro lo miró confuso y se puso a pensar a quién se refería. 

-¡Ah! Hablas de ______, ¿verdad?- 

-Sí, esa misma...-contestó Rae Hyung mientras terminaba de secar un vaso para guardarlo en el estante.

-No es mi chica, es mi mejor amiga. Además, no. No la he podido contactar.- tomó otro sorbo

El pelinegro, después de la luna de miel, trató de contactarse con ella y, al parecer, había cambiado su número de teléfono. Fue a visitarla al departamento en el que vivían juntos, pero estaba en venta. Todo daba a entender que había perdido todo tipo de contacto con ella y no sabía el por qué. 

-Mira, puedes mentirle a cualquiera menos a mí. Cuando hablas de ella te brillan los ojos....- habló apoyado sobre sus codos inclinándose ante Jimin.

-¿En serio?- preguntó curioso.

-¿No te has dado cuenta niño?- preguntó asombrado Rae al ver la incredulidad de su amigo. 

Todos alrededor estaban alborotados menos Jimin y Rae Hyung, lo cual sólo prestó atención Rae. 

-¡Hey! Pero si es nuestra pequeña princesa del bar.- habló Rae Hyung. 

El pelinegro estaba de espalda por lo que no podía ver de quién se trataba. Pero realmente no le importaba, ya que su mente estaba concentrada en su mejor amiga, como la llamaba él a....

-¡______!....-esta vez sí llamó la atención de Jimin, a lo que este levantó su rostro y observó a Rae Hyung- Has hecho bien en venir Park.- le susurró en la cara y le guiñó un ojo. 

-Hola Rae Hyung...- chocó los cinco con este- ¿Cómo has estado?- 

-Pues... muy bien. Aunque he tenido mucho trabajo esta semana, pero hoy está todo tranquilo.-