~Humo de la noche~ Banglix

El día esperado

Los días se fueron volando como hojas secas en la época de otoño, para desgracia de unos y ventaja de otros el sábado llegó inesperadamente rápido para todos en esta historia.

El día comenzó con Felix levantándose temprano para poder preparar bien su sorpresa, tenía muchas cosas en mente para el día completo, primero iba a llevarle el desayuno a Chris a su oficina ya que esté usualmente no desayunaba, para el almuerzo iba a pedir el favorito de Chris, deditos de pollo picantes con salsa agridulce y para finalizar iba a hacer una cena espectacular, bueno, le diría a los cocineros que prepararán crema de calabaza como entrada y costillas de cerdo con puré de papas como plato fuerte, luego lo llevaría al salón principal que estaría decorado por los sirvientes, mientras se llevaba a cabo la cena, para dedicarle una pequeña canción y un baile juntos para terminar su día haciendo el amor en su habitación.

Estaba tan emocionado por ese dia, había planeado todo en esa semana más la noche anterior les contó toda la sorpresa a los sirvientes y cocineros mientras Chris estaba trabajando, estos aceptaron felizmente en ayudar pues nunca nadie había preparado algo tan especial para su jefe y estaban agradecidos con el menor de poder participar en esa sorpresa.

A las 7:00 am Felix ya estaba listo en su habitación, ya bañado y cambiado cómodamente para ir a la cocina a preparar el desayuno de su amado, Chris comenzaba a trabajar a las 8 y ya que hoy era su día libre no trabajaría todo el día y para en la tarde estaría libre de su trabajo, cuando llegó a la cocina vió que los cocineros ya tenían casi todo listo, un bowl grande de frutas, 2 pequeños platos de crema batida y otro de chocolate, 2 vasos de jugo de manzana y un plato pequeño de galletas de avena.

-Joven Félix, ya casi está listo todo, solo falta ponerlo en la charola y podrá llevarlo a la oficina del señor Bang- dijo una de las cocineras.

-Muchas gracias por ayudarme, esto no tiene precio para mi- dijo Felix con una pequeña reverencia a los cocineros y sirvientes del lugar.

-No tienes nada que gradecer- dijo Sana entrando a la cocina -La familia Bang nos ayudó mucho en nuestros momentos de dificultad, Chris es muy importante para nosotros y estamos felices de que tú lo hagas feliz-

-Sana- dijo Felix sonrojado.

-Es la verdad, Chris nunca ha sido bueno en el amor y desde pequeño nunca supo expresar sus sentimientos, pero contigo- dijo Sana poniendo sus manos en los hombros de Felix -El es alguien diferente, más suelto y risueño como cuando era un niño-

-A pesar de las circunstancia Chris ha sido bueno conmigo y es de la única forma en que puedo agradecerle-

-Eres una gran persona Lix, espero que algún día Chris y tú tengan un felices para siempre-

Sana se fue de la cocina para supervisar a los guardias, Felix pidió que ese día todos en la casa descansarán para que la casa estuviera tranquila para su novio y él, Sana hizo lo que pidió el menor pero para no correr riesgos dejó solo a los dos guardias de la entrada y uno en el cielo.

Félix le pidió a uno de los sirvientes si podía vigilar los movimientos de Chris para avisarle cuando llegara a su oficina, cuando el sirviente dió la señal todos comenzaron a moverse, toda la comida fue puesta en la charola y desde la puerta de la cocina los sirvientes y cocineros veían como Félix iba con la comida en mano deseándole la mejor de las suertes.

Al llegar a la oficina de Chris con un poco de dificultad logro abrir la puerta y al entrar vió todo muy ordenado, la mesita de centro con los sofás y los diferentes muebles del lugar eran de distintos tonos de café mientras que las paredes eran blancas, cuando entro por completo vió a Chris concentrado con la vista en su computadora viendo quién sabe que, dejo la charola en la mesita de centro y tomo camino al escritorio donde Chris estaba trabajando y se sentó frente a él.