La historia de un caído

Capítulo 4.

Al día siguiente al llegar al edificio baje de mi auto y fui directo al elevador, chocando con alguien provocando que su café se derramara en mi chaqueta y en la suya.

-¡Oh dios! Cuanto lo siento.

Cuando subí la mirada no podía creer lo que mis ojos veían, era el, el misterioso chico del bar y el que había mirado ayer por la mañana.

-Descuida, no fue nada.-esa hermosa voz, no terminaba de entender que fuera justo el a quien había tirado el café.

Sentía que tardábamos años en subir, así que trate de romper el silencio.

-Ahm, soy Ty Wells, cuál es tu nombre?

-Rafael Evans, pero puedes llamarme Raffe.

De dónde había oído ese nombre....

Bajamos del elevador, encontrando a mi jefa fuera de esté.

-Buen día joven Evans, es un placer tenerlo en la empresa, he oído demasiado de usted y su hermano.

-Muchas gracias, trabajar en algo así es nuevo para mi pero es emocionante.- Hablaba de una manera tan seria que era extraño oírlo.

Ahora lo recuerdo, Evans, el extraño hermano del dueño del bar del cuál Ashley me había hablado, creía que era raro y reservado, supongo que Ash no sabía realmente de lo que hablaba.

-La señorita Wells le dará el recorrido por las instalaciones y su cubículo esta a lado de el de la señorita Wells.

-Gracias.

Comenzamos el recorrido y luego lo lleve a su lugar de trabajo.

-Así que este de aquí es el tuyo y el de acá es el mío, no dudes en preguntarme cualquier duda.

-Pues gracias señorita Wells.

-Llámame Ty por favor.

-Será un placer Ty....