Detestable Amor (2°PA)

Capítulo 10.

Judith.

Nunca estuve tan pero tan nerviosa de volver a casa, una azafata nos había informado que estábamos a punto de aterrizar en Texas y eso solo aumentaban mis jodidos nervios.
Mi papá y hermanos no tenían ideas de donde estaba metida realmente, sabía que vivía en una gran ciudad y que tenía una trabajo bien pago mientras estudiaba, lo único que era mentira de todo eso es lo de mis estudios porque los había postergado por unos meses más pero eso no significaba que nos lo haría, tardaría lo que tardaría pero igual cumpliría uno de mis sueños.

- ¿También tienes miedo cuando los aviones aterrizan? - escucho su voz muy cerca mío.

Fueron las horas de viaje más largas de mi vida y todo por estar encerrada a miles de metros de altura con un sexy hombre al cual le mentí diciendo que soy virgen y que solo tendría sexo con el que fuera mi esposo, todo para impedir que algo suceda entre nosotros, me gusta Dominic pero soy una tonta que no sabe diferenciar las cosas, sexo entre nosotros solo iba a generar problemas a mi sola, no voy a dejar que me lastime, me conozco y él podría destrozar mi corazón definitivamente.

- Tengo miedo de lo que pueden pensar mis hermanos cuando nos vean bajar de esto y de lo que pueden hacerte - comento mirando por la ventanilla del avión.

- ¿Por qué piensas siempre en lo que el otro pueda pensar? - inquiere.

- ¿A ti no te molestan lo que piensen? - le respondo con una pregunta.

- La verdad no - lo observo. - No me importa lo que piensen de mí, son mis errores, aciertos y por lo tanto mi vida - declara con tanta seguridad.

- Ojalá tuviera un poco de tu seguridad - acoto suspirando.

- Debes dejar de pensar en lo que dicen, ser tu misma porque es tu vida Jud - dice tomando mi mano para darle un suave apretón.

- Es más fácil decirlo que hacerlo - murmuro al mirarlo a los ojos.

- No pienses tanto, solo haz oido sordos a todo -

Tomo fuerte su mano cuando el avión empieza aterrizar y escucho su suave risa mientras no me suelta, la peor parte de los aviones siempre es cuando despegan o aterrizan, esa vibración que genera me da demasiado miedo.

- ¿Feliz de ver a la familia? - pregunta con una gran sonrisa.

- Si, ¿Estás seguro de esto? No tienes que hacerlo para nada ... -

- Te dije que sería tu novio, no quiero a otro hombre cerca tuyo - sentencia mirándome con esos intenso ojos grises.

- Tengo cinco hermanos y un padre sobreprotector, suerte con eso - digo suspirando.

- ¿Cinco? - consulta sorprendido mientras empezamos a levantarnos de nuestros asientos.

- Cinco. - tomo mi bolso. - Espero que tengas una buena cobertura médica o que tus huesos sean bastantes fuertes - digo mirando su cara de confusión.

Le di la oportunidad para que me dejé ahí y se vaya, después le las iba arreglar con mi familia pero él sigue con eso así que solito se está metiendo en la boca del lobo, en verdad me da pena de lo que mis hermanos le puedan hacer.

Las puertas del avión se abren, las escaleras despliega y jadeo al ver a mis hermanos gemelos Rafael y Leonardo que me miraban intrigados apoyados en la camioneta, sus caras decían todo, no les gustaba para nada lo que veían por eso tratando de poner a prueba las palabras de Dominic bajo las escaleras hasta que en el último escalón mis pies se chocan haciendo que caiga perdiendo toda mi elegancia.

- Torpe como siempre - lo escucho decir a Leo mientras Rafa se mata de risa.

- ¿Estás bien Jud? - dice Dominic a mi lado preocupado.