Como adoro esta sensación.
Vos miras al cielo, te dejas llevar por el camino interminable en el que te guían las estrellas, le sonreís a la luna pulcra que nos vigila con una honorable constancia. Tus ojos sólo muestran calma, una tranquilidad casi envidiable para cualquiera que te viera. Maldición, estoy tan drogado.
La música hace acto de presencia a la lejanía, aunque a lo único que le puedo prestar atención en este momento es a tus ojos, tus hermosos ojos café, que suelen mirarme falsamente enamorados.
--¿Argentina?--¡Tu voz! ¡Te oyes tan gracioso! No puedo evitar reír ante tu tono algo danzante, tambaleante, ebrio.
--¿Si?
--Sabes que te amo ¿Verdad?--Apartas tu mirada del amplio cielo para mirarme a mi, clavando tus ojos algo perdidos en mi cara, sin sonreír, de hecho, con una mueca preocupada.--Porque a veces siento que crees que no te amo, pero si lo hago, en serio, te amo por sobre todas las cosas.
No reacciono. Me quedo con mi cara algo perdida, mirando tus ojos cristalinos, sin saber que contestar, aunque tus lágrimas me fuerzan a darte una respuesta. Esto ya no me da risa.
--¿Me amas?
--Si, como no he amado a nadie.
--No sos muy bueno demostrándolo--A pesar de mi tono jocoso, sé que estoy diciendo, porque o no sabes demostrarme que me amas, o directamente no me amas.
--Al menos lo intento, siempre intento darte todo el amor posible, pero nunca es suficiente al parecer.--¿Quejas? ¿Acaso podes quejarte?
--Cogiéndote a Can no estarías demostrando nada.
--Argentina, por Dios, no la toqué nunca, nunca toqué a nadie que no seas tú--No, no me mires tan fijo, hace que parezca verdad lo que me decís. Mirarte a los ojos es caer en un pozo profundo con agua sucia en el que me ahogo cada que entro, pero cada vez que salgo, sólo quiero volver a sentir el agua llenando mis pulmones hasta matarme.
--Pero lo que le dijiste a USA...
--Estaba bromeando, sólo era una broma.
"Lo haces muy obvio, confía mucho en ti ¿Huh?"
"No es mi culpa, él sabe como soy. Si quiere confiar, pues que lo haga, él se arriesga"
"Eres malo"
"Sólo sé aprovechar las oportunidades, y ese culo es una buena oportunidad"
Lo recuerdo tan firmemente, cada palabra burlona, cada tonito despectivo, no sonaba como una broma. No me daba risa. Sólo ustedes reían mientras que observaban a la cancha de voley de las chicas. De Can. Oportuno que fue el tener que limpiar las gradas por un castigo. O quizás oportuno no sería la mejor descripción.
--No sonaba como una broma.
--¿Qué debo hacer para que confíes en mi? ¿Dejar de hablar con Can? ¿No hablarle más de ti a USA? Sólo dime que quieres y yo lo hago pero por favor...--Te subiste sobre mí, apresandome contra el verdoso pasto de la casa de Cuba, es quien organizaba la fiesta, aunque no lo vi en toda la noche, sólo a su novio, Panamá, quien me dio un prensado--...Necesito que confíes en mí.
Tu cara está muy cerca, siento tu respiración golpeando la mía con un desespero casi aterrador, aunque se va calmando al pasar los minutos, se va haciendo lenta, tranquila. Sumisa.
Tus ojos sólo se concentran en mí, nuestras miradas colisionan, nos quedamos en un silencio temeroso, quedando desnudos ante el otro pero aún con la ropa puesta, nos miramos, realmente nos miramos, no sólo son los ojos lo que miramos, sino más allá, vemos cosas que quizás no queríamos mirar. Cosas que esperábamos ver, como tu miedo impregnado, tu terror a que yo no sea capaz de confiar en tu palabra. Cosas que no nos gustan, como mis lágrimas desbordando.
Pero lo finalizamos en un beso pequeño, un beso que no sabemos quien dio, aunque no importa ahora, sólo interesa que tus labios saben a tequila, y que tus manos dan caricias muy sutiles en mi cintura. Te amo tanto.
--Te amo muchisimo, México.
--Pero aún así no confías.
--Sólo...--Sólo dame una razón para hacerlo--...ámame en serio.
--Eso es lo que vengo haciendo el último tiempo y al parecer no es suficiente--Me das un pequeño pico al terminar la oración, levantándote de encima mío, parándote.--Esto no puede seguir así Argentina.
--Ya sé. Sólo necesito que vos...
--No, esto no se trata de mí, se trata de ti--Suspiras, confundiéndome ¿Vas a reclamar algo?--Esto no puede continuar de esta manera.
¿Acaso...? No, no te podes estar yendo ¿Me estás...?
--¿Me estás cortando?
--Lo siento, pero en serio esto no puede seguir así, cuando empieces a confiar en mí, llámame ¿Si?
No, no. ¿Dónde vas? No te vayas, no te vayas.
--No, no te podes ir--Pero no me escuchas, te vas, vas pasando en medio de la gente, secándote las lágrimas, ignorándome--¡México!--No podes hacerme esto, después de todo, te vas, simplemente te vas, cuando ya no te diviso entre la gente es que finalmente estallo en lágrimas, porque no me podes hacer esto, no te podes ir así--No me dejes solo.

ESTÁS LEYENDO
Vacío // MexArg
NouvellesPorque cada palabra. Cada "Te amo" Cada momento. Están completamente vacíos.