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HELENA:

-Hoy toca fiesta- Decía eufórica Laura mientras nos probabámos ropa -Celebramos mi compromiso y tu cumple aunque ya haya pasado, ves, dos por uno- Reímos a la vez.
Íbamos a ir a un local famoso de aquí para mayores de 18 llamado 'Bronce Club'. Yo, bueno , no soy muy fan de las fiestas pero admito que de vez en cuándo esta bien.

Laura me agarró de la mano mientras nos adentrabamos en la selva de hormonas, es decir 'Bronce club'. Al pasar al grandullón que era el de las entradas y los sellos, bajamos unas escaleras, hasta llegar a la pista de baile. Laura y yo bailabamos sin parar, y David nos dijo que si queríamos algo de beber. Pasada la hora, me encontré algo mal, y decidí salir a tomar el aire por la puerta trasera.
-Laura, voy a salir un poco- le grité. Ella asintió, aunque creo que no escuchó nada.
Salí por la puerta y miré al cielo, no se veía el cielo, por la contaminación y porque había nubes negras. Saque un cigarro del bolso, cuando quise empezar a caminar alguien me cogió del brazo, haciendo que me diera la vuelta.
-Ey, chica de la plaza- Era el extranjero tan guapo, con el que había chocado.
-Vaya, parece que sabes caminar sin chocarte-
Él rodeó los ojos y yo lo miré de arriba a abajo, parecía el típico chico que lo tenía todo.
-Ya-Miro mi mano y como sujetaba el cigarro- ¿Fumas?- Me preguntó.
Guapo pero tonto, pensé.
-Noo, solo llevo el cigarro en la mano y el mechero en la otra porque me gusta que los extranjeros como , piensen que fumo- Nótese el sarcasmo. Comencé a caminar hacia una calle, alejándome del local, mientras él se reía. Al ver que me alejaba comenzó a seguirme.
-fumar no es bueno, chica de la plaza- Me dijo mirándome a los ojos, que asco, tenia una sonrisa encantadora.
-Para empezar no me llamo 'chica de la plaza'- Le dije con tono vacilon.
-¿Y como te llamas?- Ya estaba otra vez, esa jodida sonrisa.
-Helena-
-Encantado Helena- Me extendió la mano -Yo soy Jhon-.

Empezó a llover, y Jhon y yo corrimos para ponernos a salvo, él sacó su móvil y leyó un mensaje, seria fuerte a juzgar por la cara que puso.
-Helena, ha sido un placer, pero me tengo que ir, bye- Me dijo y se marchó. Segundos después Laura me llamaba al teléfono...
"Helena, escuchame ven al hospital de Madrid, David se ha peleado con un tío" Y así sin más, me colgó.

ALGÚN DÍADonde viven las historias. Descúbrelo ahora