Mi Vecino (Jelsa)

"Primer día en la selva".

Elsa.

*BEEP BEEP BEEP*

¡QUE ALGUIEN APAGE ESA COSA CARAJO!..

Estiré un brazo para apagar esa maquina infernal de mierda, sinceramente, no la soporto. Literalmente violé la mesa de noche en busca del botón, hasta que lo encontre. Bien, aquí vamos.

Me senté en la cama y estiré los brazos hasta que me sonaron, y solte un bostezo digno de un oso polar. Me levanté y arrastré mis pies hasta el lavabo del baño, me mire en el espejo, meh estoy bien, duermo con el cabello atado despues de todo, solte mi cabello y lo cepille hasta que quedó bien liso y me lave los dientes. Regresé a mi habitación y mire el reloj:

6:45 AM.

Oh, la escuela empieza en 1 una hora... ¿Debería despertar a Anna y Punzie..? Mmm nah. Recogí mi libro de la mesa de noche y cuando estaba dispuesta a salir por la puerta hacía abajo, sentí que alguien me miraba, con cuidado asome mi cabeza por encima del honbro, era el... mi vecino, el peliblanco ojos azules super sexy... esperen ¿Qué? Él me miraba y sonreía, no como ayer, sino... más ¿Sincero?... sí, tenía una sonrisa amigable ¿Qué hacía despierto a esta hora?... él no dejaba de mirarme, me sonrojé, y al parecer lo vio ya que se rió un poco y volvió a sonreirme, tiene una sonrisa muy blanca y bonita...

Me gire hacía la puerta ¿Que estoy diciendo? Ugh. Volví la vista a la venta por ultima vez y él ya no estaba, suspiré y baje las escaleras para desayunar, mi tía estaba ahí.

-Oh Elsa ¿Que haces tan temprano querida?-Me preguntó sin apartar ni por un centésimo la vista del tocino-¿Quieres desayunar?-

-Claro, pero primero iré a despertar a las chicas si no es molestia-Dije sonriente.

-Por supuesto que no, las espero aquí-Me dijo ella sonriente.

Subí las escaleras y golpé la puerta de Anna con mi puño.

-¿Anna?-Pregunte y espere unos segundos hasta que escuche una señal débil de vida... un ronquido, típico.

Entre en el cuarto de mi hermana solo para encontrarla echa un tronco, me le acerque, esto requiere medidas drásticas.

-Anna...-Empecé a susurrarle-Si te despiertas ahora...no habra chocolate en el desayuno para ti-

Se quedó callada y roncando unos segundos...pero luego su cerebro captó las palabras "desayuno" y "chocolate".

-¡ESTOY DESPIERTA!-Gritó Anna abriendo los ojos y sentándose en la cama-Oh... ¿No hay chocolate?-

Me reí, ella y su chocolate van juntos como Batman y Robin o Romeo y Julieta, aunque sin la muerte del final.

-Alistate en menos de cinco munitos y ya veremos-Le dije mientras me paraba de su cama, todavía me falta Punzie.

-¡Yes! Tus "ya veremos" siempre son un sí-Dijo Anna levantándose a la velocidad de Flash.

Cerré la puerta de mi cuarto, una menos queda otra. Me dirijí al cuarto de Punzie e hice lo mismo que con Anna. Toque a la puerta y esperé.

-¿Punzie?-Pregunte al no escuchar siquiera un ronquido entré. Y como Anna, mi prima yacía dormida como Blancanieves, aunque parecía estar en coma por su cara sería, que raro.

-Punzie... -Susurré en su oido mientras con una mano le sacudiá el hombro-¡Punzie despierta!-

Punzie, aún dormida, me habló.

-Mmm dejame en paz Eugene-

¿¡Eh!? Que yo sepa mi nombre es Elsa, no Eugenio... o como se dija.