Una espera infinita

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Los niños pasaron horas en esas jaulas, mientras eran vigilados por las pesadillas.

-¡Tengo hambre!. - Dijo Pippa. - También me duele mucho la cabeza.

-¿Jamie? Despierta. - Sophie lo movía pero él no despertaba. -

-¿Jamie no despertó?. - Monty se balanceaba sobre la jaula. -

-Hermano, despierta. - Sophie lo agarró del brazo. -

-¿Estará dormido?. - La Peque se acercó a ver más de cerca ya que la jaula de Jamie y su hermanita estaba hacia su izquierda. -

-No se mueve desde hace dos horas. - Lo observó Claude. -

-Mírenlo, está más pálido. - Caleb lo señaló. -

-¿Y nuestros papás qué estarán haciendo?. - Pippa se preocupó. -

Los niños se callaron porque sentían pasos de Pitch.

-¿De qué tanto hablan?. - Pitch los miró a todos cuando llegó. -

- Monty golpeó su jaula con sus puños. - ¿Qué le hiciste a nuestro amigo?, ¿por qué no despierta?.

-Sólo está dormido, ¿no es obvio?.

-¡MENTIRA!. - Gritó Pippa. -

-Tengo hambre. - Dijo Caleb ignorando a Pitch. -

-Ay, ¿tienes hambre?. - Pitch se burló. -

-¡Quiero a mamá!. - Sophie quería llorar. -

-No los soporto. - Pitch se dio media vuelta. - Encárgense de ellos. - Les ordenó a sus pesadillas. -

Las pesadillas obedecieron y les dieron unos vasos con leche a los niños.

-¿Cómo sé que no es veneno?. - Monty frunció el ceño. -

Mientras tanto, del hambre, La Peque y Caleb se tomaron el vaso sin pensar.

-¿En serio?. - Monty los miró. -

-Tengo hambre y no puedo resistirme. - Pippa tomó el vaso sin miedo. -

Una pesadilla se acercó a Sophie para darle un vaso y la niña comenzó a asustarse y a gritar tirando el vaso rompiéndolo.
Jamie despertó y lo primero que vio fue a su hermana llorar y espantó a la pesadilla haciendo que ésta se aleje.

Jamie reaccionó y apartó a Sophie de la pesadilla.

-¡SÁCATE DE AQUÍ!. - Dijo el niño haciendo enojar a la pesadilla. -

La pesadilla cambió su expresión y sacó sus garras y se acercó a Jamie para atraparlo.

-¡NO!. - La Peque tiró el vaso contra ésta para golpearlo y así salvar a su amigo. -

-¡Eso lo hará enojar más!. - Monty dijo mientras se agarraba de la reja de plomo de la jaula. -

Jamie se asustó un poco pero todo este alboroto hizo enojar a Pitch ya que los escuchaba aunque no estuviera cerca.

- Apareció montado sobre su caballo negro. - ¿Qué creen que hacen?.
- Se estaba enojando más. -

-¿Dónde están nuestros padres?. - Claude estaba inquieto y la jaula se tambaleaba. -

-¿Acaso a ellos les importa dónde están ustedes?. - Engañó éste a los niños. -

-Pero... - Sophie suspiró. -

-Eso no es cierto. ¡Estás mintiendo!. - Caleb pateó la jaula. -

-Crean lo que quieran, después de todo yo les digo la verdad.

-¿QUÉ HICISTE CON NUESTROS PADRES?. - Jamie gritó con todas sus fuerzas y rebotó un eco por todo el lugar. -

Pitch se rió y se fue sin decir nada.

Los niños se pusieron peor, pues, temían más que nada que el Coco les haya hecho daño a sus padres.

-Regresen. - Susurró Jamie. -

El Origen de los Guardianes: Legends Never DieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora