AMOR POR HONOR (ESTAMBUL)

Capítulo 5: ¿Culpable o inocente?

Onur POV

Había sucedido tan rápido como cuando un desastre natural arrasa con todo y nadie es consiente de cómo ha pasado o de porque no lo hemos previsto, eran sucesos que pasaban frente a nuestros ojos y aún no éramos capaces de procesarlo completamente, en cambio, preferíamos mirar y dejar que nuestros pensamientos y dolor no se mezclaran y crearan una tormenta. Impotencia, era una emoción que nunca pensé que iba a experimentar, a veces se cree que todo se tiene bajo nuestro control y debe ser tal y nuestras ordenes, en cambio, en aquel momento me encontraba sentado en la sala de mi propia casa sin poder caminar libremente, gente desconocida invadían tu privacidad, tocaban y caminaban en él con andares expertos. Era desesperante.

–Señor Onur. –El abogado Yilmaz se acerca a mí casi en silencio. –Van a llevarse a su hermano, es mejor que se preparé. –Murmura. Le miro con cinismo y consternación. –Tienen pruebas graves, no sólo es el informe del GPS, han encontrado el zapato que la chica llevaba aquella noche en su auto... Es suficiente para que sea detenido.

Un zapato verde chillón. No olvidaría nunca su diseño.

–¿Él lo ha hecho? –Refunfuño.

–Barış Bekiroğlu queda detenido por presunto sospechoso de la desaparición de Harika Aslıhan –Dice un comandante frente a mi hermano, su tono de voz era fuerte y autoritaria, inmediatamente, mi madre se pone en pie mientras le mira con ojos abiertos llenos de miedo y asombro. –Se ha encontrado bajo tu custodia un zapato de dama, un video de seguridad de la noche de la desaparición la cual concuerda con un informe de GPS, sin más que agregar... –Él se gira para llamar a los demás policías. – Espósenlo.

–¿Pero quien se creen? –Mi madre se para enfrente de Barış obstaculizando el paso de los policías. –No permitiré que toquen a mi hijo, se le acusa de algo absurdo, de gente enferma.

–Señora Bekiroğlu, si no se aparta también tendremos que detenerla. –Ella se voltea a mirarme.

–Onur haz algo, Onur, ¿Onur? ¡Onur! –Su histeria debió hacerme reaccionar, pero en cambio, solo miraba a Barış, ¿había sido capaz de mentirme? ¿había sido capaz de hacerle daño a otra persona?

–Deja Mamá, cada acción tiene su consecuencia. –Espeto, para así, tomar a mi madre del brazo para apartarla, ella empieza a protestar mientras empieza a llorar.

–¡Yusuf, haz algo! ¡Se llevan a nuestro hijo!

Ni siquiera podía ver lo que pasaba con mi hermano, no era capaz, no tenía el valor suficiente para verle en tal circunstancia. No podía entender en qué debía creer, en él o en las pruebas, tenía nauseas y mareos. En un momento de debilidad le volteo a ver, Barış me miraba con cierto miedo que me conmueve, ¿esperaba él algo de mí? ¿Qué pretendía? ¿Qué le ayudase? Intentaba mantenerme fuerte y creerle, pero hasta el más ciego vería la verdad. Entonces, negó con la cabeza.

–¡Hermano! No lo hice, no he sido yo, ¡Onur! ¡Onur! –Exclama nervioso mientras los policías empiezan a levantarle. –¡Tienes que creerme! ¡Soy inocente! No te mentí. ¡Onur! ¿Hermano?

Le escucho gritar mientras lo sacan de nuestra casa, aquello me había destruido totalmente, mi compañero fiel, no solamente era mi hermano, era mi mejor amigo, mi alma... Los recuerdos de nuestra infancia atormentaban mi mente, recuerdos de cuando jugábamos, de cuando sentíamos miedo, abrazándonos, sonriendo, recuerdos más felices... recuerdos donde éramos cómplices y confidentes. Iba a desmayarme. Necesitaba salir de ahí y aclarar mi mente.

Sin embargo, no sabía a donde escapar para no hacerme daño. Conduzco sin dirección, sin sentido y con furia contenida. Mi único lugar que pareció el más apropiado para esos momentos fue la oficina, por lo que, al llegar ahí, caminar por esos pasillos en los que él también había pasado y reído, me arrancaban el alma. Me recuesto en la pared resbalando hasta el piso.