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Capitulo 9

Nora Grey, es una lástima que tengas que morir.

Jueves en la tarde, llovía, eran casi las 8:00 de la noche y yo me encontraba con Rixon en Enzo’s Bitro, recline hacia atrás la silla en la que me encontraba sentado haciendo que esta se sostuviera en las dos patas traseras, estire mis brazos y los coloque detrás de mi cuello. En cualquier momento entraría por esas puertas.

–– ¿Cuándo vas a decirme lo que estás haciendo?–– Me cuestiono Rixon.

Paso una mesera dejando dos tazas y sirviéndonos un poco de café. Tome mi taza y le di un trago.

–– ¿Haciendo?

––No creas que no me eh dado cuenta de que hemos estado viniendo a este mismo lugar todos los jueves alrededor de las ocho durante cinco semanas.

––Cuatro semanas–– Aclaré

Rixon rodo los ojos.

––Tienen buen café–– dije mientras le daba un sorbo a mi taza de café.

––Bien, el problema es que no puedes probarlo–– me aclaro Rixon–– puedes probar con la mentira número 2.

Pensé en que decirle, aun no podía contarle acerca de mi plan para acercarme a Nora y sacrificarla.

––Me gusta el ambiente–– conteste de una forma casual.

Afuera la lluvia era constante, vi por la ventana del lugar y distinguí dos figuras que trataban inútilmente de taparse de la lluvia con sus brazos, entraron a Enzo’s y la mesera les asigno una mesa cerca de donde yo me encontraba, una de las chicas que acababa de entrar era rubia, mientras que la otra chica tenia cabello de un color rojizo, Nora. Baje la mirada esperando que mi gorra cubriera gran parte de mi rostro, me sentía como un niño tratando de esconderse de su madre para ser reprendido. Rixon seguía hablando, no le estaba prestando atención, estaba más concentrado en ver a la pelirroja que acaba de entrar al lugar. Desde la vez que investigue acerca de ella en la biblioteca decidí comenzar a seguirla para familiarizarme con ella y con las actividades que solía hacer. Esta era la cuarta semana desde que comencé a seguirla y en esta semana en especial no podía quitar la mirada de ella. Se veía tan metida en la conversación que mantenía con su amiga que no se daba cuenta de mi mirada.

––Me rindo ––dijo Rixon acercando su silla –– ¿Qué estamos haciendo aquí aparte de morir apuñalados por el aburrimiento?  

《Paciencia》 Hable en la mente de Rixon.

《En este momento podríamos estar atrrrorizando a un grupo de nefilims 》 Replico Rixon en mi mente.

Estaba a punto de responderle cuando una voz llamo mi atención.

–– ¿Por qué no pueden los chicos de la escuela verse como… aquellos dos chicos?

Gire mi mirada a la mesa de donde provenía esa voz y me encontré con la mirada de la rubia y de la pelirroja que entraron hace unos minutos a Enzo. Rixon se dio cuenta de esto y no dudo en acercarse a la rubia que no podía quitar su mirada de encima de Rixon, trataría de persuadir a la rubia para que cambiara su opinión acerca de Rixon pero este se daría cuenta.

––Así que dime, cariño ¿Cuál es tu nombre? –– Le pregunto Rixon a la rubia dándole una sonrisa “seductora” que hizo que a la rubia le temblaran las piernas.

––Mi nombre es Vee, y esta es mi mejor amiga, Nora.  ––Dijo señalando a la pelirroja.

––Mi nombre es Rixon, un gusto, y el chico de la gorra que está ahí sentado es mi amigo, Jev––
《 Acércate 》 dijo Rixon fácilmente en mi mente. Dude, por un segundo me cuestione si debía acercarme o no, los ojos de los tres estaban posados sobre mí y Rixon no paraba de decirme que me acercara que no fuera “tímido”. Yo no soy tímido. No puedo creerlo, Rixon está arruinando todo.