EL ECLIPSE ✔️

CAPITULO 18 FINAL

CAPITULO 18

Minutos antes del Eclipse

"¿Cómo has hecho eso? Espera un momento, ¿cómo lo puedo hacer yo también?"

Le miré con los ojos como platos, pero al segundo me di cuenta de que podía ser obvio lo que estaba ocurriendo, así que me giré de espaldas para no mirarle, tan solo esperé una respuesta. Algo en mí predecía que el final estaba a punto de comenzar.

"Puedes porque es mi poder, y puedo compartirlo, no lo suelo controlar, pero ahora funciona y qué mejor momento"

Allí estábamos comunicándonos con la mente y minutos antes de que todo se desatara.
Me giré de nuevo, esta vez disimulando un poco mejor, Siena le había puesto una mano en el hombro y le susurraba algo al oído. Kaleb asintió serio, sin embargo, ella sonreía aun con sangre seca entre las encías. James y sus hombres se habían dado la vuelta después de cerrar mi jaula de nuevo y se dirigían de nuevo a los coches. Ya no podía ver a mis amigos, en algún momento se abrían introducido de nuevo en los vehículos. No paraba de sentir una responsabilidad enorme encima de mis hombros, me sentía como el tío de las películas de Misión Imposible, en el que todo el mundo confía para que literalmente solucione algo que es imposible de arreglar, aunque curiosamente pero no tan sorprendentemente siempre había un final feliz. Claro que esto no era una película, ni mucho menos podrías predecir que todo se arreglaría al terminar.

"En unos minutos la nave Pegasus lanzará una especie de energía directa hasta tu jaula, no solo te afectará a ti, sino al resto de la población. No sé con qué consecuencias, pero lo que sí sé es que pretenden convertirte en una soldado invencible"

Una gota de sudor me recorrió la frente hasta llegar a mi nariz y después a mis labios, estaba salada, como el agua de mar. Por unos instantes la imagen del océano se coló en mi mente dejándome el pulso tranquilo y apaciguado, ¿era yo la que estaba realmente pensando en aquel majestuoso paisaje? Le respondí de vuelta intentando no mover los labios puesto que esto de la telepatía era nuevo para mí. Hice caso omiso a la información acerca del rayo que estaba a punto de atravesarme y me concentré en que mis neuronas le siguieran la conversación.

"Me traicionaste, y me drogaste por la espalda, pero te reconocí, cómo quieres que confié en ti ahora, cuando ya no queda tiempo ni nada que salvar"

— ¿Kaleb? Qué narices haces, quedan 40 segundos para que impacte, metete en el coche. – Siena se dio la vuelta para lanzarme una última mirada llena de furia y asco y después le cogió del brazo y tiró de él como si se tratase de una marioneta, aunque muy probablemente lo fuese.

"Era la única opción que teníamos en ese momento, no lo hubiésemos conseguido de ninguna otra forma, sabía que cabía la posibilidad de que nos estuviesen esperando en la estación de tren, lo hice por los dos, ahora creen que te entregué voluntariamente y me lo agradecen, pero no saben que sigo siendo un traidor para ellos, El eclipse impactará, pero aún tengo un As bajo la manga"
Le miré a los ojos y supe que sería la última vez que lo vería, no me preguntes como ni por qué, pero lo supe. Sabía que jugábamos a todo o nada y ahora era el momento de poner las últimas cartas sobre la mesa para saber quién ganaría la partida.

— ¡Espera! Sea lo que sea que vayas a intentar hacer no lo hagas, no quiero que nuestro tiempo se agote– eso había sido lo más lamentable que podría habérseme ocurrido en ese preciso momento, pero lo dije, estaba a punto de hacer una declaración de amor. – Sé que no me traicionaste, al menos eso quiero creer, pero ya da igual, no queda tiempo y quiero darte las gracias por haber estado a mi lado estos días, he vivido una verdadera aventura, aunque haya perdido a mis seres queridos por el camino. Daría lo que fuera por volver a besarte.