moon; daniel ribba

5

parte I, "primeros días."
capítulo 5.
amanecer.

caminaba junto a dani por la banqueta en silencio, el ambiente estaba tranquilo pero no sabía cómo comenzar una conversación, normalmente cada que estábamos juntos era con mauro o valentin, dejando de lado la vez del parque, pero nada más esa vez, pero ahora que estábamos solos no sabía de qué tema hablar, casi siempre se quedaba en silencio o se reía de las cosas que decían.

-en serio, te juro que no me tienes que acompañar, no te quería cagar la noche así.- le dije por tercera vez y por tercera vez negó.

-estás loca, yo te acompaño, no está bien que andes a estas horas en la calle y sola.- me miró haciendome sentir chiquita, asentí y miré a la luna, era luna llena y le daba un lindo toque el tener algunas nubes a lado de ella, voltee a ver a daniel y ví que la estaba mirando igual, las luces de la ciudad y la poca que daba la luna le daban un toque hermoso a su perfil, resaltaba su nariz y sus pestañas caídas, sus labios estaban cerrados pero aún así le daban un toque precioso, sin dejar de lado su característica seriedad que solo da ganas de conocerlo más a fondo.

agarré el celular de mi bolso y miré la hora.

3:27am

no era tarde pero tampoco era temprano, le dije a mamá que me quedaría con yani, y yani me dijo que se regresaría un poco tarde a su casa, así que supongo tengo que quedarme en el patio o algo parecido.

-eu, ¿escuchaste?.- me habló daniel y lo miré asustada negando.- que raro.- murmuró y sonrió de lado.- te preguntaba que si querías pasar a un kiosko por algo calientito para tomar.

-ah, si claro, me serviría mucho.- le sonreí y caminamos unos pasos más hasta llegar a uno y agarrar café y unas galletas, esta vez lo convencí de que cada uno pagará su parte ya que realmente me daba pena, encima que el había pagado la vez pasada.
salimos y comenzamos a caminar hasta que llegamos a un parque y nos sentamos a comer, realmente me ayudaba demasiado a bajarme de a poco el avión que traía y a disfrutar el silencio.

voltee a ver a daniel, estaba tomando de su café mientras miraba a la luna fascinado.

-¿te gusta?.- me atreví a preguntar y me volteó a ver con la cabeza de lado.- la luna, ¿te gusta verla?

-claro.- afirmó y sonrió.- es algo hermoso, más allá de todas las formas en las que la ponen, es hermosa sin necesidad de darle mil explicaciones ni significados, simplemente está y brilla, no hay que darle tantas vueltas para que sea digna de admirar.- me miraba directamente a los ojos y me comencé a sentir nerviosa, nunca me había gustado que me miraran porque no sabía qué hacer o que decir, pero el saber que dani tenía sus ojos oscuros puestos sobre los míos, le daba un toque diferente a mis nervios y me asustaba.

-es preciosa, tienes mucha razón.- le sonreí y bajé la mirada a mi celular cuando comenzó a sonar con mensajes y lo prendí.

yani❤️

eh, outa
donde estas
porqeu yo estoyncon damian
escribí un pocl cmo el culo
capsz en dos horas m regreso
yo t aviso
tnamo

suspiré y cerré los ojos recargandome en el respaldo del banco y daniel me volteó a ver.

-¿todo bien?.- me miró preocupado y le sonreí.

-si, solo que yani está con damian y dice que se regresa hasta más tarde y para mi mamá estoy con ella, supongo que me tendré que regresar a la casa de alejo.- me talle los ojos por el sueño que tenía mientras soltaba un bostezo.