Capítulo 7: Luz en el corazón

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Multimedia: Tolga Sarıtaş como Burak Aslan

Selen POV

Mis ojos apenas podían creer lo que miraban, estaba horrorizada y atónita, aquellos hombres habían salido de las sombras y se habían lanzado sobre Onur, aunque él había intentado defenderse aquello era imposible. Esperanzada esperaba que alguna alma piadosa caminará por ahí y podría ayudarle, pero cuando los minutos más pasaban, y nadie llegaba, pero tampoco detenían los golpes me decido por ser ayudarle. Encuentro unos palos de golf en los asientos traseros, me armo de valor, tomo uno de ellos para así bajarme del auto.

–¡Suficiente! –Exclamo firme. Los cuatro hombres se vuelven a mirarme. Uno de ellos empieza a reír fuertemente.

–¿De donde saliste belleza? –Él empieza a caminar hacía mí. –A ti no te golpearía precisamente.

–Un paso más y te juro que te golpeare hasta matarte. –Mascullo.

–¿Tú sola?

–¿Eres ciego o qué? ¿Acaso ves a alguien más que a mí? Aparte de brabucón, estúpido. –El hombre tensa el gesto para así, ponerse serio y fruncir los labios.

–Es mejor que te vayas de aquí, niña, no te metas en donde te conviene. Él ya es hombre muerto, y si no quieres terminar como él desaparece. –Espeta dándose media vuelta e invitando a sus secuaces a continuar con la golpiza.

En cuanto los cuatro hombres regresan a Onur, tomo el palo de golf fuertemente para así, echarme a correr y lanzarme sobre ellos, tirando del palo de un lado para otro golpeando a quien se cruzará en el camino. Intentan tomar el control del palo de golf pero evito que me lo quiten para así, golpear a uno en la espalda y otro en las piernas.

–Se ha vuelto loca. –Murmura uno de dolor. –Vámonos. Los cuatro salen corriendo calle abajo.

Hasta aquel momento me había dado cuenta cuanto estaba temblando, aún no respiraba con normalidad y podía jurar que el corazón me saldría por la boca, estaba histérica y tremendamente asustada. Inmediatamente, me tiro al piso junto a Onur quien yacía en ovillo con los ojos cerrados. Estaba malherido y gemía de puro dolor.

–Llamaré una ambulancia, tranquilízate, todo estará bien. –Lo arrullo entre mis brazos, no es hasta que saco mi teléfono de mi bolsillo que estaba descargado. –Tendrás que prestarme tu móvil. –Refunfuño registrando sus bolsillos, sin embargo, empiezo a entrar en pánico cuando me encuentro con que su teléfono se había roto. –Onur, no sé que hacer, pero estoy muy asustada y preocupada por ti. –Suavemente Onur me toma de la mano.

No sabía si era el hecho de que me tomará de la mano con tanta delicadeza o que estuviera malherido, pero ya había empezado a llorar.

–Tienes que conducir Onur, solo un poco de fuerza es lo que necesitas, iremos al primer hospital que veamos en el camino.

–No llames a la policía y tampoco me lleves al hospital. –Murmura. –Conduce, Selen.

Burak había intentando enseñarme conducir con su Toyota Corolla y si había sido difícil con aquella tecnología no podría imaginarme que sería de mí con aquella Porsche. Si Onur no habría muerto de los golpes, lo haría conmigo como conductora. No podría hacerlo, tendría que dejarle ahí e ir a buscar ayuda.

–Eres valiente, tú puedes hacerlo... –Gime con dolor. Resoplo. Entonces, le ayudo a ponerse de pie y caminar hasta su auto.

–Espero que cuando estrelle tu auto contra algún árbol me dejes pagarte por cuotas. –Balbuceo metiéndolo y acomodándole en el asiento del copiloto, él intenta reír.

AMOR POR HONOR (ESTAMBUL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora