Detective~Lucifer Morningstar.

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Parte 1/(?)

Título:Dos desapariciones, un cuerpo.

ERA EL 9 DE DICIEMBRE DEL 2010. Los detectives Lucifer Morningstar y Chloe Decker estaban en una escena del crimen. Ellos recibieron una llamada por secuestro. Dicha llamada fue realizada por un señor alto, ojizarco, castaño, que se identificó como Manuel Harten. El hombre demostró una notable impaciencia, era obvio que quería irse lo más pronto posible.

– “¡Ya les dije!–Espetó con cierto cansancio—Fui a trabajar y cuando volví, ¡mi amada esposa y mi pequeña hija ya no estaban!, ¿Podrían, por favor, ayudarme a averiguar donde están?”–Dijo con pesadez.

Los detectives se miraron y se pararon de sus respectivos asientos. Ambos pensaban que su coartada era una mentira debido a que demostró nerviosismo en la mitad de su declaración. Pero de igual manera decidieron tener un voto de confianza con él. Los tres se dirigieron  a la casa del señor Harten y los detectives comenzaron a buscar alguna muestra de que hubo algún intento de resistencia o algún objeto roto junto a Ella Lopez y sus colegas. No encontraron nada. La casa parecía estar en perfectas condiciones. Además, cuando abrieron las puertas de los armarios y cuando se fijaron en los álbumes familiares, se dieron cuenta de que estos que estaban completamente vacíos.

–“¿Desde cuándo un secuestrador se lleva las fotos y la ropa de sus víctimas? Esto es nuevo. ¿Verdad, detective~?”–Preguntó Lucifer con un tono juguetón, como es su costumbre.

–“Lucifer tiene razón, señor Harten. Nunca antes había visto que en un secuestro se lleven las cosas personales de sus víctimas. Si se han llevado plata o objetos de valor… Pero, ¿fotos o su ropa? Nunca.”–Respondió la mujer mientras centraba su campo de visión en el señor Harten, quien se encontraba atrás de ellos escuchando todo lo que decían atentamente sin decir ninguna palabra.

–“¿Que opinas?”–Le preguntó Lucifer a Chloe, intentando ponerse serio.

–“Si te soy sincera, creo que es todo es mentira. Pero no tenemos forma de demostrar lo contrario…”–Le respondió, decepcionada.

*Rewind(6 días antes):*

Una mujer, llamada Karen Harten, llegaba a su casa después de un arduo día laboral. Ese día su relevo llegó una hora antes y ella pudo salir antes del tiempo acordado. Cuando abrió la puerta de su casa, observó horrororizada la escena más atroz que pudo haber visto. Su pequeña hija se encontraba en el piso, arriba de un charco de sangre, con su esposo Manuel clavándole un cuchillo.

Sintió como se le estrujó el corazón y como se le humedecían las mejillas debido a sus lágrimas cuando notó que en los ojos de su hija ya no se encontraba el hermoso brillo de vida que los caracterizaba. Se negaba a creer que aquel hombre fue tan desalmado como para matar a su propia hija.

Cerró la puerta con cuidado de no hacer ruido. Por suerte, el hombre no se dio cuenta de su presencia. Se escondió detrás de la casa por dos horas, esperando a que él se vaya. Los recuerdos de lo que sucedió se repetían una y otra vez en su mente, la estaban carcomiendo. Sus ojos ya se encontraban hinchados de tanto llorar. Tenía la respiración entrecortada. Sabía perfectamente que su hija era su motivo de vivir...Ahora no tenía nada. Su alegría yacía muerta junto con Alicia.

Karen fue testigo de donde enterró a la pequeña... fue debajo de su árbol favorito. Su hija podía estar horas allí, le encantaba la vista y la paz que le transmitía ese lugar…De cierta forma, le agradeció que haya elegido ese lugar para enterrarla. Cuando él limpió la casa y enterró el cuerpo, se subió a su auto y se fue. 

Ella entró y sacó toda su ropa de su armario. Hizo lo mismo con las fotos familiares que tenían y salió de su antiguo hogar. Se tenía que ir, no tenía bien en claro a donde... pero eso era lo que menos le importaba. No soportaba la idea de estar en el mismo lugar donde acababan de asesinar a su hija.

2 días después, ella espera a que él se vaya de su casa para desenterrar a su hija. Si, un plan loco y arriesgado. Pero necesitaba saber el porqué la mató… se volvió loca pensando eso. Cuando la logra ver bien, se da cuenta de que en la mano de la niña había un papel… parece que él no se dio cuenta y por eso la dejó así.

Desdobló el papel y leyó: “la mató. ¡El mató a Abigail V!”

Todo estuvo claro. Manuel había asesinado a una amiga de su hija y la pequeña lo descubrió. Lo escribió en un papel para dejárselo a ella por si él la mataba antes de que el pudiera contárselo. Es ,sin duda alguna, un verdadero monstruo. Es obvio que la mató por ser una testigo de su crimen… pobrecita, ella no había hecho nada malo.

Lloró media hora más al lado del cuerpo de la menor antes de volverla a enterrar e irse. Horas después, se enteró que su ahora ex-esposo había hecho una denuncia de secuestro por ella y la menor. Fue en ese entonces que se armó de valor y decidió llamarlo desde un teléfono público.

—“¿Hola?”—Contesta el hombre.

—“No importa que te hayan creído. Ya no podrás enmendar tus errores, Harten… Ambos sabemos la verdad. Adiós, cariño.”—Dijo antes de cortar la llamada, sin darle tiempo de contestar.

Ella sabía perfectamente que él había reconocido su voz y que probablemente estaría intentando guardar las cosas para huir de su casa. Pero él no contaba con que antes de llamarlo, había llamado a la policía y esta se encontraba a unas cuadras de su antigua casa para arrestarlo por sus fechorías.

[°°°]

—¡Tenias razón, detective!—Dice Lucifer, sonriendo como un niño.—Ahora, cambiando de tema... ¿Puedo llevarte a una cita?—Dice descaradamente.

—¡Lucifer, por dios!—Dice Chloe, avergonzada. Él lo había dicho enfrente de todos sus colegas. Si bien no era sorpresa de nadie que Lucifer estaba interesado en ella, Chloe realmente agradecería si fuera más discreto.

—¿Dije algo malo? Incluso podemos dejar a Mazie para que cuide a, como ella dice, tu cría humana.

—No me gusta que le digan así a mi hija, se llama Beatrice o pueden decirle Trixie.—Dice suspirando, cansada.

—¿Eso es lo que creo que es?—Dice Lucifer, sonriendo aun mas.

—¿Mmm?—Murmura Chloe mirándolo para que continúe.

—¡No haz dicho que no!—Dice el antiguo señor del infierno.

—Tampoco que sí.—Dice subiéndose a su vehículo.

—¡¿Oiste eso, señorita lopez?! ¡Tendremos una cita!—Grita Lucifer mirando a la tierna mujer azabache, la cual lo mira con una sonrisa mientras alza los pulgares, mostrando su felicidad por él.

—¡Eso no es...! —Comienza Chloe.—Agh... Olvidenlo. —Dice frustrada —¡Lucifer!, ¿vas a venir o que?—Le grita.

—¿Ves, señorita Lopez? Te dije que me adora.—Dice Lucifer, adelantándose para sentarse con la detective.

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Palabras utilizadas: 1163.

Espero que les haya gustado.

~Micaela.

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