Pesadillas | TERMINADA |

Cap. 11

Paso un día, un día en el que Jack no comprendía completamente nada, había tratado de todo, tirar, empujar, congelar, escarchar y todo lo que se le ocurrió, pero nada funcionó. Estaba desesperado, y detrás de esa desesperación estaba la impotencia de no poder salir, sentía que en todo esto Pitch tenía algo que ver. Comenzó a odiar el hecho de ver el cielo, su única salida, y no poder ni acercarse. En ese momento se encontraba en el suelo, el largo de las cadenas en sus muñecas no le permitía muchas maneras para poder acomodarse. Miraba hacia arriba con anhelo de salir, pero al rato se quedo dormido dificultosamente, estaba apoyado en la pared, con las piernas recogidas y juntas, y sus brazos estaban a los costados de su cuerpo. Le dolía el cuello por la mala posición en la que estaba, solo pudo dormir como mucho media hora. Y luego estaban sus muñecas, y sus tobillos, que sufrían rasguños alrededor de la cadena que estaba alrededor. Tenía la boca reseca y el estomago completamente vacío.
- Hola Jack.- dice una oscura voz, el la escucha en su oído, pero en realidad allí no estaba. Se sobresalta y casi pega un pequeño saltito.
- ¿¡Pitch?!
-¿Sí?- dice el, no lo veía pero sabía que estaba cerca, mira al rededor.
- ¡Sácame esto! - le grita furioso.
- No.- dice seco.
-¡Sal de ahí maldito!- dice, odiaba no saber dónde rayos estaba, Pitch apareció enfrente de el, Jack trato de abalanzarse sobre el pero las cadenas no lo dejaron avanzar lo suficiente.
-¡Déjame salir!- le grita.
- Ahora? Pero si tenemos mucho para hacer- dice poniendo cara de puchero, Jack no lo entiende.
- ¿Que?
- Que te quedaras aquí mucho tiempo- dice.
- ¡Quítame esto!- solo escucha su risa, y eso lo enfurece.
Pitch no contesta, pero holle sus pasos cerca, Jack mira hacia todos los lados en ese pequeño lugar, pero no lo ve.
- Estarás solo Jack, para siempre, no quisiste estar de mi lado, pues esto es lo que te sucede ahora. Tendrás mucho tiempo para arrepentirte.- dice para luego desaparecer entre las sombras, Jack, que se había mantenido parado, tira de las cadenas pero solo hace un gran estruendo, se rinde y se deja caer en el frío suelo de aquel oscuro lugar.
No quería estar solo. Eso era lo que menos quería, su corazón se encogió pensando en que nunca saldría y pensó que Pitch se traía otra cosa entre manos. Se encargaría de averiguarlo.
...
Los días pasaron, Jack ya no luchaba por romper milagrosamente las cadenas, no encontraba su vara, sospechaba que Sombra se la había quedado, pero sin ella no podía hacer mucho. No volvió a ver a Sombra o a nadie más, de verdad estaba completamente solo, cada día sentía que la "habitación", por así decirlo, era cada vez más grande, como el vació que comenzaba a consumirlo por dentro. Veía hacia arriba con la esperanza de que alguien lo vea y lo saque, pero nadie pasaba y nadie lo sacaba de allí.
Pitch lo vigilaba de cerca, aunque el no sepa, tenía su vara en su poder y podría hacer lo que quisiera, o al menos eso pensaba. Planeaba usar su vara para ser invencible, pero cuando probó usarla, de esta no salió nada. Cuando el la usaba era un pedazo de madera vieja sin nada fuera de lo común. Enojado por que no había funcionado, decidió que sería mejor esperar a que Jack se consuma y allí podría finalizar su plan.
Los guardianes se encontraban desconcertados, Jack no aparecía, y las mini hadas no lo encontraban, todos estaban muy preocupados. Sara estaba destruida, la mataba por dentro no saber qué le sucedió a Jack y temía que el este sufriendo. Tooth y Sandman se pasaban día y noche buscando, pero no servía de nada, y al llegar la noche tenían que mandar, en el caso de Tooth las mini hadas, y en el caso de Sandman dejaba las luces por si solas. Norte puso a sus yetis a buscar, y Bunny ayudaba a Sara a buscarlo entre la ciudad.
No encontraron nada.
Y así pasaron días, luego semanas, que se transformaron en meses, y Jack se deterioraba por dentro, las líneas avanzaban un poco más que antes pero no tanto, le agarraban los "ataques" de vez en cuando, pero no podía ni tirarse al suelo a retorcerse de dolor, ya que las cadenas se lo impedían. Poco a poco líneas comenzaron a manchar casi todo su cuello, y aquella línea que cruzaba su labio, ahora, crecía un poco más arriba de su nariz. Jack comenzaba a pensar que aquello lo terminaría matando, y cada vez iba perdiendo más la fe de que algún día lo encuentren. Se preguntaba si lo extrañaban, si lo estaban buscando o si solo lo habían olvidado. Quería que lo busquen y lo encuentren, pero era poco probable, no quería que lo extrañaran mucho, por que temía que sufrieran, el estaba sufriendo, pero no quería que los demás también; de esa manera prefería que lo olvidarán, pero tampoco quería eso.
Tal vez hubiese sido más fácil si el nunca hubiera existido.
El invierno se acercaba, eso lo presentía, ya no hacia tanto calor, al menos para el, y se preguntaba que pasaría cuando llegara por fin y el no este para congelar o escarchar las cosas. Pensando en eso se dio cuenta de algo, algo que le dio miedo más que nada.
Si el no aparecía en invierno, los niños no creerían en el, por que las cosas no se escarchan solas, no nieva de la nada y las cosas no se congelan por cualquier razón; los niños que creen, como los primos de Sara o su hermano, ya no lo harán. Luego recordó lo que le dijo Norte de su centro, el representaba a la diversión, o algo por el estilo, pero si el no estaba los niños no se divertirían con peleas de bolas de nieve por ejemplo. Nunca se dio cuenta de lo importante que era para mantener el equilibrio, no se le había ocurrido. Pero ahora ve, que sí lo es.
Después entendió lo que Pitch quería, si todos los pocos niños que creían en el, ya no lo hacen, las líneas avanzarían, moriría en cuestión de días, pero... ¿quien le dijo que moriría? Y ¿si no muere? Y ¿si pasa algo peor?
Comenzó a plantearse muchas preguntas derivadas de aquellas, pero ninguna tenía respuesta, solo estaban allí para agobiarlo.

Pitch por otra parte, le encantaba ver el deterioro de Jack, el acabaría mal, lo sabían los dos, pero él sabía con certeza que sucedería, y por ahora todo estaba a favor de el. Solo le quedaba esperar a invierno, y luego le quedaba la navidad. Luego se encargaría de los demás, pero sin ilusión, sin invierno y diversión las luces se apagarían más rápido de lo que canta un gallo. Sombra se rió maliciosamente, mirando con cinismo el globo terráqueo con muchas lucecitas brillantes.
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Hola!! Logre terminar el capítulo, estoy siguiendo el otro pero no se si mañana voy a poder subir :( , se los voy avisando. En fin creo q no faltan muchos capítulos para terminar la historia, es bastante corta, ya el próximo es de los últimos, pasen x mi otra nove se llama "Shh..." :):)
Hasta el próximo cap. ---------->>