Yo estaba en el trabajo, recuerdo que había pocos clientes en el bar esa noche así que sería aburrido, la puerta se abrió, y yo, con una gran sonrisa te di la bienvenida, pero al mirarte sentí como la noche se volvía hermosa.
Una historia Rubegeta l...
Chicos ya subíel primer capítulo de mi Omegaverse, vallan a verlo en mi perfil. Gano el final feliz, gracias a las personas que comentaron. Eso sería todo, ahora si disfruten.
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La cabeza me dolía, no vuelvo a tomar con Lely, ni siquiera recuerdo como llegue aquí, espera... ¿Donde estoy?, o... en el cuarto de Vegetta, espera, ¡¿POR QUÉ ESTOY DESNUDO?!.
Voltee a mi derecha y me encontré con el hombre más guapo del mundo, dios... todo eso me pertenece, se ve inclemente bien cuando está dormido, gire mi cuerpo para quedar frente a frente con el amor de mi vida, mala idea, un dolor se hizo presente en mis caderas, solté un quejido, ¿Que demonios pasó anoche?.
Vegetta: -Buenos días mi amor
Beso mis labios, párese que mis quejidos lo despertaron.
Rubius: -Buenos días...
Vegetta: -¿Te duele mucho?
¿Por qué demonios preguntas eso? Tendré que sacarte la verdad.
Rubius: -Si...
Vegetta: -Jeje, perdón... creo que me pase
Oh shit. Lo hicimos y no recuerdo nada, mierda, el peor novio.
Rubius: -Vegetta lo siento per- *no pude terminar*
Vegatta: -Tranquilo Doblas... entiendo que estabas cansado, talvez para la próxima...
¿La próxima? ¿Cómo que cansado?
Rubius: -Vegettita~ me duele mucho
Vegetta: -Tontito... como no te va a doler si te caíste de la cama...
Rubius: -¿Que yo que?
Vegetta: -No te acuerdas ¿verdad?
Diablos, se dio cuenta
Rubius: -No... lo siento...
Me besó, ¿como es que hasta recién levantado sus labios saben a café?.
Vegetta: No te preocupes chiqui, no paso nada realmente, te quedaste dormido y te veías tan lindo durmiendo que no quise molestarte
Dioses que vergüenza, tengo el mejor novio del mundo.
Rubius: -Samu~
Vegetta: -¿Chi?
Rubius: -Te amo
Me miró confundido, yo nunca le había dicho te amo, pero encerio amaba a este hombre.
Vegetta: -Yo también te amo Rub, te amo desde que te vi entrar al bar.
Rubius: -Que cursi De Luque
Vegetta: -Duerme un poco más
Rodeo mi cuerpo con sus brazos, yo apoyé mi cabeza sobre su pecho, cerré mis ojos y respire su perfume, volví a quedar dormido.
