⭐ 𝙎𝙤𝙡𝙤 𝘾𝙞𝙣𝙘𝙤 𝘿𝙚𝙨𝙚𝙤𝙨 ⭐

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Gheo junto con Rubius pasaron de casa en casa, viendo el interior para ver si había otro sobreviviente, Rubius en el tiempo que Gheo hablaba con los demás pudo encontrar a tres niños y a dos adultos, se los llevó al cartel del pueblo. Y ya con Gheo ayudándole pudieron encontrar a otro niño. Gheo pasó por una casa, y al abrirla encontró una escena que la hizo cerrar la puerta de un solo, no solo por lo visual, sino por el hedor que ejercía dentro del hogar.

-Santa mierda.-fue lo que dijo, mientras trataba de contener las lágrimas, tenía parte de su cara tapada con sus manos, trataba de no vomitar, suspiró.

-¿Estas bien?-le preguntó Rubius a la joven mientras se iba acercando, ella solo asintió.

-Nos quedan otras casas del otro lado ¿Tienes a alguien?- cuestionó Gheo mientras recobraba postura y alzaba la vista.

-No... ¿Qué monstruo hizo esto?- cuestionó Rubius mientras pasaba una mano por su pelo, jalándolo hacia atrás.

-No sé, solamente espero que pague muy caro por esto... Iré a ver las casas de allá, empieza por el otro lado.- dijo Gheo, mientras se encaminaba a las casas del tope que daban al pueblo.

Rubius miró preocupado a la joven, y la vio retirarse, se fue caminando al otro lado cuando vio que Vegetta y Luzu se acercaban corriendo, eso hizo que el oso se calmara un poco más, cuando se aproximaron a ver lo que había en a calle, palidecieron. Rubius se les acercó.

-¿QUÉ MIERDA PASÓ?-cuestionó Luzu mientras caminaba algo apresurado a la entrada del pueblo.

-Nosotros también queremos saber, vamos, Gheo anda sola, puede que necesite ayuda.-dijo el oso haciendo señas para que ambas personas le siguieran.

-Pero... pero ¿Cómo ocurrió esto?-cuestionó Vegetta serio, el mood le había cambiado drásticamente.

-No sabemos ¿bien? Gheo me dijo que quedaron en el pueblo con Luzu, y luego de llegar solo le vi la cara blanca a la pobre y sus ojos horrorizados, y al ver lo que ocurrió... Le dije que le avisara a Vegetta y a los demás, luego vino a ayudarme a buscar sobrevivientes.- dijo Rubius un poco exaltado.

-¡RUBÉN, AQUÍ!-se escuchó la voz de la fémina, estaba un poco lejos, pero con el grito pudo captar la atención de los presentes.

Los tres fueron corriendo hacia la posición de ella, tal vez no estarán prepararos para lo que verían.

Gheo en cambio, en una de las casas que revisó encontró a dos personas heridas, una de ellas era una niña, tenía raspones leves y una que otra cortadura en sus manos, pero la otra estaba mal era adulta, tal vez su mamá, tenía una perforación en el abdomen, no tan profunda por lo que pudo observar, estaba haciéndole presión en la herida para detener la hemorragia.

-¿E-estará bien?- cuestionó la menor de las tres, la niña que estaba viendo la escena, Gheo lamentaba eso.

-Haré lo que pueda ¿Sí linda? Prometo salvarle.- le dijo a la niña mientras la miraba con una cara algo preocupada, en ello, los tres hombres aparecieron, viendo como Gheo tenía las manos ensangrentadas por tratar de salvar una vida.

-Dios santísimo...-dijo Luzu, mientras miraba la escena.

-Que alguien saque a la nena, por favor, Rubius, mi mochila, las vendas.-ahora ella ordenaba, por ser la única doctora del lugar tenía aquella obligación de salvarla. Vegetta tomó a la niña mientras esta sollozaba levemente.

-Llévala al cartel, ahí están los demás. Quédense ahí a tranquilizar a la gente mientras los demás llegan.- dijo Rubius mientras buscaba las vendas de la mochila de Gheo.

Vegetta hizo caso, y junto con Luzu fueron al cartel. Gheo trataba de salvar una vida y Rubius ahora era su asistente, no se daría por vencida.

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Ya pasó rato de aquello, quizás unos veinte minutos, los demás fueron llegando al cartel de Karmaland algo aturdidos por lo ocurrido, Luzu les fue explicando lo sucedido, en aquellos veinte minutos ni Gheo y ni Rubius habían subido al lugar, Vegetta se empezaba a preocupar por ellos.

-¿Pero como me vais a venir con que no les parece sospechoso?- la voz de Willy llamó la atención de Vegetta, haciendo que se volteara y viese a su dirección.-Si esos dos cabrones llegaron antes, algo debieron de hacer, más con Gheo que desde un principio me dio mala espina.-

-No sabes de lo que hablas.- dijo Luzu serio, mientras se acercaba a Willy algo amenazante.-Esa chica vio más que todos nosotros, y está ahí abajo salvando a una persona.- dijo Luzu, defendía a toda costa a Gheo de cualquiera que se pasase de listo.

-A mi me vale mil pingos que sea doctora, estoy diciendo que ella por tener esa imagen angelical pudo haber hecho esto, tal vez y solo los llamó al pueblo para que la ayudaran a limpiar su desastre ¡Es que está enferm-.-fue parado por una cachetada por parte de Luzu.

Willy al sentir aquello solamente se le abalanzó a Luzu, soltándole puñetazos, Luzu no se quedaba atrás, ambos iniciaron una pelea.

-¡PERO PARAD, JODER!-dijo algo preocupado Fargan, y entre él y Auron empezaron a separar a Willy de Luzu, se les complicó la cosa cuando Willy se giró le soltó tremendo puñetazo a Fargan.

-PERO BUENO ¿NO SOIS ADULTOS PUES? DEJENSE DE NIÑADAS.- dijo Auron mientras se ponía en medio de Fargan y Willy, Vegetta al reaccionar tenía detrás suyo a Luzu.

-¿Acaso sois tontitos o qué?- la voz de Rubius se hizo presente entre los reunidos, Luzu y Vegetta voltearon sus cabezas, y al ver que Rubius tenía cargada a la mujer de antes, pudieron tranquilizarse. Rubius dejó a la mujer recostada en el suelo, la niña de antes se le acercó, y ya más tranquila pudo ver a su mamá bien.

Detrás de Rubius llegó Gheo, con una cara neutra, sus manos estaban manchadas de sangre, no lo superaba todavía, soltó un suspiro. Luzu fue directo hacia ella para ver que tal se encontraba.

-Cumplió su promesa, gracias pequeña dama.-la voz de la niña inundó los oídos de los chicos, y vieron como esta se acercaba a Gheo y le abrazaba, ella solo soltó un suspiro sonriendo de lado y vio como la niña se iba junto con su mamá.

-¿Ves? Después de todo no es tan "enferma"-dijo Vegetta mientras miraba con una mala cara a Willy, este en cambio, solo gruñó.

-¿Estás bien?-Luzu le preguntó a Gheo algo preocupado, ella solamente asintió la cabeza mientras tenía la mirada fija a la nada, realmente no lo superaba.-Podremos posponer la misión si no te sientes bien, sabes que esto no es fácil para nadie.-

-Sería lo mejor... algunos están lastimados, tengo que estar al pendiente ahora.-dijo Gheo mientras se miraba una de sus manos.

Luzu iba nuevamente a hablarte a Gheo, sin embargo Merlon se acercó a los chicos y tomó el brazo de la chica, algo extrañada se giró hacia Merlon, Luzu tampoco entendía la situación.

-Deja salir el don que tienes, por algo pedí específicamente por ti, es hora de que muestres de lo que eres capaz, Gheo.- dijo Merlon mientras le daba una sonrisa a la contraria.

Gheo solamente asintió, la destilería era la solución, miró a la señora con su hija se motivó un poco más. Luzu seguía sin comprender, hasta que procesó la información, y solamente formó una O con su boca.

-Lastimosamente tengo que... Auron.- llamó al hombre del piercing en la ceja, este volteó a su dirección.-¿Tienes una bata extra?-

Auron esbozó una pequeña sonrisa, sabía de que se trataba.-Cariño, siempre la tengo.-