Algunos meses después de la guerra, Sakura pide una misión lejos de Konoha, por azares del destino logra abrir una fisura dimensional que la lleva a un lugar extraño, llena de criaturas desconocidas y Shinigamis.
No solo tendrá que adaptarse a aque...
El Seireitei era un desastre, no solo estaban alterados por la infiltración de los ryokas y todo el alboroto que armaban en diferentes puntos del lugar.
Había una noticia aún más impactante, el reciente asesinato de un oficial de alto cargo...
Unohana revisaba el cuerpo, no había duda, le habían atravesado el corazón de forma limpia con una zanpakutō.
― Isane, llama a Kira ― pidió la capitana.
Su teniente no tardó en llegar con el rubio, teniente de la tercera división.
― Me llamó, Unohana-taicho...
― ¿Es cierto lo que dicen? ¿Quién fue la persona responsable de tal acto? ― Unohana fue al grano, sin embargo no alzó la voz.
― Si... quien asesinó a Abarai Renji fue la prisionera que escapó recientemente de su celda, aún no nos han dado su nombre pero es una chica de cabello rosa, yo mismo vi cómo sacaba su espada del cuerpo de Abarai-kun para después escapar, aún no hemos podido encontrarla ― concluyó su informe Kira.
― Entiendo, puedes retirarte.
El rubio salió de la habitación, le dolía ver el cuerpo sin vida del teniente de la sexta división, su amigo desde la academia.
― Abarai-kun... ― Kira apretó con fuerza su mano ― capturare a esa persona...
Izuru Kira aun podía ver con claridad los ojos vacíos de la mujer de cabello rosado y su rostro lleno de la sangre de Renji, el momento en que retiraba su espada del pecho del pelirrojo
Después escapó sin dejar rastro alguno, sin que él pudiera siquiera pudiera hacer algo...
Todo el Seireitei sabía lo que había hecho y estaban tras de ella, no tardarían en encontrarla.
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Horas antes.
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Sōsuke Aizen...
Sakura estaba tensa ante la sola presencia del hombre, por el haori blanco lo pudo identificar como un capitán, algo le había dicho Urahara de la forma de vestir de ese lugar...
― Tranquila pequeña, no voy a atacarte ― comentó Aizen con una sonrisa al ver tensa a la joven.
Sakura relajó la postura... Podía confundirlo mientras ella negara todo.
Daba gracias haberse puesto un Jutsu de transformación antes.
― Que cosas dice Aizen-taicho ― le había dado su nombre, tenía ventaja ― Creo que se equivoca de persona, yo solo vine a observar todo el alboroto.
El hombre no había dejado de verla directamente y de sonreír...
― Ooh ¿Es así?
― Si me disculpa ― la chica hizo una reverencia hacia el hombre y se dio vuelta para marcharse.
