Capítulo 16

74 4 3
                                    

Jane y yo nos pasamos unos 10 minutos en los vestuarios besándonos.

-Dijiste que seríamos amigos.

+Y lo somos.

-¿De verdad? -y sonrió, caminando por delante de mí.- Nos vemos mañana, no me eches de menos.

*******

-Entonces, ¿os enrrollastéis?

+Sí, pero somos amigos. -no sabía bien lo que decía.

-Tío, os escaqueastéis de la fiesta, que por cierto, fue la bomba -dijo con el dedo índice en pie remarcando la palabra bomba y deteniendo un poco su paso que iba un poco acelerado- la llevas a una bonita playa, la besas, te dice que la lleves a casa, eres un gilipollas, te pega una nota en la taquilla y vas al vestuario y te la enrrollas, ¿y sois amigos?

+¿Sí?

-Pues ojalá pudiese enrrollarme con todas mis amigas, colega.

+No es nada serio, somos adolescentes que se lo pasan bien cuando quieren y ya está, tío.

*****

Sonó el timbre.

-Ed, ya abro yo. -gritó papá desde la planta baja.

Oí la conversación que mi padre estaba teniendo con quien parecía ser una chica.

-Vaya jovencita, ¿está lloviendo mucho ahí fuera? Pasa, pasa.

+Gracias.

-¡Ed, baja aquí ahora, una jovencita pregunta por ti!

+No, no le llame, verá sólo quiero que le de esto a Ed -dijo entregándole lo que parecía ser una carta.

Bajé las escaleras y antes de que pudiera ver quién era, la joven había dado un portazo.

+Papá, ¿quién era?¿por qué se ha ido? -abrí la puerta para salir a ver de quién se trataba.

-Ed, está lloviendo a cántaros.

Di un portazo y salí corriendo de allí, vi a una chica entre la lluvia, lo que parecía ser Jane.

+¡JANE! -grité.

Corrí hasta alcanzarla.

+Eh, Jane. Para.

-Deja de correr detrás mía, Ed. Déjame en paz. -me empujó para que le dejase seguir corriendo.

+¿Se puede saber qué demonios te pasa?

-Kate os oyó. -no sabía bien que quería decirme con eso- a Tom y a ti, diciendo que yo era una simple diversión.

+Jan...

-Ed, lo siento, siento lo que pasó ayer, no sé qué me pasó, yo quiero a Jhon, tú y yo somos amigos.

+¿Jhon?

-Sí, tengo novio Ed, hoy viene de Florida a pasar la semana conmigo. De verdad, Ed, lo siento. Tengo que irme. Esto ha sido un error.

Me quedé allí viendo como Jane se iba, la miré con cara de decepción, no debí haber confiado en aquella chica. Maldita Jane. La odiaba, odiaba que me hubiera tratado como si de verdad le gustara, y la odiaba por quererla. La lluvia caía, me empapaba hasta calarme la ropa, y yo seguía ahí, quieto, sin saber bien qué hacer.

JaneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora