⭐ 𝙎𝙤𝙡𝙤 𝘾𝙞𝙣𝙘𝙤 𝘿𝙚𝙨𝙚𝙤𝙨 ⭐

007;

Pasaron los días, nadie había tenido contacto con Lolito desde el incidente. En total pasaron cinco días y Lolito, por más que fueron a buscarlo a su casa no lo encontraron. Los héroes excepto Willy, Mangel y Alexby se quedaron a limpiar el pueblo, Rubius y Vegetta se encargaron de sacar los cuerpos, y meterlos en bolsas de lona individuales, Luzu, Gheo y Fargan se encargaron de limpiar las casas con agua y jabón, quitar las manchas de sangre y eso, y con ayuda de dos hombres del pueblo y Auron empezaron a cavar tumbas un poco alejado del pueblo, pero casi estando a la par de este. Enterraron a sus caídos, hicieron lápidas de piedra y decoraron cada tumba con flores, todos estuvieron reunidos para la ceremonia.

Al final de los cinco días, sábado para ser específicos, Gheo se encontraba en su casa ordenando unos cofres, andaba un poco más tranquila luego del desastre que hubo, los cinco días se la pasó tarde y noche vigilando el pueblo, los pueblerinos se sintieron más tranquilos con la presencia de ella en aquellos días. Hoy era el sexto, y justo después de ordenar los cofres iría nuevamente hacia el pueblo. Estaba guardando comida en su mochila cuando le llegó un mensaje a la pulsera, abrió este mismo, viendo que era un mensaje del grupo que tenía con Rubius y Luzu, aunque el mensaje era de Luzu.

"Hey, darling... Pensábamos con Rabis que hoy podrías tomarte el fin de semana libre, sabemos que has estado yendo hacia el pueblo y te has quedado hasta tarde cuidándolo. Ahora mismo estoy yo en el y Rubius estará mañana, así que no te preocupes, has de estar muy cansada.¨

Gheo solo sonrió con el mensaje, luego, le llegó uno al privado que tenía con Luzu.

¨Niña, adivina que, Vegetta me ha preguntado por ti porque no le contestas los mensajes ¿Estás segura de estar bien? El me avisó que iría a tu casa a ver que tal estabas, ordena un poco y cámbiate, please.¨

¿Mensajes de Vegetta? Que raro... a ella no le llegaron los mensajes, se puso a revisar el chat que tenía con el de ojos amatistas, su último mensaje era de ella con un ¨<3¨ ni saber el por qué... Soltó un suspiro y pasó una mano por su cabello, ya lo tenía largo. Empezó a teclear la pantalla digital.

¨Que raro, no me ha llegado ningún mensaje de Vege luego de la vez que me ayudó con la cocina, y claro, desde luego que iré son dos sudaderas encima y tres pans puestos, jaja.¨

Sonrió levemente para apagar el dispositivo, y subir las escaleras hacia el tercer piso, fue a su armario y sacó una blusa de manga larga negra alto tallada y unos pans amarillos flojos, se colocó su ropa y ordenó un poco su cuarto, para bajar a la cocina y sala de estar y recoger una que otra basurilla de por ahí, la fue a tirar a su canasta de basura, soltó un suspiro, Vegetta iba a estar en su casa, pasarían la tarde juntos, juntos.

-No Gheo, no te ilusiones, mensa.-se dijo así misma para darse en la frente un pequeño golpe con la palma de su mano. Luego de aquello se decidió hacer una coleta baja dejando unos mechones de pelo sueltos, andaba con calcetas, lo normal.

_____________________________________________________________________________________________________________

Al rato escuchó los tres toques en la puerta, su corazón empezó a ir un poco rápido, bajó las escaleras y fue a la puerta para abrirla, así encontrándose con el azabache.

-Vege, hola.-dijo la fémina con un tono un poco alegre mientras se hacia a un lado para que este pasase.

-Que tal, Gheo.- dijo Vegetta con su tono tranquilo y normal, algo a lo que todos se acostumbran.

Gheo cerró la puerta y saludó de besito en la mejilla a Vegetta, este hizo lo mismo. Vegetta iba casi igual que la fémina, solo que sus pantalones eran negros y algo tallados no mucho, y llevaba puesta una sudadera morada, típico, de calzado eran unas zapatillas deportivas igualmente con un tono de morado oscuro y pálido, cargaba también su mochila, no le extrañaba. Ambos pasaron para el segundo piso yendo a la sala de estar.