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capitulo 21- confesiones y agua

El frío cristal del vaso que tengo entre manos choca contra mis dientes y miro a la nada mientras dejo que el agua se abra paso por mi garganta, hace frío pero igualmente estoy bebiendo agua casi helada, siempre tengo que beberla en ese estado, detesto el agua natural.

Una mujer aparentemente despeinada, con un vestido que parece bastante caro y con sus tacones en mano baja las escaleras sigilosamente y al notar mi presencia me mira horrorizada y hace un gesto de silencio, yo asiento confusa y observo como sale de casa con sumo cuidado.

Aún confusa me envuelvo aún más de lo que estaba en la manta del sofá, tanto que parezco un burrito o algo parecido, no puedo subir arriba con Anaju de nuevo ya que tiene el sueño ligero y prefiero no despertarla, aún es pronto.

Al rato Mario baja las escaleras despeinado, con una camiseta blanca de y unos pantalones de cuadros que serán parte  de algún pijama de invierno seguramente.

Y no hay que ser ningún Albert Einstein para atar cabos rápidamente.

-¿Eva?- pregunta al verme en la sala
-hola - sonrío levemente
-es pronto aún, pensaba que estabais durmiendo aún- dice preparándose un café en la cocina
-no si Anaju sigue durmiendo, yo me he desvelado y eso - respondo
-entiendo - coge su café y se sienta en uno de los sillones y marca un par de veces un número en su teléfono pero nadie contesta
-así que te han hecho un "Ghosting" de estos eh - bromeo, Mario y yo siempre nos hemos llevado bien y tenemos bastante confianza, ha sido como la figura paternal que nunca he tenido, el me mira y ríe sin ganas
-toda la pinta tiene la verdad, ¿la has visto salir verdad? - toma un sorbo y yo asiento
-si te refieres a una mujer pelirroja con un vestido negro, si, la he visto - digo y él asiente- lo siento
-da igual tranquila, yo hubiese hecho lo mismo en su lugar - ríe - desde lo de Celia no quiero relaciones serias ni mucho menos
-lo sé, Anaju me lo dijo - respondo
-¿y tu? ¿hay algún chico "especial" por ahí? - bromea

Desgraciadamente sí lo hay Mario.

-oh créeme si lo hay, desgraciadamente lo hay - digo y ahora soy yo la que ríe sin ganas
-¿y quién es el afortunado? - dice - ¿mi hijo? - yo niego
-un rubio de ojos verdes- respondo e inconscientemente sonrío al pensar en él
-¿Hugo? -pregunta ¿qué? ¿Cómo lo ha podido adivinar tan rápido?
-¿qué? ¿Cómo lo sabes?
-el viernes vino Hugo a recoger a Anaju  por la noche y mientras Anaju terminaba de no sé qué le ofrecí una copa y me senté con él, y aunque no sea cotilla vi que habían fotos tuyas en su galería y - antes de que siga la interrumpo ¡¿qué acaba de decir?!

-¿fotos mías en su galería? - pregunto más confusa que antes
-si fotos tuyas normales, las que pude ver eran de ti en el escenario del instituto ensayando, se le cayó el movil al suelo y cuando lo recogí para dárselo las vi, y entre eso y que Anaju cuando le pregunte un rato antes sobre Hugo me dijo que solo eran amigos y que al él le gustaba o almenos le atraía otra chica pues he atado cabos cuando lo has dicho - dice, wow, osea que no soy tan irrelevante para él, una mini yo esta haciendo un baile de la victoria en mi cabeza ahora mismo

-tengo que decir que no me esperaba eso la verdad - digo
-se te nota hija se te nota - ríe - por tu sorpresa puedo intuir que no salís juntos ni nada ¿no? - niego y en ese momento baja Flavio y al vernos ignora a su padre y se dirige a la cocina después de darme los buenos días.

*en la cafetería*

-pues yo creo que este año Martí va a montar algo así como una clínica maldita - dice Bruno comiéndose un trozo de pan
-que va eso ya lo hizo un año, va a hacer una casa del terror seguro, vamos lo sencillo - añade Sam
-pues yo no tengo ni idea, es mi primera fiesta de halloween aquí- dice esta vez Maialen encogiéndose de hombros
-yo creo porque va a poner cuatro guirnaldas y ale - dice Gèrard y Martí aparece por detrás
-oye un poquito de respeto hombre que yo estas cosas me las curro - responde y se va fregando
-¿con los disfraces como vais?- dice Fla
-fatal, yo ni lo he decidido aún- digo bebiendo un sorbo de mi vaso
-tranquila que yo tampoco - dice Sam
-a ver como creo que ninguno se lo ha comprado ni nada ¿qué os parece si vamos el lunes todos juntos a comprarlos? - propone Anaju y todos asentimos- pues decidido, el lunes nos vamos todos al centro comercial