Lee Felix vive una vida muy normal y pacífica, universidad, apartamento propio, estabilidad económica, el sueño de todo adolescente de 19 años, pero que pasa cuando en una noche un chico lindo toca a su puerta de la nada, es en ese momento que toda...
-¿A que te refieres con no todavía?- se atrevió a preguntar Felix, temía que su vida corriera aún más riesgo en manos de este psicópata, un sexy y guapo psicópata.
-¿Seguro que quieres saber?- le dijo Chris con su manera altanera y superior de hablar, ya se estaba hartando de que siempre le hablara como si fuera un niño o una persona inferior a él.
-Si, o acaso ¿Eres tan idiota como para no entender una simple pregunta?- le dijo Felix de la misma manera, agregandole a lo que dijo una sonrisa ladina, tratando de verse seguro aunque por dentro estuviera temblando preguntándose porque le dijo algo así a un posible asesino.
Aunque esa pequeña valentía duro poco pues su miedo aumento mucho más cuando sorpresivamente Chris tomo sus mejillas con una de sus manos presionando hasta que los labios de Felix se abultaron.
Felix tenía una expresión que para Chris era como si estuviera viendo a un ángel, un ángel que te haría pecar con una simple mirada como la que tenia ahora, la cual le recordaba a esos animes lujuriosos que veía a escondidas de sus niñeras en su habitación a altas horas de la madrugada cuando se quedaba solo en casa.
Sus cejas estaban arqueadas hacia arriba, sus ojos empezaban a soltar pequeñas lágrima que comenzaban a nublar su mirada, sus mejillas, ahora más regordetas, empezaban a tomar un color cereza por la presión que los dedos de Chris hacían sobre ellas, sus pequeños pero esponjosos labios abultados hacia el le daban ganas de hacer cosas que solo en el infierno serían permitidas.
-Cariño, debes tener más cuidado con tu tono de voz conmigo, no quieres que termine enloqueciendo y te mate antes de tiempo, ¿O si?- le dijo con voz grave, una que Felix jamás había escuchado en el tiempo que llevaba interactuando con Chris.
¡Maldición!
Si Chris supiera de supiera de su pequeño fetiche con las voces graves...la usaría con el siempre y lo mataría de ataques al corazón.
Si Seungmin supiera de eso también, se pondría a reír a carcajadas enormes, pues Felix es conocido en la universidad por tener una voz bastante gruesa a pesar de su corta edad, lo conocían como "el chico con voz de macho azotador".
Y por muy curioso o raro que suene, es de su propia voz que su pequeño fetiche viene a hacer de las suyas, Felix como todo un adolescente gay hormonal se masturbaba casi todas las noches viendo vídeos de chicos follar incontrolablemente, jadeando, gimiendo, gruñendo, deseando que un día le diera la folllada de su vida como las que veía casi todas las madrugadas solo en su habitación, escuchar como gruñían tan grave esos hombres lo ponía a mil en un solo segundo.
Cuando cumplió 15 años fue cuando notó que su voz iba cambiando conforme pasaba el tiempo, se iba volviendo más grave, notaba que cuando estaba a punto de correrse soltaba gruñidos y maldiciones más graves de lo común, y el descubrimiento de su propia voz hacia que llegara a su tan anhelado orgasmo rápidamente.
Antes de cumplir 17 años se juró que jamás volvería a hacer una cosa como esa, se sentía raro, casi enfermo de que en algunos momentos su propia voz lo pusiera caliente al punto de venirse escuchandose a si mismo , y si que era muy poco común hacer ese tipo de cosas.
Desde entonces jamás volvió a masturbarse ni escuchar una voz grave o la propia a propósito hasta ahora, 2 años después y de la peor manera posible.
La forma en la Chris le hablaba inconscientemente hizo que un calor extraño que pensaba jamás volvería a sentir, al menos no hasta tener pareja, comenzará a nacer en su vientre bajo.
¿Que estaba pasando con él? ¿Exitarse porque un tipo increíblemente sexy, guapo y caliente lo estaba amenazando, con una voz que te daría la bienvenida al inframundo, de muerte?.
¡Eso es enfermo!
-No quiero...- respondió Felix con algo de dificultad por la presión que ejercían los dedos de Chris en sus mejillas que le hacían difícil el poder hablar.
-Muy bien precioso- le dijo mientras acercaba más su cara a la de Felix, tanto que podía sentir como el aire salía pesadamente de la nariz del menor por la cercanía de Chris y por la forma tan vulnerable en la que se encontraba en ese momento- Eres un buen chico, verdad?-
Espera un momento, ¿Que está pasando?.
¿Acaso un complejo de Dom estaba naciendo en Chris?.
Chris es un chico algo fetichoso, si, pero jamás tuvo interés en temas como "Sugar Daddy and Sugar Baby" o "Dom and Sum".
Claro, le encantaba tomar el control a la hora del sexo pero jamás había sentido lo que estaba sintiendo en estos momentos, nunca antes había tenido estas emociones con alguien como Felix, a alguien que haya secuestrado para ser más específico.
No sabía cómo expresar lo que estaba pasando por su mente en esos momentos, quería proteger al chico que tenía enfrente y a la vez hacerle todo el Kamasutra.
¿Acaso eso sentían los Doms con sus sumisos? Pues vaya mierda.
Aunque en ese momento no lo veía tan malo.
Felix no respondió.
Con un poco de brusquedad Chris soltó la cara de Felix y este apartó la vista rápidamente, no quería que notará que se le había subido el color a toda su cara y parte de su cuello, aunque ya era tarde para esconder su reacción.
-Espero te acostumbres a esta vida, pues pasaras un muy largo tiempo aqui- dijo Chris volviéndose serio, alargando la vocal "u" para enfatizar lo mucho que estaría Felix en ese lugar aún desconocido para el menor.
-¿Al menos podrías desatarme? Me duelen los brazos ya- le dijo Felix con un toque de furia, estaba desesperado, quería salir de ahí ya, a como diera lugar.
-En unos minutos vendrá alguien para hacerlo, te llevará a una habitación y ahí estarás más cómodo, su alteza- dijo lo último con sarcasmo y soltando una risa sacarrona que su único objetivo era molestar a Felix, y lo logró.
Salió de ese lugar a paso lento y le echó una última mirada al menor antes de cerrar la puerta, y solo entonces Felix se permitió soltar unas lágrimas que llevaba reteniendo desde que Chris entró al lugar, se sentía ansioso, no sabía qué hacer, solo esperaba que en algún lugar alguien estuviera velando por el, tratando de buscarlo.
Y tomándolo desprevenido, la puerta se volvió a abrir.
. . . . . . .
WUUUU OTRO CAPÍTULO
Estoy muy feliz por cómo va a avanzando la historia y cómo van aumentando las leídas y votos también, estoy muuuuygradecida por ello.
Por cierto, están listas para el nuevo Comeback, porque yo no.
Si no siquiera el propio Chan está listo para lo que se viene peor nosotras 😅
Pero bueno, sin más que decir, no olviden comentar lo que les gustó de la historia o alguna sugerencia y votar si les va gustando.
Nos vemos hasta la próxima
Bais ❤️
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
