Learn to forget || [Markjinson/Bnior]

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Jackson

Ya había pasado alrededor de una hora y media desde que Mark se fue, mientras tanto, traté de convencer a Jinyoung en que se quedara tranquilo y pudiera descansar un rato hasta que Mark volviera. Me hizo caso y se durmió casi instantáneamente, quedándome yo un rato más con él hasta que el Doctor Yoo volvió a entrar a la habitación y me avisó que el horario de visita había acabado.

Antes de salir, besé a Jinyoung en el dorso de su mano y le di otro beso en su fría mejilla, verlo en esa camilla me producía escalofríos y una total tristeza.

-Pueden volver a pasar en el horario de almuerzo, que sería a medio día.- Mencionó el doctor, cerrando la puerta tras de él.- Por ahora te recomiendo que vayas a descansar o comer algo.

-Sí, eso haré.

Me despedí de él con un apretón de manos y más adelante me encontré con Jaebeom en la sala de espera, este estaba semi recostado en un sofá con los ojos entre abiertos, así que me acerqué sigilosamente para sentarme a su lado.

-¿Tienes hambre?- Le pregunté con voz fuerte, acción que hizo que se sobresaltara en su asiento y yo me reí bajito.- Te invito algo de comer, vamos.

A regañadientes se levantó de su sitio y me siguió hasta la cafetería, bajamos en el ascensor en un silencio algo incómodo y apenas llegamos al recinto, nos sentamos en una de las mesas del rincón. Lo bueno es que a esta hora no había demasiada gente dentro, así que no había tanto bullicio.

Pedí 2 cafés calientes junto con unos croissants de jamón y queso, pagué la cuenta y me dirigí con la bandeja llena de comida hasta el lugar donde nos habíamos sentado.

-Gracias.- Susurró, tomando su taza humeante de café entre sus manos y dándole un gran sorbo, luego me miró con una ceja alzada.- ¿No solo me trajiste aquí para invitarme el desayuno verdad?

-Bingo.

El pelinegro frente a mí rodó los ojos con obviedad y preguntó.- ¿Qué quieres saber Wang?

Le di una mordida a mi croissant antes de responderle.- ¿Jinyoung te comentó algo acerca de mudarse solo?

Asintió.

-Sí, me dijo que empacara sus cosas lo antes posible del departamento en donde está ahora con ustedes y que le ayudara a conseguir uno nuevo.

-¿No crees que es algo apresurado?

-Claro que sí, pero si eso es lo que quiere, entonces no me voy a oponer.- le dio otro sorbo a su café.- Aunque sí trataré de convencerlo para nos deje cuidarlo, a veces Jinyoung es tan testarudo que prefiere hacer las cosas por sí solo.

Concordé ante lo último y volvimos a quedarnos callados, cada uno metido en sus propios pensamientos. De lo único que quería asegurarme era que Jinyoung se encontraría en buenas manos apenas saliera del hospital, hasta que la voz de Jaebeom volvió a cortar el ambiente.

-Escucha Jackson... no quiero ser un metiche ni nada de eso, pero me gustaría dejarte en claro algunas cosas.- le di un leve asentimiento de cabeza para que prosiguiera hablando.- Jinyoung es una persona que le gusta guardarse las cosas para él solo, y sinceramente después de lo que pasó esta madrugada, creo que lo mejor sería darle su espacio...

-No te preocupes por eso, estoy de acuerdo contigo en ese aspecto, Mark y yo cometimos errores que lastimaron a Jinyoung y por mi parte, estoy dispuesto a hacer todo por su bienestar físico y mental.

Jaebeom lucía un poco sorprendido ante mis palabras, pero se recompuso en unos segundos.

-Me alegra oír eso, al parecer ya no me caes del todo mal.

Reí con ganas.- Solo quiero que Jinnie se encuentre bien y pueda seguir con su vida, él es una maravillosa persona que se merece todo lo bueno de este mundo... ¿no crees?

Él asintió.

-Ya sea al lado de Mark o mío, igual deseo que logre encontrar el amor en un futuro, incluso contigo ¿sabes?

Casi se atraganta con la comida cuando escuchó mi pregunta.

-¿Cómo sabes...?

-¿Qué ustedes se gustan entre sí? Por Dios Jae... es demasiado evidente, debo admitir que siempre tuve celos de ti pero no eres una mala persona.- hice una pausa mientras terminaba de masticar los restos de mi desayuno.- hasta te doy el permiso de cortejarlo.

Volvimos a reír y sentí que el ambiente tenso que antes nos cargábamos se iba aligerando de a pocos, le dije que lo podría ayudar a conseguir un nuevo departamento para que Jinyoung se quedara temporalmente y que no era necesario sacar sus cosas a la apurada. También le comenté en que podríamos turnarnos para cuidar de él mientras esté delicado de salud.

Jaebeom aceptó la mayoría de cosas que le había propuesto y terminamos nuestro desayuno con una plática amena, recibí un mensaje de Mark que me decía que se encontraba fuera del hospital y que volvería antes de la hora del almuerzo para poder conversar con Jinyoung más tranquilo.

No sabía que era lo que nos depararía el futuro de ahora en adelante, pero lo único que tenía en mente era que Jinyoung pueda encontrar la felicidad que se merece. 

Fueron muy pocas palabras las que nos dirigimos en aquella habitación, pero para mí eran las necesarias para poder entender su punto de vista. Tampoco es que quisiera rendirme tan fácil con él, amo a Jinyoung, de eso no cabe duda, pero una parte de mí me decía en que era mejor separarse y darle su espacio.

Llevaba casi toda la madrugada pensando en todo lo que Jinnie tuvo que pasar solo y me hizo sentir una escoria de persona, y si realmente deseaba conservar al menos su bella amistad, sabía que mi decisión era la correcta.

Cuando regresamos a la sala de espera, noté que Jinyoung seguía dormido como un bebé en la camilla, así que dejé que descansara por un rato más hasta que sea la hora del almuerzo. De mientras, Jaebeom y yo nos dedicamos a acomodarnos en aquellos sofás algo incómodos para tratar de pegar el ojo aunque sea por unas horas. 

Sería un día bastante pesado. 

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Maratón 3/5