Capítulo 10

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No sé bien qué me pasó. Tenía la necesidad de huir. Era un cobarde. Un cobarde que cruzaba calles sin prestar mucha atención a la sincronización de los semáforos, sin saber muy bien hacia dónde se dirigía. Giré a la derecha, después seguí recto hasta el próximo cruce y gire a la izquierda, luego a la derecha de nuevo. Acabé en Jardín botánico Daniel Stowe. Hacía años que no pasaba por allí. Era precioso. Realmente precioso. Me transmitió una tranquilidad indescriptible.

Mi móvil empezó a vibrar a las 12:15. La hora del almuerzo. Vale, genial. Me había quedado dormido tirado en la hierba, tanta tranquilidad me hizo acabar tumbado en aquel jardín rodeado de violetas, nenúfares y cuarenta tipos más de flores y árboles. Cogí la llamada.

-Ed, capullo. ¿Qué haces?¿Dónde estás?

+Escuchadme. Tenéis que preguntarle a Kate donde vive Jane.

-¿Qué?¿Te has vuelto loco? Sabes que esa zorra no responderá al menos que le lamas el culo.

+Hacedlo, por favor.

-Algo haremos. Me debes una.

Oí como de fondo Tom decía "nos la debes". Ni siquiera sabía bien por qué les había pedido aquello. ¿Qué iba a hacer?¿Ir a su casa? Ni siquiera tenía dinero para el autobús. Esa idea había sido estúpida. Llamaría a James y le diría que lo dejase. Estaba buscando su número en la lista de contactos cuando de pronto mi móvil empezó a sonar. Era Tom.

-Tío, pon el altavoz. -oí como decía James.

-Espera, tío, no sé que tecla es. -respondió Tom.

-Eres inútil, colega. Anda, trae.

+Eh, sigo aquí. James, déjalo, ¿vale? Ha sido mala idea.

-Avenida Albemarle, n°45, 6° B

+¿Cómo lo has...?

-De nada. Suerte capullo. -y colgaron.

Ahora sólo me faltaba valor para hacerlo. Avenida Albemarle no estaba muy lejos de mi casa. Así que, ¿éramos vecinos? Caí en la cuenta de que el sábado tenía una cena con los nuevos vecinos. Decidí dejar de pensar en ello, eran demasiadas coincidencias. ¿O no?

JaneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora